Así lo aseguraron desde la Asociación de Víctimas de Violaciones. Dicen que “todo Pilar está bajo el peligro de los ataques sexuales”. Piden que se ponga en vigencia el registro de ADN de violadores y ponen bajo la lupa el accionar de los fiscales.
El distrito de Pilar se ha transformado en los últimos meses como una de las comunas en las que se registra una importante cantidad de casos de abusos sexuales cuyas víctimas son menores de edad.
Así lo afirman desde la Asociación de Víctimas de Violaciones (AVIVI), intitución que aseguró que en los últimos cuarenta días se han denunciado un total de siete violaciones, un número que preocupa por el hecho en sí pero sobre todo por la brutalidad con la que se producen.
La titular de AVIVI, María Elena Leuzzi, aseguró que “es evidente y preocupante que toda la zona de Pilar está bajo el peligro de los ataques contra la integridad sexual” y posó su mirada en dos cuestiones fundamentales que ayudarían a prevenir esas aberraciones: la puesta en vigencia del registro de ADN para violadores y la actitud que toman los fiscales ante la presencia de un caso de violación.
Es que en uno de los últimos casos denunciados, una joven de 15 años que fue brutalmente abusada en la localidad de Derqui y que tuvo que ser intervenida quirurgicamente por las heridas que sufrió en sus genitales, “la fiscal que investiga el caso no le terminó de creer y decidió no pedir la captura de un sospechoso, considerando que podría tratarse de relaciones consentidas", según aseguraron desde AVIVI.
“Ese es uno de los problemas al que nos enfrentamos diariamente: la falta de compromiso por parte de algunos fiscales al momento de tomar decisiones. En el caso de esta joven la policía trabajó muy bien, pero la Justicia no ayuda", se quejó Leuzzi al tiempo que agregó que “en el país debería haber fiscalías especializadas en delitos sexuales, esa —entre otras— sería una buena medida para empezar a combatir el tema con seriedad", señaló la mujer.
Registro de Violadores
La titular de la entidad también bregó por la pronta puesta en marcha del registro de ADN para violadores, un proyecto que fue aprobado por el Senado de la provincia de Buenos Aires pero que todavía no ha sido reglamentado.
“Si existiera, como venimos reclamando desde hace años, un banco de datos con muestras de ADN de personas que participaron en violaciones se reduciría drásticamente el número de episodios, porque en la mayoría de los casos se trata de agresores seriales. Un registro de ADN cortaría la cadena, pero las autoridades siguen mirando para otro lado", dijo Leuzzi al respecto.
Seis casos en 40 días
El primer hecho de abuso sexual ocurrió el 30 de mayo pasado, cuando una mujer fue sometida por un delincuente en inmediaciones de la estación de trenes, en el Barrio Toro de Derqui.
En el segundo caso, una joven de veintiún años fue atacada por dos hombres que se hicieron pasar por remiseros.
Otra chica de diecinueve años fue víctima de un nuevo hecho violento cuando se dirigía a su trabajo en el Barrio Lima, de Pilar.
Una adolescente de diecisiete años fue abusada presuntamente por un vecino luego de ingresar a su casa.
Una mujer de treinta y seis años que volvía de una fiesta en el barrio Monterrey fue atacada y violada por un chico de menos de dieciocho años.
Otra muchacha de veinte años que caminaba por los alrededores del kilómetro 51 de la Panamericana fue interceptada por tres hombres. La subieron a un auto negro, la llevaron a una casa y abusaron de ella.
El último caso es de una joven de 15 años que fue abusada sexualmente cuando regresaba de una fiesta en la localidad de Derqui. Como consecuencia del hecho, debió ser sometida a dos operaciones en los genitales con ocho puntos de sutura por "destrucción de esfínter".
El distrito de Pilar se ha transformado en los últimos meses como una de las comunas en las que se registra una importante cantidad de casos de abusos sexuales cuyas víctimas son menores de edad.
Así lo afirman desde la Asociación de Víctimas de Violaciones (AVIVI), intitución que aseguró que en los últimos cuarenta días se han denunciado un total de siete violaciones, un número que preocupa por el hecho en sí pero sobre todo por la brutalidad con la que se producen.
La titular de AVIVI, María Elena Leuzzi, aseguró que “es evidente y preocupante que toda la zona de Pilar está bajo el peligro de los ataques contra la integridad sexual” y posó su mirada en dos cuestiones fundamentales que ayudarían a prevenir esas aberraciones: la puesta en vigencia del registro de ADN para violadores y la actitud que toman los fiscales ante la presencia de un caso de violación.
Es que en uno de los últimos casos denunciados, una joven de 15 años que fue brutalmente abusada en la localidad de Derqui y que tuvo que ser intervenida quirurgicamente por las heridas que sufrió en sus genitales, “la fiscal que investiga el caso no le terminó de creer y decidió no pedir la captura de un sospechoso, considerando que podría tratarse de relaciones consentidas", según aseguraron desde AVIVI.
“Ese es uno de los problemas al que nos enfrentamos diariamente: la falta de compromiso por parte de algunos fiscales al momento de tomar decisiones. En el caso de esta joven la policía trabajó muy bien, pero la Justicia no ayuda", se quejó Leuzzi al tiempo que agregó que “en el país debería haber fiscalías especializadas en delitos sexuales, esa —entre otras— sería una buena medida para empezar a combatir el tema con seriedad", señaló la mujer.
Registro de Violadores
La titular de la entidad también bregó por la pronta puesta en marcha del registro de ADN para violadores, un proyecto que fue aprobado por el Senado de la provincia de Buenos Aires pero que todavía no ha sido reglamentado.
“Si existiera, como venimos reclamando desde hace años, un banco de datos con muestras de ADN de personas que participaron en violaciones se reduciría drásticamente el número de episodios, porque en la mayoría de los casos se trata de agresores seriales. Un registro de ADN cortaría la cadena, pero las autoridades siguen mirando para otro lado", dijo Leuzzi al respecto.
Seis casos en 40 días
El primer hecho de abuso sexual ocurrió el 30 de mayo pasado, cuando una mujer fue sometida por un delincuente en inmediaciones de la estación de trenes, en el Barrio Toro de Derqui.
En el segundo caso, una joven de veintiún años fue atacada por dos hombres que se hicieron pasar por remiseros.
Otra chica de diecinueve años fue víctima de un nuevo hecho violento cuando se dirigía a su trabajo en el Barrio Lima, de Pilar.
Una adolescente de diecisiete años fue abusada presuntamente por un vecino luego de ingresar a su casa.
Una mujer de treinta y seis años que volvía de una fiesta en el barrio Monterrey fue atacada y violada por un chico de menos de dieciocho años.
Otra muchacha de veinte años que caminaba por los alrededores del kilómetro 51 de la Panamericana fue interceptada por tres hombres. La subieron a un auto negro, la llevaron a una casa y abusaron de ella.
El último caso es de una joven de 15 años que fue abusada sexualmente cuando regresaba de una fiesta en la localidad de Derqui. Como consecuencia del hecho, debió ser sometida a dos operaciones en los genitales con ocho puntos de sutura por "destrucción de esfínter".
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