El ex concejal y ex funcionario local Gustavo Sicca integra un organismo que aporta herramientas para políticas de seguridad en los municipios bonaerenses. Analizó la situación en Luján, con estadísticas que lo acercan más al conurbano que al interior de la provincia.
Por iniciativa de la Federación Argentina de Municipios (FAM) y el Ministerio de Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, nace el Observatorio de Seguridad Ciudadana para los Municipios de la Provincia de Buenos Aires (ObserBA), concebido como un espacio intersectorial e interdisciplinario, conformado por técnicos independientes, que trabaja para asistir a los gobiernos locales de la provincia "para una comprensión integral de las claves del problema de la seguridad que se presentan en cada una de sus comunidades y los provea de herramientas de gestión para el desarrollo, seguimiento y control de las medidas que se adopten para su solución".
Gustavo Sicca, ex concejal y ex funcionario municipal, integra ese observatorio y es además asesor técnico de la FAM en temas de seguridad ciudadana. Dialogó con EL CIVISMO sobre esta problemática y la situación en el partido de Luján.
- Sintéticamente, ¿cómo definirá al ObserBA?
- Es una herramienta diagnóstica que está a disposición de todos los municipios porque se entiende a la seguridad en el marco de un abordaje territorial desde los gobiernos locales. Se asegura, además, que los municipios cumplan un rol estratégico para la prevención del delito.
- ¿Ya quedó atrás la discusión de los municipios ajenos a las políticas de seguridad porque se trata de una función del Estado Provincial?
- Hace diez años, cuando se comenzó con el debate de la seguridad y el rol de los gobiernos locales, era raro hablar de esto. Y ningún intendente quería arriesgar cierto costo político. Las demandas sociales dieron vuelta esa realidad y hoy los municipios tienen que dar respuesta a los vecinos en una necesidad básica insatisfecha. En el municipio es en el primer estamento en el que se reclama. Por eso hace diez años que en Luján se inició un proceso pero después se discontinuó. Hoy la mayoría de los intendentes trabajan en este tema. Si no caen en el doble estándar de decir que esto es cuestión de la Provincia pero le siguen pagando el combustible a los patrulleros, compramos chalecos y seguimos apoyando con la compra de patrulleros. La Policía es una pequeña parte de la solución y también del problema.
- Fue funcionario local en el área. ¿Qué cambió en materia de seguridad de aquellos años a la actualidad?
- Nos quedamos en un proceso de profundización. En la actual gestión veo una continuidad con la anterior de cómo abordar el tema. Más allá de fondos, hubo un Consejo de Seguridad y un intento de control comunitario de las fuerzas, pero también se diseñó un Plan de Seguridad Ciudadana que no sé en qué quedó. Es un tema que se deterioró y que se ve reflejado en la sensación de la sociedad. Es una deuda pendiente no de estos gobiernos sino desde el retorno de la democracia. Falta un modelo de seguridad democrático. Aunque hubo avances y retrocesos, también en Provincia a pesar de sostener un mismo signo político. Luján no está ajeno. Vi el reportaje al jefe distrital Marcelo Oberti y si bien es una persona profesional, abogado y muy laburador, le veo una cuota excesiva de voluntarismo. Esto se tiene que abordar con herramientas diagnósticas para saber en Luján en qué situación estamos en materia de seguridad. Esa realidad, en números no se conoce.
- ¿El ObserBa los tiene?
- Se hizo una encuesta. El primer parámetro que se toma internacionalmente son los homicidios dolosos por cada 100 mil habitantes. Eso permite conocer el nivel de violencia que se registra en una ciudad. Se relevaron los municipios bonaerenses y permite ver qué se puede hacer. Hoy, que ese índice sea de 7 homicidios cada 100 mil habitantes ya es alarmante. Luján está al mismo nivel que Moreno o San Miguel, aunque no somos iguales.
- Hay municipios que se acercaron al ObserBA. ¿Cómo trabajan con ellos?
- En una primera etapa se trabajó con municipios del conurbano y más tarde con otros del interior. Primero, se demuestra que la etapa de represión del delito fracasó en todas sus facetas. Pos comisión del delito, encarcelamiento y nivel de reincidencia, el delito no varió. Por eso hay que trabajar en la prevención y el municipio puede hacer muchísimo. Desde prevención primaria en las áreas sociales, secundarias con prevención situacional en espacios públicos y la terciaria con la resocialización de los que salen y son vecinos que vuelven al territorio. ¿Sabemos cuánta gente de Luján vuelve a su barrio sin trabajo?
- Oberti decía que en Luján debe haber 50 familias con problemas recurrentes con la Justicia.
- Sí, y que están vulnerables, en riesgo. Hay que atender a esos factores. Para esas cuestiones nosotros ofrecemos herramientas. El año pasado cinco municipios accedieron a una capacitación para construir unidades municipales de análisis criminal. Eso permite manejar un mapa del delito. Y el municipio solo tuvo que poner a funcionarios con ganas de aprender en el marco de un abordaje multidisciplinario. Certificaron con el Instituto Provincial de la Administración Pública y quedan en contacto para que el observatorio tenga resultado y pueda multiplicarlo en otros municipios.
- Otra cuestión que marcó el jefe policial es que si tiene que llegar a colocar un policía en cada cuadra, hubo varias fallas anteriores.
- Es cierto. Oberti habló con los concejales y se le pidió que trabaje con la ordenanza de la nocturnidad. El municipio tiene mucho para hacer. No se puede delegar todo en la Policía, porque además todos sabemos qué Policía tenemos. ¿Este es el modelo policial que puede rendir cuentas y controlar su eficacia y eficiencia? ¿Qué indicadores puedo tener de Policía? ¿Y encima se la vamos a pasar al municipio? Hay cosas previas porque por ley las fuerzas policiales son auxiliares del intendente. Si hoy Luciani tuviera un programa de seguridad lo puede sentar a Oberti y decirle puntualmente qué es lo que quiere. La agencia policial ha dado respuesta. Por eso, ¿hay que poner más policías? ¿Los recursos tienen que ir ahí?
- También dejó de discutirse si Luján tiene situaciones de inseguridad propias del conurbano.
- Ya no se discute. Luján no es una localidad del interior. Es interfase entre Moreno y Suipacha. Estamos con niveles de inseguridad sumamente parecidos a General Rodríguez. Avellaneda tiene 9.8 homicidios cada 100 mil habitantes por año en 2010. Luján tiene el 9,1. Morón el 6,1. Lobos, con policía comunal y mucho trabajo integral de prevención tiene 4,8. José C. Paz tiene 11. Estamos más cerca de José C. Paz que de Lobos, cuando tendría que ser diferente.
- Ahora se debate la creación de una Policía Municipal.
- Luján tiene un caso emblemático: ¿esa Policía será un nuevo Hospital? Acá se compró el tema de las cámaras, que es una herramienta y no política pública. Cuando Nación deje de financiar, ¿se hará cargo la Municipalidad? Porque ese servicio es muy costoso. Lo que veo es que con la Policía Municipal pasará que Tigre tendrá una policía de primera, parecida a la de Washington, y Los Cardales similar a la de Uganda. Cada uno tendría capacidades diferentes. Porque hay municipios con recursos pero también los hay pobres. El ObserBA elabora un proyecto alternativo al que presentó el sector de Sabbatella y al de Scioli. No se puede hablar de un traspaso directo, pero sí con variantes a la propuesta del oficialismo. Pero hay que trabajar, porque en cualquier ciudad la seguridad figura, en la gente, como prioridad uno. (El Civismo).
Por iniciativa de la Federación Argentina de Municipios (FAM) y el Ministerio de Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, nace el Observatorio de Seguridad Ciudadana para los Municipios de la Provincia de Buenos Aires (ObserBA), concebido como un espacio intersectorial e interdisciplinario, conformado por técnicos independientes, que trabaja para asistir a los gobiernos locales de la provincia "para una comprensión integral de las claves del problema de la seguridad que se presentan en cada una de sus comunidades y los provea de herramientas de gestión para el desarrollo, seguimiento y control de las medidas que se adopten para su solución".
Gustavo Sicca, ex concejal y ex funcionario municipal, integra ese observatorio y es además asesor técnico de la FAM en temas de seguridad ciudadana. Dialogó con EL CIVISMO sobre esta problemática y la situación en el partido de Luján.
- Sintéticamente, ¿cómo definirá al ObserBA?
- Es una herramienta diagnóstica que está a disposición de todos los municipios porque se entiende a la seguridad en el marco de un abordaje territorial desde los gobiernos locales. Se asegura, además, que los municipios cumplan un rol estratégico para la prevención del delito.
- ¿Ya quedó atrás la discusión de los municipios ajenos a las políticas de seguridad porque se trata de una función del Estado Provincial?
- Hace diez años, cuando se comenzó con el debate de la seguridad y el rol de los gobiernos locales, era raro hablar de esto. Y ningún intendente quería arriesgar cierto costo político. Las demandas sociales dieron vuelta esa realidad y hoy los municipios tienen que dar respuesta a los vecinos en una necesidad básica insatisfecha. En el municipio es en el primer estamento en el que se reclama. Por eso hace diez años que en Luján se inició un proceso pero después se discontinuó. Hoy la mayoría de los intendentes trabajan en este tema. Si no caen en el doble estándar de decir que esto es cuestión de la Provincia pero le siguen pagando el combustible a los patrulleros, compramos chalecos y seguimos apoyando con la compra de patrulleros. La Policía es una pequeña parte de la solución y también del problema.
- Fue funcionario local en el área. ¿Qué cambió en materia de seguridad de aquellos años a la actualidad?
- Nos quedamos en un proceso de profundización. En la actual gestión veo una continuidad con la anterior de cómo abordar el tema. Más allá de fondos, hubo un Consejo de Seguridad y un intento de control comunitario de las fuerzas, pero también se diseñó un Plan de Seguridad Ciudadana que no sé en qué quedó. Es un tema que se deterioró y que se ve reflejado en la sensación de la sociedad. Es una deuda pendiente no de estos gobiernos sino desde el retorno de la democracia. Falta un modelo de seguridad democrático. Aunque hubo avances y retrocesos, también en Provincia a pesar de sostener un mismo signo político. Luján no está ajeno. Vi el reportaje al jefe distrital Marcelo Oberti y si bien es una persona profesional, abogado y muy laburador, le veo una cuota excesiva de voluntarismo. Esto se tiene que abordar con herramientas diagnósticas para saber en Luján en qué situación estamos en materia de seguridad. Esa realidad, en números no se conoce.
- ¿El ObserBa los tiene?
- Se hizo una encuesta. El primer parámetro que se toma internacionalmente son los homicidios dolosos por cada 100 mil habitantes. Eso permite conocer el nivel de violencia que se registra en una ciudad. Se relevaron los municipios bonaerenses y permite ver qué se puede hacer. Hoy, que ese índice sea de 7 homicidios cada 100 mil habitantes ya es alarmante. Luján está al mismo nivel que Moreno o San Miguel, aunque no somos iguales.
- Hay municipios que se acercaron al ObserBA. ¿Cómo trabajan con ellos?
- En una primera etapa se trabajó con municipios del conurbano y más tarde con otros del interior. Primero, se demuestra que la etapa de represión del delito fracasó en todas sus facetas. Pos comisión del delito, encarcelamiento y nivel de reincidencia, el delito no varió. Por eso hay que trabajar en la prevención y el municipio puede hacer muchísimo. Desde prevención primaria en las áreas sociales, secundarias con prevención situacional en espacios públicos y la terciaria con la resocialización de los que salen y son vecinos que vuelven al territorio. ¿Sabemos cuánta gente de Luján vuelve a su barrio sin trabajo?
- Oberti decía que en Luján debe haber 50 familias con problemas recurrentes con la Justicia.
- Sí, y que están vulnerables, en riesgo. Hay que atender a esos factores. Para esas cuestiones nosotros ofrecemos herramientas. El año pasado cinco municipios accedieron a una capacitación para construir unidades municipales de análisis criminal. Eso permite manejar un mapa del delito. Y el municipio solo tuvo que poner a funcionarios con ganas de aprender en el marco de un abordaje multidisciplinario. Certificaron con el Instituto Provincial de la Administración Pública y quedan en contacto para que el observatorio tenga resultado y pueda multiplicarlo en otros municipios.
- Otra cuestión que marcó el jefe policial es que si tiene que llegar a colocar un policía en cada cuadra, hubo varias fallas anteriores.
- Es cierto. Oberti habló con los concejales y se le pidió que trabaje con la ordenanza de la nocturnidad. El municipio tiene mucho para hacer. No se puede delegar todo en la Policía, porque además todos sabemos qué Policía tenemos. ¿Este es el modelo policial que puede rendir cuentas y controlar su eficacia y eficiencia? ¿Qué indicadores puedo tener de Policía? ¿Y encima se la vamos a pasar al municipio? Hay cosas previas porque por ley las fuerzas policiales son auxiliares del intendente. Si hoy Luciani tuviera un programa de seguridad lo puede sentar a Oberti y decirle puntualmente qué es lo que quiere. La agencia policial ha dado respuesta. Por eso, ¿hay que poner más policías? ¿Los recursos tienen que ir ahí?
- También dejó de discutirse si Luján tiene situaciones de inseguridad propias del conurbano.
- Ya no se discute. Luján no es una localidad del interior. Es interfase entre Moreno y Suipacha. Estamos con niveles de inseguridad sumamente parecidos a General Rodríguez. Avellaneda tiene 9.8 homicidios cada 100 mil habitantes por año en 2010. Luján tiene el 9,1. Morón el 6,1. Lobos, con policía comunal y mucho trabajo integral de prevención tiene 4,8. José C. Paz tiene 11. Estamos más cerca de José C. Paz que de Lobos, cuando tendría que ser diferente.
- Ahora se debate la creación de una Policía Municipal.
- Luján tiene un caso emblemático: ¿esa Policía será un nuevo Hospital? Acá se compró el tema de las cámaras, que es una herramienta y no política pública. Cuando Nación deje de financiar, ¿se hará cargo la Municipalidad? Porque ese servicio es muy costoso. Lo que veo es que con la Policía Municipal pasará que Tigre tendrá una policía de primera, parecida a la de Washington, y Los Cardales similar a la de Uganda. Cada uno tendría capacidades diferentes. Porque hay municipios con recursos pero también los hay pobres. El ObserBA elabora un proyecto alternativo al que presentó el sector de Sabbatella y al de Scioli. No se puede hablar de un traspaso directo, pero sí con variantes a la propuesta del oficialismo. Pero hay que trabajar, porque en cualquier ciudad la seguridad figura, en la gente, como prioridad uno. (El Civismo).
No hay comentarios.:
Publicar un comentario