Hace tiempo que los intendentes dejaron de jugar en segundo plano y piensan más allá de sus distritos. Cariglino, uno de los históricos, viene trabajando intensamente por launidad del arco opositor bonaerense. Se lo suele sindicar como uno de losnegociadores clave del frente en la Provincia de Buenos Aires entre el Partido Justicialista no kirchnerista, el PRO y los partidos vecinalistas.
En ese marco, Cariglino hizo el camino inverso de la mayoría de los dirigentes políticos einauguró en la Ciudad una Casa Peronista que lleva su nombre con el fin de sentar una base en el territorio porteño.
“Este es un lugar de encuentro no sólo para los peronistas sino de todos los partidos políticos”, sostuvo Cariglino desde el escenario, acompañado por el dirigente peronista Julio Bárbaro, el diputado Carlos Brown y el vicepresidente del PRO y ministro de Hacienda porteño, Néstor Grindetti.
“Tenemos que salvar a la patria de estos pseudoprogresistas. Tras 11 años de increíble crecimiento todavía hay indigencia y pobreza estructural. La convocatoria es muy amplia, a todos los sectores que quieran salvar la patria”, señaló el intendente malvinense.
También hubo críticas a la política de subsidios. “Argentina Trabaja es un subsidio a la vagancia. Si hay crisis debe haber subsidios, pero sólo por un tiempo”. E insistió: “Tenemos que llegar a 2015 con un proyecto sólido para levantar al país”.
Más tarde, en conferencia de prensa, Cariglino fue consultado sobre las diferencias entre el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, y el diputado Francisco De Narváez, dos figuras importantes en su armado político. “Todo se puede limar”. Cuando le preguntaron por las críticas a Gabriela Michetti a Hugo Moyano insistió con la fórmula: “Todo se puede limar”.
Por su parte, Bárbaro fue duro con la indefinición de Massa. “Por qué me piden que opine de él si él no opina. Y eso que lo respeto. Pero el peronismo es expresar el pensamiento, no ocultarlo”.
Hace tiempo que los intendentes dejaron de jugar en segundo plano y piensan más allá de sus distritos. Cariglino, uno de los históricos, viene trabajando intensamente por launidad del arco opositor bonaerense. Se lo suele sindicar como uno de los negociadores clave del frente en la Provincia de Buenos Aires entre el Partido Justicialista no kirchnerista, el PRO y los partidos vecinalistas.
En ese marco, Cariglino hizo el camino inverso de la mayoría de los dirigentes políticos e inauguró en la Ciudad una Casa Peronista que lleva su nombre con el fin de sentar una base en el territorio porteño.
“Este es un lugar de encuentro no sólo para los peronistas sino de todos los partidos políticos”, sostuvo Cariglino desde el escenario, acompañado por el dirigente peronista Julio Bárbaro, el diputado Carlos Brown y el vicepresidente del PRO y ministro de Hacienda porteño, Néstor Grindetti.
“Tenemos que salvar a la patria de estos pseudoprogresistas. Tras 11 años de increíble crecimiento todavía hay indigencia y pobreza estructural. La convocatoria es muy amplia, a todos los sectores que quieran salvar la patria”, señaló el intendente malvinense.
También hubo críticas a la política de subsidios. “Argentina Trabaja es un subsidio a la vagancia. Si hay crisis debe haber subsidios, pero sólo por un tiempo”. E insistió: “Tenemos que llegar a 2015 con un proyecto sólido para levantar al país”.
Más tarde, en conferencia de prensa, Cariglino fue consultado sobre las diferencias entre el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, y el diputado Francisco De Narváez, dos figuras importantes en su armado político. “Todo se puede limar”. Cuando le preguntaron por las críticas a Gabriela Michetti a Hugo Moyano insistió con la fórmula: “Todo se puede limar”.
Por su parte, Bárbaro fue duro con la indefinición de Massa. “Por qué me piden que opine de él si él no opina. Y eso que lo respeto. Pero el peronismo es expresar el pensamiento, no ocultarlo”. (Fotos: Nicolás Stulberg).
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