Mónica López: “No vamos a borrar de un plumazo algunas cosas que se hicieron bien”

En medio de las tensiones en el kirchnerismo por las primarias como paso previo a las elecciones generales de octubre, en el espacio de Francisco De Narváez se muestran conformes por haber seguido siempre “un mismo camino”. De todos modos, dicen estar “expectantes” respecto al eventual acuerdo distrital con la UCR. Así lo manifiesta la diputada Mónica López, que suena como posible acompañante de De Narváez en la fórmula bonaerense o como eventual candidata a intendenta de Avellaneda.
En esta entrevista con NOVA, la legisladora deja además una definición poco usual en la cotidianidad de la discusión política vernácula: “No vamos a borrar de un plumazo algunas cosas que se hicieron bien”. Y asegura, también, que el kirchnerismo nacional se dio cuenta de que el gobernador Daniel Scioli es un “mojigato de la política”.
- ¿Cómo viene el desarrollo del espacio de De Narváez de cara a la campaña electoral?
- Trabajando mucho en la Provincia, en cada uno de los distritos. Con recorridas, caminatas, reuniones en los barrios y con instituciones. Es un trabajo de base con una militancia muy profunda, cosa que no veíamos hasta hace unos años, además del ingreso de este nuevo peronismo que se está armando, y que tiene que ver no con lo nuevo sino con las buenas formas de hacer política. Ahí es donde empezamos a trabajar de otra manera en el peronismo, y la gente eso lo siente. Lo siento cuando De Narváez va a los barrios, se siente que es otro peronismo el que está empezando a surgir.
- Más allá de ese desarrollo de base en el Conurbano, ¿cómo resulta esa misma tarea en los distritos rurales?
- Exactamente igual. No hay diferencia. Nosotros hacemos el mismo estilo de recorrida de territorio. Desde la clase más humilde hasta las instituciones, pasando por la clase intermedia. Pero también con la gente común, a la que le contamos cuáles son nuestros planes y propuestas para gobernar la Provincia.
- ¿Cuáles son los principales reclamos que encuentran?
- La seguridad. Y, en algunos lugares de menores recursos, mucho reclamos de vivienda. Hay un déficit habitacional muy grande en la Provincia. Todo lo que se ha construido tiene que ver con los planes federales de vivienda, pero no con la provincia de Buenos Aires. Por otro lado, tenemos el reclamo de trabajo, la falta de infraestructura en educación. Hay chicos que están fuera del sistema porque no hay escuelas públicas que los contengan; el primer empleo en los jóvenes, su accesibilidad. Hoy por hoy, hay muchos jóvenes de la Provincia que ya tienen hijos, han formado una familia, y no tienen ni siquiera el primer empleo y deben sobrevivir y subsistir mediante algunos planes que les pueda dar el gobierno nacional y provincial. Pero están fuera del sistema. Viven en las casas de los padres, abuelos y tíos. Y la verdad es que necesitan un lugar para vivir, y necesitan trabajo.
- ¿Cómo se recupera a esos chicos?
- En un plan de gobierno, hay planes de corto, mediano y largo plazo. Con el primero, hay algunas cosas que no se pueden cambiar. Porque, hasta que no se crea el plan a mediano y largo plazo, que tiene que ver con la educación, la seguridad y el empleo, además de la salud, no se cambian las cosas. No se puede tener un plan de seguridad si no se tiene la educación de por medio y el trabajo. Los jóvenes se insertan manteniendo algunas cosas que sí están bien hechas, y cambiando aquellas que hay que cambiar.
- ¿Cómo cuáles?
- El asistencialismo, por ejemplo, hay que cambiarlo. Porque hay un montón de gente afuera de ese sistema asistencial, que tiene que ver con que, aquel que menos tiene, perciba aunque sea un subsidio. Pero también, y esto se aprobó en la última sesión de la Cámara de Diputados, tiene que ver con el Registró Único de Beneficiarios de Planes Sociales, elaborado por nosotros el año pasado, y que ya tiene media sanción. Hay un montón de chicos y familias fuera del sistema, pero hay otros que perciben cuatro o cinco planes y otros que no perciben nada. Y esos que perciben cuatro o cinco son los dueños de los planes y, a discreción, los reparten. Entonces, creando un registro único, y público, vamos a saber quiénes son los que perciben los planes, por qué, y por qué hay otros que no los perciben, y empezar a trabajar coordinadamente entre Nación, Provincia y municipios para que le llegue esa mano solidaria a toda la Provincia.
- Usted mencionaba cosas que se habían hecho bien, lo cual implicaría reconocer algunas políticas del oficialismo. ¿Cómo se rompe con esa lógica en la que todo está bien o todo está mal?
- Brasil, Chile y Uruguay salen adelante cuando empiezan a reconocer que hay otros gobiernos, de distintos partidos políticos, que algunas cosas las hicieron bien y las sostienen con el tiempo. Eso se llama políticas de Estado. Cuando se empieza a desconocer aquello que está bien, y se quiere cambiar, la verdad que se empiezan a cometer errores. Hay que sostener las cosas que se hicieron bien: el ingreso universal a la niñez, la asignación universal a la mujer embarazada a partir del tercer trimestre; tengo mis cuestiones con las cooperativas, pero tampoco está mal: no entraron al sistema, están en negro, pero de alguna manera están sosteniendo un ejército de gente humilde que no tiene salida laboral. Esas son las cosas que hay que sostener, aunque no hay que hacerlo indefinidamente sino hasta empezar a dar batalla contra la desocupación y contra esa situación que hace que una mamá no pueda darle de comer a su hijo. Esas cosas deben resolverse con políticas de Estado.
- ¿De qué manera?
- Comenzar a fomentar el empleo, que trae seguridades jurídicas y hasta inclusive económicas, porque una persona que trabaja no sabe si mañana la van a echar; a alguien que percibe la cooperativa y no va al acto de un puntero político, quizás le cortan la cooperativa. Eso es inseguridad también, y a la gente le tenemos que dar seguridad desde la política, lo judicial y lo social. Nosotros no vamos a borrar de un plumazo algunas cosas que se hicieron bien. En otras, obviamente, discrepamos.
- ¿Están las condiciones dadas para elaborar políticas de Estado, o hay que crearlas?
- Está todo creado. Hay que ponerse a trabajar y volver a la normalidad. No hay más nada por crear. El tema es cómo hacer para lograr que el joven tenga su primer empleo, cómo hacer para lograr que tengamos viviendas dignas para la gente, para que puedan vivir en un ambiente digno. Estas son las cosas que tenemos que hacer. Estamos obligados como políticos a hacerlas, y esas son las políticas de Estado. Tenemos las leyes, tenemos la capacitación para hacerlo, la capacidad y, además, tenemos ganas de resolverle los problemas a la gente. Así ya no se puede vivir más. Siempre digo: lo invito a Daniel Scioli a recorrer la Provincia con nosotros, y que escuche lo que dice la gente. La política no se hace con el escritorio, se hace afuera y en la calle. Y también siempre digo que las encuestas también están en la calle, no en un laboratorio de ideas.
- Usted siempre hace referencia en su discurso a la familia como un ámbito de contención, pero la realidad es que hoy tenemos un contexto de familias disgregadas. ¿Cómo se combinan estos dos elementos?
- Es cierto, hay muchas familias disgregadas. La contención viene desde el Estado también. Cuando se le da seguridad a aquella mamá que manda su hijo a la escuela, y va a estudiar, no a comer, hay una contención. Si sólo se le propone a la mamá el ingreso universal a la niñez con los requisitos de que el chico vaya a la escuela y se vacune, estamos olvidando el factor fundamental, que es la educación. Entiendo el dinero, pero entiendo fundamentalmente la educación, porque ese chico que fue educado va a poder tener el día de mañana una salida laboral. Entonces no pongamos el dinero por sobre las cosas. Es importante, porque se vive, pero a partir de eso es importante que el chico se educe y se vacune. La disgregación empieza cuando el papá no tiene trabajo y tiene que salir a buscarlo, y/o familias que delinquen, en las que el papá está preso, detenido, además de la violencia de género, violencia familiar, violencia contra los menores, es decir, hay un montón de conflictos que hay que empezar a resolver. Hay un factor que tiene que ver con la cultura, la educación y la falta de posibilidades.
- Pasando al plano político, ¿cambia la relación de fuerzas en el espacio de De Narváez de cara al acuerdo con la UCR?
- Nosotros estamos expectantes. Tenemos la propuesta de Francisco De Narváez gobernador, pero también el Peronismo Federal de la Provincia tiene una propuesta a nivel nacional. Tienen que avanzar no sólo los acuerdos políticos/electorales, sino los acuerdos programáticos. Esto es fundamental para gobernar. No es fácil un acuerdo programático para la seguridad, la educación, la salud, la vivienda. Esos son los puntos que deben coincidir con ellos. Si difieren, intercambiar ideas, pero empezar a gobernar en conjunto. Cuando uno gobierna, no lo hace para una elite, sino para todos. La construcción de partidos políticos, de una gran concertación nacional que derrame en las provincias y los distritos, es la única herramienta que tenemos nosotros para gobernar, y gobernar bien, no para un sector exclusivo.
- ¿Cómo es la relación en la Cámara de Diputados con el bloque pro-peronista que recientemente se separó de lo que era Unión Pro?
- Buena, como con todos los bloques, y como siempre. La política no se tiene que transformar en una cuestión personal. Ellos tomaron decisiones, nosotros no estuvimos de acuerdo y lo planteamos. Ellos sostienen sus decisiones y criterios, nosotros sostenemos los nuestros.
- ¿El tema de las colectoras tuvo espacio en las discusiones del denarvaísmo?
- Sí. Nosotros salimos a decir que era una locura plantear las colectoras, y que nos parecía una falta de respeto hacia los dirigentes políticos, siendo colectoras o de “adhesión”, que es su nuevo nombre. Pero el oficialismo es el que digita este tipo de normas, nosotros nos mantenemos con lista de unidad.
- ¿Cómo prevé el escenario electoral en la Provincia, sobre todo para el oficialismo, con la eventual candidatura de Sergio Massa en las primarias del PJ?
- A ver: evidentemente, algo está fallando en la Provincia. Están fallando las políticas de gobierno en la Provincia y eso lo nota el oficialismo a nivel nacional, y quiere darle a la gente alternativas y chances de que vote lo que mejor le convenga o mejor represente su idea. Las alternativas que tiene el gobierno nacional con respecto a los candidatos tienen que ver con darla la chance a la gente de que elija lo que mejor prefiera, de no imponer un candidato. Me parece que no están de acuerdo con Scioli, que saben que es un mojigato de la política, y me parece que no lo quieren como gobernador.
- ¿Se siente más cómoda como candidata a vicegobernadora o como postulante a intendenta de Avellaneda?
- No pasa por la comodidad. La política no es una cuestión de comodidad ni de oportunidad, sino de convicción del espacio en el que se está. Cuando se pierden las convicciones de ese espacio, hay que irse a buscar un lugar de contención o a su propia casa. Sobre esa posibilidad, Francisco tomará la decisión en unos pocos días, y decidirá quiénes son los compañeros que lo acompañarán en una fórmula y, además, los representantes en los distritos de Unión Celeste y Blanco.