(La Politica OnLine). El Comité Capital de la UCR, presidido por Carlos Mas Vélez, se pronunció en contra de un posible acuerdo con Mauricio Macri, cuya gestión calificó como "un verdadero fiasco". Se trata de la primera expresión formal del partido en rechazo a las negociaciones que lleva adelante su candidato presidencial. El enojo de los alfonsinistas de la primera hora ante el giro pragmático de su líder.
"La constitución de un frente progresista que se constituya en una verdadera alternativa de poder para la ciudad es el camino correcto", afirma el documento emitido por la convención de la UCR porteña.
El texto critica además con dureza al actual jefe de Gobierno y candidato a la reelección, Mauricio Macri, al calificar a su gestión como "un verdadero fiasco". Así, Ricardo Alfonsín recibe el primer revés formal de parte del Comité Capital del radicalismo, presidido Carlos Mas Vélez, un alfonsinista enojado por el cambio de postura del postulante a la presidencia.
La relación entre Mas Vélez y Alfonsín se estrechó tras los comicios de 2009, cuando el radicalismo porteño consiguió dos lugares en la legislatura de la Ciudad. Las bancas fueron para Claudio Presman, un hombre de Jesus Rodríguez, y Rubén Campos, cercano a Enrique "Coti" Nosiglia.
Pero desde que asumieron, los dos legisladores se convirtieron en piezas fundamentales del macrismo y fueron funcionales al PRO en todas las votaciones importantes, mientras que solamente mostraron su oposición en proyectos testimoniales.
De esta forma, comenzaron las contradacciones internas con Mas Vélez, que había trabajado muy duro para lograr una alianza con la Coalición Cívica y, así, poder conformar el Acuerdo Cívico, la estrategia que permitió recuperar terreno en la Ciudad.
En ese momento, todo el partido disputaba una guerra entre la renovación y la permanencia de las viejas estructuras. En ese marco, Mas Vélez estaba encolumnado con Alfonsín en su lucha contra Cobos. Es que el vicepresidente acordaba con las estructuras tradicionales e incluso se mostraba siempre que podía junto al diputado Francisco De Narváez, rival de Kirchner en la Provincia.
Pero todavía el hijo del ex presidente todavía observaba a Cobos desde abajo: la imagen del vicepresidente era muy alta tras su participación protagónica en el conflicto por la resolución 125.
Sin embargo, cuando Alfonsín triunfa en la interna en la Provincia de Buenos Aires y empieza a ganar peso dentro del partido, acuerda con Moreau y se acerca también a las viejos dirigentes, a los que antes criticaba.
Este giro se terminó de concretar cuando anunció la posibilidad de armar una alianza con De Narváez en la Provincia y con Macri en la Ciudad. Al parecer, donde antes veía profundas diferencias ideológicas, comenzó a observar grandes beneficios electorales.
Por eso, el documento emitido por el Comité Capital de la UCR no constituye solamente una crítica hacia Macri, sino que sobre todo es un mensaje hacia Alfonsín. Su contenido desnuda un profundo malestar de los alfonsinistas de la primera hora -entre ellos, Mas Vélez- desencantados por el giro de su líder.
Así, el presidente del Comité Capital se anticipó a la definición de las conversaciones entre el candidato presidencial y el jefe de Gobierno, y embarró las negociaciones, al mostrar formalmente su rechazo en el distrito de Macri.
Y, aunque de forma elíptica, también emitió un mensaje hacia dirigentes como Marcela Larrosa y Carlos Macchi, que estaban pactando un acercamiento con el macrismo. Su contacto es nada menos que el "Tano" Angelici, el "zar del juego" y candidato a la presidencia de Boca.
Diferencias dentro del Comité
"Obviamente hubo algunos sectores proclives a que el plenario deje abierta la posibilidad de acordar con Macri. Sobre todo Marcela y Marchi, que ocupan el tercer y cuarto lugar en la lista de candidatos a legisladores. Ellos entienden que ir con el macrismo puede aumentar sus chanches de ingresar en la legislatura, que por ahora es practicamente nula", contaron a LPO delegados del Comité Capital.
De hecho, la misma fuente reveló que Larrosa tuvo un fuerte cruce con Ricardo Gil Lavedra, que fue enfático al marcar las diferencias ideológicas que tiene el radicalimos con Mauricio Macri. El diputado nacional pidió no avanzar en acuerdos con "fuerzas conservadoras" y se pronunció a favor de un acercamiento con el socialismo, el GEN, la Coalición Cívica y Proyecto Sur.
Una de las posibilidades que baraja el Comité Capital es colgar una lista sábana bajo la candidatura de Pino Solanas, con la posibilidad de imponer el candidato a vicejefe de Gobierno. Pero esta posibilidad no parece viable, porque el líder de Proyecto Sur muestra una constante reticencia a formar alianzas con las estructuras partidarias de la UCR y del PJ.
"Pino debería comprender que necesita del radicalismo y del socialismo porteño para poder asegurarse un lugar en la segunda vuelta. Sabemos que no somos fuerzas mayoritarias pero podemos aportar puntos muy valiosos", analizó la misma fuente.
"La constitución de un frente progresista que se constituya en una verdadera alternativa de poder para la ciudad es el camino correcto", afirma el documento emitido por la convención de la UCR porteña.
El texto critica además con dureza al actual jefe de Gobierno y candidato a la reelección, Mauricio Macri, al calificar a su gestión como "un verdadero fiasco". Así, Ricardo Alfonsín recibe el primer revés formal de parte del Comité Capital del radicalismo, presidido Carlos Mas Vélez, un alfonsinista enojado por el cambio de postura del postulante a la presidencia.
La relación entre Mas Vélez y Alfonsín se estrechó tras los comicios de 2009, cuando el radicalismo porteño consiguió dos lugares en la legislatura de la Ciudad. Las bancas fueron para Claudio Presman, un hombre de Jesus Rodríguez, y Rubén Campos, cercano a Enrique "Coti" Nosiglia.
Pero desde que asumieron, los dos legisladores se convirtieron en piezas fundamentales del macrismo y fueron funcionales al PRO en todas las votaciones importantes, mientras que solamente mostraron su oposición en proyectos testimoniales.
De esta forma, comenzaron las contradacciones internas con Mas Vélez, que había trabajado muy duro para lograr una alianza con la Coalición Cívica y, así, poder conformar el Acuerdo Cívico, la estrategia que permitió recuperar terreno en la Ciudad.
En ese momento, todo el partido disputaba una guerra entre la renovación y la permanencia de las viejas estructuras. En ese marco, Mas Vélez estaba encolumnado con Alfonsín en su lucha contra Cobos. Es que el vicepresidente acordaba con las estructuras tradicionales e incluso se mostraba siempre que podía junto al diputado Francisco De Narváez, rival de Kirchner en la Provincia.
Pero todavía el hijo del ex presidente todavía observaba a Cobos desde abajo: la imagen del vicepresidente era muy alta tras su participación protagónica en el conflicto por la resolución 125.
Sin embargo, cuando Alfonsín triunfa en la interna en la Provincia de Buenos Aires y empieza a ganar peso dentro del partido, acuerda con Moreau y se acerca también a las viejos dirigentes, a los que antes criticaba.
Este giro se terminó de concretar cuando anunció la posibilidad de armar una alianza con De Narváez en la Provincia y con Macri en la Ciudad. Al parecer, donde antes veía profundas diferencias ideológicas, comenzó a observar grandes beneficios electorales.
Por eso, el documento emitido por el Comité Capital de la UCR no constituye solamente una crítica hacia Macri, sino que sobre todo es un mensaje hacia Alfonsín. Su contenido desnuda un profundo malestar de los alfonsinistas de la primera hora -entre ellos, Mas Vélez- desencantados por el giro de su líder.
Así, el presidente del Comité Capital se anticipó a la definición de las conversaciones entre el candidato presidencial y el jefe de Gobierno, y embarró las negociaciones, al mostrar formalmente su rechazo en el distrito de Macri.
Y, aunque de forma elíptica, también emitió un mensaje hacia dirigentes como Marcela Larrosa y Carlos Macchi, que estaban pactando un acercamiento con el macrismo. Su contacto es nada menos que el "Tano" Angelici, el "zar del juego" y candidato a la presidencia de Boca.
Diferencias dentro del Comité
"Obviamente hubo algunos sectores proclives a que el plenario deje abierta la posibilidad de acordar con Macri. Sobre todo Marcela y Marchi, que ocupan el tercer y cuarto lugar en la lista de candidatos a legisladores. Ellos entienden que ir con el macrismo puede aumentar sus chanches de ingresar en la legislatura, que por ahora es practicamente nula", contaron a LPO delegados del Comité Capital.
De hecho, la misma fuente reveló que Larrosa tuvo un fuerte cruce con Ricardo Gil Lavedra, que fue enfático al marcar las diferencias ideológicas que tiene el radicalimos con Mauricio Macri. El diputado nacional pidió no avanzar en acuerdos con "fuerzas conservadoras" y se pronunció a favor de un acercamiento con el socialismo, el GEN, la Coalición Cívica y Proyecto Sur.
Una de las posibilidades que baraja el Comité Capital es colgar una lista sábana bajo la candidatura de Pino Solanas, con la posibilidad de imponer el candidato a vicejefe de Gobierno. Pero esta posibilidad no parece viable, porque el líder de Proyecto Sur muestra una constante reticencia a formar alianzas con las estructuras partidarias de la UCR y del PJ.
"Pino debería comprender que necesita del radicalismo y del socialismo porteño para poder asegurarse un lugar en la segunda vuelta. Sabemos que no somos fuerzas mayoritarias pero podemos aportar puntos muy valiosos", analizó la misma fuente.
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