Organizado por la Asociación Directivos Enseñanza Media (A.D.E.M.) y con el objetivo de afrontar los cambios sociales, culturales y tecnológicos que obligan a rever con claridad los aspectos de la gestión educativa y el liderazgo, se realizó el pasado miércoles 29 en la Quinta Los Ombúes (Adrián Beccar Varela 774, San Isidro) el Encuentro Pedagógico 2011 bajo el lema "La mirada directiva: gestión y liderazgo en tiempos alterados".
La actividad central del encuentro -auspiciado por la Universidad de Belgrano, la Universidad Austral, la Universidad de San Andrés y la Universidad Católica Argentina- estuvo a cargo del Lic. Ricardo Moscato, rector del Colegio El Salvador, presidente de la Asociación de Colegios y Escuelas Jesuitas Argentinas y profesor de la Universidad Austral.
"Una sociedad más compleja y opaca y el agotamiento de modelos burocráticos basados en la ocupación de roles formales de autoridad y en el control vertical de personas y recursos ha impulsado la necesidad de nuevos modelos de conducción educativa ante los desafíos urgentes de una mejor educación para nuestros niños y jóvenes.", se expuso en el encuentro.
"Asimismo que la mirada directiva es irremplazable siempre que podamos educar nuestras miradas. Solo se puede contemplar bien lo que se ama. El amor permite reposar la mirada, volver una y otra vez sobre la realidad amado. Lo dice San Agustín: Ubi cor, ibi oculus. Donde está el corazón allí se posa la mirada. Es el corazón el que orienta, reposa y confiere calidad a la mirada.", se indicó.
“Necesitamos también desactivar el tiempo acelerado que crea en nosotros "entrañas impacientes". Todo es al instante: informaciones, comunicaciones, decisiones. No hay tiempo para permanecer, para contemplar, para reflexionar, para escuchar para aprender y educar. Se trata de educarnos en una nueva mirada sobre la realidad, hoy tan reducida a resultados que solo se ven fracasos, tan reducida por el impacto y la velocidad que solo se ven esperas inútiles, tan reducida por la contabilidad de las cosas que ya no se ven personas. Es provocar una mirada inteligente, solidaria y esperanzada”, se precisó.
"Se trata entonces de integrar reflexión y acción, modelos teóricos y practicas efectivas en el arte de educar, recuperando el sentido del líder educativo como persona que vive valores y trabaja cotidianamente para trasmitirlos creativamente a los demás a través de su testimonio de vida enriquecido por su preparación profesional.", concluyó A.D.E.M.
El lic. Moscato cerró su exposición -seguida atentamente por los docentes y la directora del Museo, Biblioteca y Archivo Histórico Municipal, Marcela Fugardo- citando como modelo a seguir para un eficaz liderazgo el sugerido por San Agustín "Corregir a los indisciplinados, confortar a los pusilánimes, sostener a los débiles, refutar a los adversarios, guardarse de los insidiosos, instruir a los ignorantes, estimular a los indolentes, aplacar a los pendencieros, moderar a los ambiciosos, animar a los desalentados, apaciguar a los contendientes, ayudar a los pobres, liberar a los oprimidos, mostrar aprobación a los buenos, tolerar a los malos y (¡pobre de mí!) amar a todos."
La actividad central del encuentro -auspiciado por la Universidad de Belgrano, la Universidad Austral, la Universidad de San Andrés y la Universidad Católica Argentina- estuvo a cargo del Lic. Ricardo Moscato, rector del Colegio El Salvador, presidente de la Asociación de Colegios y Escuelas Jesuitas Argentinas y profesor de la Universidad Austral.
"Una sociedad más compleja y opaca y el agotamiento de modelos burocráticos basados en la ocupación de roles formales de autoridad y en el control vertical de personas y recursos ha impulsado la necesidad de nuevos modelos de conducción educativa ante los desafíos urgentes de una mejor educación para nuestros niños y jóvenes.", se expuso en el encuentro.
"Asimismo que la mirada directiva es irremplazable siempre que podamos educar nuestras miradas. Solo se puede contemplar bien lo que se ama. El amor permite reposar la mirada, volver una y otra vez sobre la realidad amado. Lo dice San Agustín: Ubi cor, ibi oculus. Donde está el corazón allí se posa la mirada. Es el corazón el que orienta, reposa y confiere calidad a la mirada.", se indicó.
“Necesitamos también desactivar el tiempo acelerado que crea en nosotros "entrañas impacientes". Todo es al instante: informaciones, comunicaciones, decisiones. No hay tiempo para permanecer, para contemplar, para reflexionar, para escuchar para aprender y educar. Se trata de educarnos en una nueva mirada sobre la realidad, hoy tan reducida a resultados que solo se ven fracasos, tan reducida por el impacto y la velocidad que solo se ven esperas inútiles, tan reducida por la contabilidad de las cosas que ya no se ven personas. Es provocar una mirada inteligente, solidaria y esperanzada”, se precisó.
"Se trata entonces de integrar reflexión y acción, modelos teóricos y practicas efectivas en el arte de educar, recuperando el sentido del líder educativo como persona que vive valores y trabaja cotidianamente para trasmitirlos creativamente a los demás a través de su testimonio de vida enriquecido por su preparación profesional.", concluyó A.D.E.M.
El lic. Moscato cerró su exposición -seguida atentamente por los docentes y la directora del Museo, Biblioteca y Archivo Histórico Municipal, Marcela Fugardo- citando como modelo a seguir para un eficaz liderazgo el sugerido por San Agustín "Corregir a los indisciplinados, confortar a los pusilánimes, sostener a los débiles, refutar a los adversarios, guardarse de los insidiosos, instruir a los ignorantes, estimular a los indolentes, aplacar a los pendencieros, moderar a los ambiciosos, animar a los desalentados, apaciguar a los contendientes, ayudar a los pobres, liberar a los oprimidos, mostrar aprobación a los buenos, tolerar a los malos y (¡pobre de mí!) amar a todos."
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