Boeing ya vendió nueve de estos aviones VIP en más de US$ 300 M la unidad. La firma los entrega con un interior al descubierto, para que una empresa de acabado los decore al gusto del cliente. Son customizados para cargar autos de lujo y poseen sala de reuniones, gimnasio, escritorio y la mejor tecnología.
A más espacio, más lujo, pero también más comodidad y eficiencia: tal es la máxima que ha llevado a varios de los hombres de negocios más acaudalados del mundo a invertir más de US$ 300 millones para comprar un Boeing 747-8 VIP, de tamaño "jumbo", para su uso personal.
Podría parecer una locura, más aún cuando estos valen cuatro veces más que el lujoso Gulfstream G650, uno de los jets privados más lujosos del mundo.
Sin embargo, ese modelo y otros más no pueden competir con el espacio que tiene disponible el 747-8 -el segundo mayor avión comercial más grande del mundo, después del Airbus A380-, con 4.786 m2 para sus dueños.
Pero ya son nueve estos aviones vendidos para uso privado, de los que Boeing ya ha entregado ocho.
¿Quiénes los compran? El principal cliente de este modelo es la Fuerza Aérea de Estados Unidos, que anunció el mes pasado que compraría un número indeterminado de 747-8 para convertirlos en los nuevos Air Force One de la Casa Blanca.
Para ellos, y también para los privados, el procedimiento es el mismo: Boeing los entrega con un interior al descubierto, para que una empresa de acabado los decore al gusto del cliente, ya que si se gasta esa cantidad de dinero, los clientes suelen exigir que el avión cumpla con todas sus expectativas.
El último entregado fue diseñado interiormente por Greenpoint Technologies, por un valor que, estima Bussines Insider, sumó al menos un par de decenas de millones de dólares a la factura por el modelo.
En general, los 747-8 son customizados para cargar autos de lujo y también poseen habitaciones de lujo, salas de reuniones, gimnasios y escritorios, comunicación satelital y la mejor tecnología disponible actualmente. (Empresas News).
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