Para avanzar sobre un proyecto de protección al tradicional inmueble de Cañitas se necesita un informe técnico del Ejecutivo, que por su parte, ya avaló la demolición. Dos diputados del PRO presentaron iniciativas para proteger los edificios de La Cuadra y La Imprenta, pero es difícil que lleguen a tratarse antes del receso. Mientras tanto, la constructora Friedman-Churba avanza en su plan de construcción de dos mega torres.
“El edificio de la Imprenta es el emblema del barrio y el stud de La Cuadra es el último reservorio de la identidad hípica de Buenos Aires. El hipódromo ya fue transformado en un casino”, se lamentó Juan Martorell, integrante de la ONG Basta de Demoler.
Es que la noticia de la demolición de los edificios más tradicionales de Cañitas, La Imprenta y La Cuadra, golpeó fuerte en los vecinos de ese barrio. Construido en 1914, el complejo conserva aún algunas puertas originales de las caballerizas.
Hoy trascendió la noticia de que el ministerio de Desarrollo Urbano dio el permiso para que se lleve adelante la demolición. Detrás de este emprendimiento, se encuentra la constructora Friedman-Churba, que se caracteriza por la construcción de torres de lujo en los barrios de Belgrano y Palermo, como las bautizadas "Green Tower" y "Torres Cardón".
“A tan sólo dos cuadras de La Imprenta, en Eslovenia y Soldado de la Independencia, hay una torre hecha por esta misma firma. Ocupa un cuarto de la manzana y está rodeada de rejas. Rompe totalmente con la integración del barrio”, relató a LPO un vecino de Cañitas.
A tono con la protesta, dos legisladores del PRO decidieron presentar proyectos para preservar estos edificios, enfrentándose a la decisión tomada por el gobierno que representan. El diputado Bruno Screnci presentó una iniciativa para que se le de protección estructural al complejo, lo que implicaría que no se lo pueda demoler y sólo se autorizarían algunas modificaciones menores. En horas de la tarde, el legislador que preside la Comisión de Patrimonio Arquitectónico, Patricio Di Stefano, también ingresó un proyecto de protección exclusiva para "La Imprenta".
Sin embargo, fuentes parlamentarias confirmaron a LPO que es difícil que estas iniciativas lleguen a tratarse antes de fin de año. En primer lugar, porque para dar protección estructural a un inmueble se necesita un informe técnico del Ejecutivo; que en este caso, ya avaló su demolición.
Por otro lado, la semana que viene será la última reunión de la comisión de Planeamiento Urbano y luego, en período de extraordinarias, es mucho más complejo que se logre aprobar una iniciativa de este estilo.
“Necesitamos proteger este tipo de edificios emblemáticos de los barrios. Durante décadas el patrimonio arquitectónico fue devastado debido a la falta de leyes que lo protejan", aseguró hoy De Estéfano.
Desde la subsecretaría de Planeamiento Urbano informaron que el Consejo Asesor de Asuntos Patrimoniales evaluó que los edificios de La Cuadra y La Imprenta no eran construcciones con valor patrimonial. Y en el caso puntual de La Cuadra, la explicación fue que en 1975 se lo había reconstruido por completo, que ya no era la original.
“Es un argumento absurdo”, se indignaron desde la ONG preservacionista Basta de Demoler, “con ese concepto, ni el Cabildo, ni el Palacio de Correos deberían conservarse porque, con el correr de los años, han sido restaurados y remodelados”. (La Política OnLine).
Es que la noticia de la demolición de los edificios más tradicionales de Cañitas, La Imprenta y La Cuadra, golpeó fuerte en los vecinos de ese barrio. Construido en 1914, el complejo conserva aún algunas puertas originales de las caballerizas.
Hoy trascendió la noticia de que el ministerio de Desarrollo Urbano dio el permiso para que se lleve adelante la demolición. Detrás de este emprendimiento, se encuentra la constructora Friedman-Churba, que se caracteriza por la construcción de torres de lujo en los barrios de Belgrano y Palermo, como las bautizadas "Green Tower" y "Torres Cardón".
“A tan sólo dos cuadras de La Imprenta, en Eslovenia y Soldado de la Independencia, hay una torre hecha por esta misma firma. Ocupa un cuarto de la manzana y está rodeada de rejas. Rompe totalmente con la integración del barrio”, relató a LPO un vecino de Cañitas.
A tono con la protesta, dos legisladores del PRO decidieron presentar proyectos para preservar estos edificios, enfrentándose a la decisión tomada por el gobierno que representan. El diputado Bruno Screnci presentó una iniciativa para que se le de protección estructural al complejo, lo que implicaría que no se lo pueda demoler y sólo se autorizarían algunas modificaciones menores. En horas de la tarde, el legislador que preside la Comisión de Patrimonio Arquitectónico, Patricio Di Stefano, también ingresó un proyecto de protección exclusiva para "La Imprenta".
Sin embargo, fuentes parlamentarias confirmaron a LPO que es difícil que estas iniciativas lleguen a tratarse antes de fin de año. En primer lugar, porque para dar protección estructural a un inmueble se necesita un informe técnico del Ejecutivo; que en este caso, ya avaló su demolición.
Por otro lado, la semana que viene será la última reunión de la comisión de Planeamiento Urbano y luego, en período de extraordinarias, es mucho más complejo que se logre aprobar una iniciativa de este estilo.
“Necesitamos proteger este tipo de edificios emblemáticos de los barrios. Durante décadas el patrimonio arquitectónico fue devastado debido a la falta de leyes que lo protejan", aseguró hoy De Estéfano.
Desde la subsecretaría de Planeamiento Urbano informaron que el Consejo Asesor de Asuntos Patrimoniales evaluó que los edificios de La Cuadra y La Imprenta no eran construcciones con valor patrimonial. Y en el caso puntual de La Cuadra, la explicación fue que en 1975 se lo había reconstruido por completo, que ya no era la original.
“Es un argumento absurdo”, se indignaron desde la ONG preservacionista Basta de Demoler, “con ese concepto, ni el Cabildo, ni el Palacio de Correos deberían conservarse porque, con el correr de los años, han sido restaurados y remodelados”. (La Política OnLine).
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