En medios de los rumores por una posible privatización, los trabajadores del Zoológico de La Plata se mantienen en alerta ante la falta de alimentos para los animales. La situación causó trastornos en los últimos días, e incluso provocó el ataque de un chimpancé a un empleado.
Los trabajadores del Zoológico de La Plata se mantienen en alerta por la falta de alimentos para los animales que aseguran que si ocurren nuevos faltantes serán ellos mismos quienes cierren el predio.
El problema comenzó el 10 de abril cuando la comida para los animales -principalmente frutas y verduras- se redujo en un 20 por ciento. Según relatan a La Política Online, fuentes del Zoológico, inmediatamente se tuvo que reducir la ración a las distintas especies.
“La situación es inconveniente porque no sólo significa un riego para el animal que empieza a deteriorarse, sino que también hay un riesgo para los cuidadores que entramos en contactos con ellos”, explicó Martín Levach, jefe de los cuidadores del Zoo y delegado de ATE, y agregó que “el elefante estaba comiendo entre 10 y 20 kilos por día cuando necesita 80 kilos”.
“Muchas veces, la metodología de un animal para comunicar que tiene hambre es en función de la agresión”, aseguró Levach y explicó que hace algunas semanas un chimpancé golpeó a uno de los trabajadores. Según su relato, al momento de ingresar a la jaula para repartir bananas, uno de ellos que estaba con hambre y atacó al trabajador y lo golpeó contra uno de los vidrios.
Según los trabajadores, cuando los animales sufren hambre también intentan escapar. Eso fue lo que ocurrió con dos ciervos axis que se escaparon del parque. “Este tipo de animal es muy poco agresivo, pero en caso de asustarse puede llegar a topar a alguien. Por eso, la situación pasó a ser un riesgo para el personal y un riesgo para el público”, explicó Levach.
Consultado por los motivos de esta falta de alimentos, los trabajadores sostienen que puede haber sido por un cambio en los proveedores. “No pagan y los proveedores se van. Para que otro retome la distribución pasan algunos días y creemos que eso fue lo que sucedió”, aseguran.
Aunque en los últimos días la situación parece normalizarse, los trabajadores siguen en alerta. “No es seguro mantener el zoo abierto, al menos hasta que se regularice la situación”, afirmó Levach.
En varias oportunidades los trabajadores se reunieron con Diego Balducci, el director del Zoo, a quienes le explicaron que si esto vuelve a suceder van a cerrar el predio. Balducci reemplazó a Daniel Arregui en diciembre y, como el anterior, responde a Mariano Bruera, hermano del jefe comunal de La Plata.
Esta situación se da en medio de una ola creciente de rumores sobre una posible privatización del Zoo. Los trascendidos dan cuenta que Pablo Bruera privatizaría una parte de ese predio y la empresa sería Mundo Marino por un monto que oscilaría en los $15 millones de pesos.
“Son más que trascendidos. Nosotros pudimos confirmar que existieron gestiones, pero sabemos que es un sector del gobierno el que quiere avanzar con esa iniciativa”, explicó Levach.
En ese camino por la privatización, el municipio viene aumentando el precio de la entrada. Hasta hace unos meses costaba $2. Más tarde pasó a $5 y ahora aumentó a $10. Según algunas versiones, la idea es aumentar el valor de la entrada de modo que cuando el Zoo sea privatizado y el costo del ticket suba, no se sienta tanto.
Mientras tanto, en el predio se vive tensión. Los trabajadores dicen que el Zoo no está bien explotado y aseguran que “existe un desinterés muy grande”. (La Política OnLine).
Los trabajadores del Zoológico de La Plata se mantienen en alerta por la falta de alimentos para los animales que aseguran que si ocurren nuevos faltantes serán ellos mismos quienes cierren el predio.
El problema comenzó el 10 de abril cuando la comida para los animales -principalmente frutas y verduras- se redujo en un 20 por ciento. Según relatan a La Política Online, fuentes del Zoológico, inmediatamente se tuvo que reducir la ración a las distintas especies.
“La situación es inconveniente porque no sólo significa un riego para el animal que empieza a deteriorarse, sino que también hay un riesgo para los cuidadores que entramos en contactos con ellos”, explicó Martín Levach, jefe de los cuidadores del Zoo y delegado de ATE, y agregó que “el elefante estaba comiendo entre 10 y 20 kilos por día cuando necesita 80 kilos”.
“Muchas veces, la metodología de un animal para comunicar que tiene hambre es en función de la agresión”, aseguró Levach y explicó que hace algunas semanas un chimpancé golpeó a uno de los trabajadores. Según su relato, al momento de ingresar a la jaula para repartir bananas, uno de ellos que estaba con hambre y atacó al trabajador y lo golpeó contra uno de los vidrios.
Según los trabajadores, cuando los animales sufren hambre también intentan escapar. Eso fue lo que ocurrió con dos ciervos axis que se escaparon del parque. “Este tipo de animal es muy poco agresivo, pero en caso de asustarse puede llegar a topar a alguien. Por eso, la situación pasó a ser un riesgo para el personal y un riesgo para el público”, explicó Levach.
Consultado por los motivos de esta falta de alimentos, los trabajadores sostienen que puede haber sido por un cambio en los proveedores. “No pagan y los proveedores se van. Para que otro retome la distribución pasan algunos días y creemos que eso fue lo que sucedió”, aseguran.
Aunque en los últimos días la situación parece normalizarse, los trabajadores siguen en alerta. “No es seguro mantener el zoo abierto, al menos hasta que se regularice la situación”, afirmó Levach.
En varias oportunidades los trabajadores se reunieron con Diego Balducci, el director del Zoo, a quienes le explicaron que si esto vuelve a suceder van a cerrar el predio. Balducci reemplazó a Daniel Arregui en diciembre y, como el anterior, responde a Mariano Bruera, hermano del jefe comunal de La Plata.
Esta situación se da en medio de una ola creciente de rumores sobre una posible privatización del Zoo. Los trascendidos dan cuenta que Pablo Bruera privatizaría una parte de ese predio y la empresa sería Mundo Marino por un monto que oscilaría en los $15 millones de pesos.
“Son más que trascendidos. Nosotros pudimos confirmar que existieron gestiones, pero sabemos que es un sector del gobierno el que quiere avanzar con esa iniciativa”, explicó Levach.
En ese camino por la privatización, el municipio viene aumentando el precio de la entrada. Hasta hace unos meses costaba $2. Más tarde pasó a $5 y ahora aumentó a $10. Según algunas versiones, la idea es aumentar el valor de la entrada de modo que cuando el Zoo sea privatizado y el costo del ticket suba, no se sienta tanto.
Mientras tanto, en el predio se vive tensión. Los trabajadores dicen que el Zoo no está bien explotado y aseguran que “existe un desinterés muy grande”. (La Política OnLine).
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