Luján: Charla informativa sobre la Ley de Medios.

En el Teatro El Galpón, estuvieron presentes integrantes de la AFSCA, organismo encargado de aplicar la normativa.También disertaron trabajadores de la cooperativa local Pares TV y el periodista Javier Romero, ex panelista de Duro de Domar.
A pocos días del famoso 7D, la mesa local del espacio Unidos, Organizados y Solidarios llevó a cabo una charla informativa sobre la Ley de Medios. La actividad se desarrolló en el Teatro El Galpón y contó con la presencia de funcionarios de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA). Además, disertaron trabajadores de la cooperativa local Pares TV y el periodista Javier Romero, ex panelista del programa Duro de Domar. 
La propuesta contó con la asistencia de estudiantes de diferentes escuelas del distrito que llevan a cabo experiencias comunicacionales vinculadas a la radiofonía, como así también impulsores de Radio en Movimiento, espacio surgido en la Colonia Cabred para pacientes externados.
Diego Gusmerini, de Pares TV, contó la historia de la propuesta televisiva que surgió en 2008, primero como productora de contenidos, y que hoy llega a los hogares a través del Canal 3 de aire o por intermedio de la web (www.parestv.com.ar). “Para poder pelear espacios de comunicación contra grandes empresas, la única manera es el formato de cooperativismo”, expresó Gusmerini.
Por su parte, el conductor del noticiero de Pares TV, Ariel Senestro, agradeció la invitación ya que “nos hace muy bien esto, porque a veces las fuerzas aflojan y parece que la pelea se pone demasiado dura. Pero al otro día amanece y se pone en marcha el día a día”.
“Esto tiene mucho de sueño, una buena cuota de locura de lanzarse al vacío por algo que vale la pena. La cosecha viene bien, las gratificaciones son muchas. Esperemos estar a la altura y hacer el aporte de construir un canal de televisión en Luján”, agregó Senestro. 
Como coordinadora de la AFSCA de la zona oeste del Gran Buenos Aires, Graciela Romanelli especificó que “los debates por una nueva ley de medios empiezan con el retorno de la democracia, por la necesidad de tener una ley que no fuera una rémora de la dictadura, y además que reflejara el sentir de todos los ciudadanos”.
“En 2004 se constituyó un espacio conformado por muchas organizaciones sociales, de donde surgieron los 21 puntos, que finalmente estuvieron contenidos en la ley. Fueron más de 200 organizaciones. La ley la hicimos entre todos y hoy estamos defendiendo nuestra construcción, que se dio a la luz de la democracia y a partir de las necesidades de todos y todas”, expresó Romanelli. 
Sobre el rol de la delegación que tiene a su cargo, la invitada expuso que se propone como un espacio de participación y capacitación. 

DETALLESMariano Carril, de la Dirección de Proyectos Especiales de la AFSCA, fue el encargado de especificar los alcances de la ley, en un marco de informaciones cruzadas que suelen generar confusión al respecto: “Fueron 29 los proyectos de ley que no llegaron a tomar estado parlamentario desde 1983. Por presión de los grupos que concentran la comunicación, todos se cayeron y por eso seguíamos con el decreto-ley de la dictadura, que establecía un paradigma comercial”.
Carril marcó un aspecto central de la normativa aprobada en 2009 al aclarar que “la ley no regula contenidos, cualquier cosa que se diga en sentido contrario es parte de maniobras para desacreditar este proceso. La ley plantea cambios en las condiciones de producción de esos contenidos, pero nadie está diciendo que tal o cual cosa no se puede decir o hacer”.
Entre los sujetos de la regulación se encuentran las emisoras de radio y televisión analógicas y digitales, las emisoras comerciales y no comerciales, las señales que se transmiten por los medios pagos, los proveedores de los servicios de TV por suscripción (digitales, codificados o cables), los productores de contenidos y las señales audiovisuales por internet con una programación continua.
El funcionario indicó que “el gran cambio que trae esta ley es visibilizar nuevos actores”, al especificar que el espectro radioeléctrico se divide en prestadores comerciales, aquellos sin fines de lucro y los de gestión pública (los diferentes niveles del Estado, universidades, la Iglesia Católica y los pueblos originarios). Sobre este último punto, cada provincia pasará a contar con una radio AM y otra FM, y una señal de TV abierta, mientras que los municipios contarán con una emisora de frecuencia modulada. Las universidades nacionales, por su parte, podrán sumar un canal de TV y una radio. 
“En cuanto al sector privado, tienen que ser empresas creadas para dar servicios de comunicación audiovisual. No pueden tener vinculación con capital extranjero en un porcentaje mayor al 30 por ciento, salvo en los casos en los que existan tratados de reciprocidad para la inversión extranjera o que hayan sido creadas con anterioridad a la promulgación de la Ley de Bienes Culturales de 2003. No pueden ser titulares de más del 10 por ciento de servicios públicos (energía, agua, telefonía, etc)”, explicó Carril. 
El sector sin fines de lucro aglutina a diferentes actores de la sociedad civil: partidos políticos, sindicatos, clubes, asociaciones civiles, fundaciones -salvo que estén ligadas a medios de carácter comercial- y las cooperativas, que serán evaluadas por la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia, porque en algunas ciudades son actores económicos muy fuertes, con redes que cubren todo el entramado urbano.
La ley dispone que las licencias se entreguen en forma permanente a través de concursos públicos. Tienen una duración de 10 años y una prórroga por otra década, aunque ese procedimiento no es automático sino que debe ser corroborada a través de una audiencia pública.
En su exposición, Carril dijo que “la ley pone límites a la concentración de mercado y no a otro cosa. Por ejemplo, no se contempla cerrar una señal o un canal, sino que lo que se plantea es una readecuación del mercado, algo que se hace en varios países en otros órdenes de la economía”. 

EL GRUPORomero, conocido a partir de su paso por Duro de Domar como “El profe”, se refirió al Grupo Clarín. Reinvirtiendo el argumento que utilizan aquellos que se oponen a la nueva normativa, el invitado opinó que “esta ley es contra Clarín, porque es una ley antimonopólica, y las leyes antimonopólicas están dirigidas a los monopolios”. 
Sin embargo, aclaró que las normas que apuntan contra monopolios o posiciones dominantes de mercado no son un invento argentino, ya que “en todo el mundo hay leyes antimonopólicas”. Al respecto, puso como ejemplo lo ocurrido en Estados Unidos con la empresa Microsoft. 
“Clarín concentra más del 70 por ciento de los medios en Argentina. La pregunta no es por qué se hace la ley, sino por qué no se hizo antes y se permitió conformar semejante agrupación de medios. Clarín maneja dos de cada tres medios. En algún momento había que tomar el toro por las astas”, expresó.
A continuación, Romero contó la historia Clarín, desde la fundación del diario hasta conformarse en el principal grupo mediático. En tal sentido, el periodista expuso que el primer gran negocio fue el acuerdo alcanzado con los dictadores que usurparon el poder en 1976. Mediante esa maniobra (hoy investigada por la Justicia), Clarín accedió a Papel Prensa, la única fábrica de papel diario del país, cuestión que le permitió contar con el monopolio de ese insumo básico para los periódicos y ejercer una competencia desleal con los otros medios gráficos.  
El otro gran quiebre de esa historia fue la adquisición, a partir de un acuerdo con el entonces presidente Carlos Saúl Menem, de Radio Mitre y Canal 13. Por aquellos años, además, Clarín consiguió la exclusividad de la televisación del fútbol, estrategia que el Grupo utilizó para avanzar en la concentración del negocio de la televisión por cable.
“En la provincia de Buenos Aires, Clarín tiene 30 periódicos. Yo tengo un diario en Morón. Cuando llegó el Clarín Zonal éramos 10 periódicos en la zona. Quedamos cinco. Con el cable pasó algo parecido. Nosotros teníamos cinco canales de cable de diferentes dueños. Multicanal fue comprando cada uno de los cables. Incluso sacaron los canales locales. De todos esos procesos estamos discutiendo cuando hablamos de la Ley de Medios”, reflexionó Romero. (El Civismo)