martes, enero 25, 2011

Coronel Pringles. Cooperativa de las Artes y la recuperación de un espacio con historia.

La Municipalidad de Coronel Pringles destinó $ 195.000 en la remodelación y reconstrucción de este edificio. Entre otros usos, el lugar será sede de la UPSO.
La Arq. María Lujan Eceiza, de la Secretaría de Planeamiento, Obras y Servicios Públicos de la comuna local, es la profesional que está al frente de los trabajos que se están realizando en lo que será la Cooperativa de las Artes dependiente del Instituto Cultural. Eceiza señaló que “se está trabajando intensamente en el lugar, puesto que para principios de marzo tiene que estar habilitado porque ahí va a funcionar la sede de la Universidad Provincial del Sudoeste. Se están cerrando los presupuestos finales y se están haciendo, en cuanto a albañilería, los contrapisos y carpetas para dejar lista la superficie de piso para volver a colocar la pinotea original que se sacó”.
Además de estos trabajos, se dará inicio a la colocación del durlock para todas las gargantas de iluminación perimetrales como así también a las tareas de pintura.
La Arq. Eceiza resaltó la importancia de esta construcción al referirse al mismo “de un gran valor arquitectónico bastante importante” además de ser un “edificio histórico para Coronel Pringles por los comercios que allí funcionaron y por su ubicación”.
El proyecto contempló la recuperación de este lugar, la profesional señaló “lo que se hizo fue conservar la “cáscara” del edificio y con la madera existente del piso de pinotea se fabricaron las aberturas que dividen las distintas salas” ya que la Cooperativa de las Artes “funcionará como un espacio multicultural”, expresó.
En cuanto al lugar destinado o que ocupará la UPSO para la carrera Técnico Universitario en Emprendimientos Turísticos dentro de la Cooperativa , la Arq. Eceiza nos decía que la misma estará ubicada “donde anteriormente funcionó la oficina del Voluntariado Palmiro Vanoli, ahí va a funcionar el aula de la Universidad Provincial del Sudoeste; y en los laterales funcionarán las salas para muestra de pinturas, exposiciones, etc.”. En cuanto a la cantidad de salas que tendrá la Cooperativa de las Artes, el proyecto contempla, en principio, dos salas: una, la más grande, hacia calle Sáenz Peña para muestras, exposiciones, disertaciones; y sobre calle Stegmann funcionará el aula de la UPSO y un pequeño espacio para el área administrativa de esta sede universitaria.
La ochava o esquina también será modificada con la eliminación de los dos escalones y el reemplazo de una gran rampa de acceso con paños fijos a los costados, “porque hoy la condición primordial de un edificio público es el acceso para todas las personas”, nos decía la responsable de los trabajos que allí se están haciendo. También se hicieron nuevas las aberturas en pinotea, y en la primera etapa se construyeron los baños públicos, baño para discapacitados y la cocina.
En cuanto al Voluntariado Vanoli, María Luján Eceiza indicó que “se le habilitó un aula de la ex Escuela Técnica y desde el Municipio se le facilitó los medios para la mudanza, al igual que el personal para acondicionar el aula que está sobre calle Rivadavia. Además –prosiguió la arquitecta- se construyó una rampa para un mejor acceso al lugar, ya que ellos tenían dificultades para ingresar en la antigua sede” que funcionó en la Cooperativa “y “estimamos que para fines de enero, principios de febrero el Voluntariado estará funcionando en su nueva sede”, aseguró.
Inicialmente este presupuesto era de $ 150.000, de este monto se destinó una parte para el Salón de los Carruajes, el cual está ubicado en unos galpones del patio de este predio al cual se ingresa por calle Sáenz Peña. A este salón, aún no inaugurado, se le colocaron aberturas nuevas de aluminio.
La Arq. Eceiza también manifestó que “hubo que pedir una ampliación de $ 45.000 debido a que se incrementaron gastos e imprevistos, como por ejemplo donde funcionó el Voluntariado Palmiro Vanoli, teníamos un sótano que nosotros pensábamos utilizarlo pero nos encontramos que en el mismo había un metro y medio de agua, no era fácil extraerla para recuperarlo, entonces hubo que rellenar ese sótano. Tampoco pudimos reparar las persianas de todas las aberturas que dan a la calle, hubo que retirarlas y optar por otras variantes”, manifestó.
Y concluyó indicando que “concretar la habilitación de este espacio y recuperar esta esquina, cerrada durante tantos años, y recuperar la esencia del edificio es darle jerarquía a este espacio que será de un valor histórico muy importante para Pringles”.

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