Estudiantes terciarios tienen desde noviembre tomada la sede del Instituto de Cine local en reclamo por los cambios en el plan de estudios que aplicó el Intendente. Semanas atrás fueron agredidos por una patota del oficialismo. Ya fueron recibidos por autoridades del INCAA y los apoyan diputados del FAP.
Lo que en principio parecía un simple reclamo de estudiantes terciarios por cambios en la política educativa del Instituto de Arte Cinematográfico de Avellaneda (IDAC) se está transformando en un gran dolor de cabeza para el intendente, Jorge Ferraresi, ya que está tomando trascendencia nacional.
Desde noviembre del año pasado, los alumnos vienen protestando por el cambio en el plan de estudios que cerraría la orientación de formación documental ya que la nueva política se centrará en la producción televisiva. Los alumnos estiman que con el nuevo plan se perderán alrededor de mil horas cátedra en todo el IDAC y, aproximadamente, 100 horas cátedra en la carrera de cine.
Por eso, desde noviembre mantienen tomado el edificio de la calle Italia no sin algunas presiones por parte del Ejecutivo según denuncian. Es más, los alumnos fueron agredidos por una patota cercana al intendente durante la asunción de las autoridades de la Universidad de Avellaneda (Undav).
“Esa es la democracia de la cual hablaba el ministro Sileoni mientras nos pronunciábamos en el acto de la Undav? Vimos la farsa de un gobierno que dice luchar por la educación y la cultura, cuando en realidad propone golpes y vaciamiento de la educación pública”, dijeron los alumnos a través de un comunicado.
El conflicto parece ir in crescendo y tomando alcance nacional ya que ante la falta de respuestas locales, los alumnos mantuvieron reuniones con la presidenta del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), Liliana Mazure. Además, esta semana la diputada nacional del FAP, Victoria Donda, también visitó a los alumnos junto a su novio y periodista de la revista Barcelona, Pablo Marchetti.
Con todo, el intendente aceptó recibir un petitorio de los alumnos y también se reunió con concejales de la oposición en un encuentro en que negó que busque el cierre del establecimiento. De todos modos, según dijeron desde el IDAC, Ferraresi se negó a firmar un compromiso por escrito para solucionar el conflicto. (La Política OnLine).
Lo que en principio parecía un simple reclamo de estudiantes terciarios por cambios en la política educativa del Instituto de Arte Cinematográfico de Avellaneda (IDAC) se está transformando en un gran dolor de cabeza para el intendente, Jorge Ferraresi, ya que está tomando trascendencia nacional.
Desde noviembre del año pasado, los alumnos vienen protestando por el cambio en el plan de estudios que cerraría la orientación de formación documental ya que la nueva política se centrará en la producción televisiva. Los alumnos estiman que con el nuevo plan se perderán alrededor de mil horas cátedra en todo el IDAC y, aproximadamente, 100 horas cátedra en la carrera de cine.
Por eso, desde noviembre mantienen tomado el edificio de la calle Italia no sin algunas presiones por parte del Ejecutivo según denuncian. Es más, los alumnos fueron agredidos por una patota cercana al intendente durante la asunción de las autoridades de la Universidad de Avellaneda (Undav).
“Esa es la democracia de la cual hablaba el ministro Sileoni mientras nos pronunciábamos en el acto de la Undav? Vimos la farsa de un gobierno que dice luchar por la educación y la cultura, cuando en realidad propone golpes y vaciamiento de la educación pública”, dijeron los alumnos a través de un comunicado.
El conflicto parece ir in crescendo y tomando alcance nacional ya que ante la falta de respuestas locales, los alumnos mantuvieron reuniones con la presidenta del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), Liliana Mazure. Además, esta semana la diputada nacional del FAP, Victoria Donda, también visitó a los alumnos junto a su novio y periodista de la revista Barcelona, Pablo Marchetti.
Con todo, el intendente aceptó recibir un petitorio de los alumnos y también se reunió con concejales de la oposición en un encuentro en que negó que busque el cierre del establecimiento. De todos modos, según dijeron desde el IDAC, Ferraresi se negó a firmar un compromiso por escrito para solucionar el conflicto. (La Política OnLine).
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