(La Política On Line). El diputado habría sido tentado para ocupar el cargo que ya tuvo con Solá. Desde su entorno admiten las versiones pero niegan que acepte porque “Scioli todavía es kirchnerista”. El pedido surgió de los intendentes K y también opositores. Quieren alguien de experiencia para enfrentar el rojo provincial, donde ya hablan de cesación de pagos y de problemas para pagar los sueldos.
En el nuevo vínculo que Daniel Scioli busca contraer con los intendentes después del fatídico 28 de junio surgió un renovado pedido por parte de los complicados mandatarios comunales. En conjunto, presionaron para que desde el gobierno bonaerense se corte el “cordón umbilical” –tal como lo citó un intendente del sur del conurbano- con la Casa Rosada y se reclame una nueva coparticipación y fondos para la provincia.
Allí mismo, entre los intendentes kirchneristas, habría surgido otro pedido urgente con nombre y apellido. Son varios los que exigieron a Scioli que convoque a Jorge Sarghini para tomar las cuentas provinciales y asuma como ministro de Economía, cargo que ya ocupó durante la gestión de Felipe Solá y donde, por lo que ve, dejó un buen recuerdo.
El rumor es fuerte y fue confirmado a La Política Online desde el entorno del diputado, recientemente premiado con la presidencia del bloque Peronismo Federal, luego de haberse quedado afuera de las listas de Unión PRO por la fuerte resistencia de Francisco De Narváez.
Sin embargo, mientras algunos arriesgados se animan a decir en terreno bonaerense que el salto del Congreso a la casa de gobierno de la provincia se daría en pocos días, fuentes allegadas al legislador los desmintieron por completo. Y dieron una sola y suficiente razón: “Scioli sigue siendo kirchnerista”.
“Hay un gran problema y es que Scioli es kirchnerista. Para que asuma, Scioli se tiene que despegar del gobierno”, aseguran mientras desmienten contactos con el ejecutivo provincial.
Las fuentes confirmaron que el pedido llegó de parte de los intendentes, tanto los kirchneristas como los opositores, quienes ven en Sarghini un hombre capaz de escuchar sus reclamos más allá de cualquier bandería política.
Hay que recordar que hace unos días Sarghini presentó un proyecto de ley al Congreso donde solicita que el Ministerio del Interior reparta los 8.500 millones de pesos que tiene en su cuenta correspondiente a Aportes del Tesoro de la Nación (ATN) de las provincias.
Para el entorno de Sarghini eso fue “un gesto” hacia Scioli, un “reclamo legítimo de dinero de la provincia que traba la Nación”. “El gesto se traduce en `estoy dispuesto a trabajar con vos si el plan es defender los intereses de la provincia´”, cerraron.
No es casualidad el momento en que surge el nombre de Sarghini, un funcionario muy prestigioso que incluso el propio Néstor Kirchner lamentó perder. En la provincia hay un fuerte temor por las cuentas.
Hablan de una cesación de pagos que podría llegar en un plazo no superior a los dos o tres meses, que excede el pago a proveedores -el cual ya estaria atrasado en 180 días-: si no llega ayuda inmediata y gruesa de la Nación, corre riesgo desde el envío de coparticipación a los municipios hasta el pago de los sueldos de los empleados públicos, docentes y médicos.
Los legisladores peronistas, según fuentes provinciales, "no sienten ningún respeto por los ministros de Economía de Scioli". Así, a Rafael Perelmiter lo consideraban "el contador de la familia" y a Alejandro Arlía "ni lo consideran siquiera".
Por eso es que son cada vez más los que piden a gritos un ministro de Economía con manejo y peso político, y sobre todo con experiencia en cuentas al rojo vivo. Sarghini, antes de ser el posible ministro de Scioli, fue ministro de Carlos Ruckauf, y fue quien puso en marcha los famosos patacones. Cuando legisladores e intendentes piden por Sarghini lo hacen en realidad por este dato, porque dicen "si va a explotar todo, que al menos estemos en manos de un tipo que tiene claro cómo hacer para salir adelante".
No hay comentarios.:
Publicar un comentario