MERCEDES, Febrero 12, (PUNTO CERO) Lejos aún de ir por la vía de una madura institucionalidad, pendulamos bruscamente entre los manejos a que dan lugar eventos coyunturales que van desde el fogoneo de acciones tendenciosas, la funcionalidad al régimen, la demagogia y las actitudes personalistas y caprichosas a que suele dar lugar el indeleble argumento de la mayoría, cuando no, las expresiones de molde o los discursos muy prolijos que no pueden ser sostenidos con las acciones ni con la conducta.
Algunos árboles impiden ver el bosque. A veces es necesario buscar un mejor ángulo desde el cual no perder de vista que somos depositarios y no dueños de un poder delegado por los ciudadanos de Mercedes, gracias a múltiples interpretaciones de la realidad, pero coincidentes en el objetivo de implementar políticas públicas que mejoren nuestra calidad de vida; y por ello, tenemos la obligación de actuar en consecuencia. Por tanto, la irracionalidad en las decisiones adoptadas, los personalismos o simplemente el capricho no pueden tener cabida.
Deberíamos poder ser garantes de ese poder y ese deber delegados en pos de proteger los derechos amparados por la ley. En lugar de ello convertimos los ámbitos de discusión instituida o los instrumentos para el ejercicio de nuestras obligaciones, en el coto de caza de intereses mezquinos. Entonces el diálogo se transforma en mascarada, se pierde el rumbo y continuamos navegando en el mar de la demagogia.
Se ha hablado mucho acerca de la estabilidad laboral de los empleados y de basar su carrera en el mérito puesto de manifiesto a través de concursos y capacitaciones, pero nada se dice de los funcionarios, ni de los concejales por cierto. Haber tenido la buena disposición de haber asistido a una capacitación técnica para la implementación de un nuevo sistema de presentación del presupuesto se torna, para todos quienes estuvieron ausentes con aviso al mismo, en un blanco fácil para la chanza confundiendo los términos, cuando el mismo apuntaba a una voluntad de conocer para hablar con fundamento. Frente a lo que se pregona como una obligación, para otros, se valora en otros ámbitos o simplemente se dice porque es políticamente correcto en los hechos, se devalúa en el discurso cuando no se puede dar cuenta en lo personal, del mismo.
Se plantean situaciones maniqueas que demoizan al otro, tornando las cosas blancas o negras cuando es preciso avanzar hacia una concepción en que quepan los matices, que se plantean cuando hay un verdadero diálogo abierto; e insisto, la coherencia no sólo entre lo que se dice y se hace sino también en lo que se plantea en el tiempo y en diferentes contextos.
Desmascarada
Constituye un hecho injusto que no se renueve contrato a un empleado después de que casi ha estado cuatro años desempeñándose en la administración pública, desnudando motivaciones políticas en tal acto, y que genera una revisión de la situación de más de un empleado en condiciones laborales precarias.
No menos injusto es que todavía haya rehenes de un accionar local que adhiere a una continua postergación de la redistribución del ingreso, porque confundidos en el discurso que plantea ir en busca de mejorar la calidad de vida de “amplios sectores en vulnerabilidad social”, hace que pierdan identidad tantas historias de gente común, cuya verdad nos grita en la cara.
No menos injusta es la situación de todos y cada uno de los que con la misma bronca solo esperan a que los políticos hagamos algo, que con las herramientas que nos han dado seamos su voz, no obstante, “ningunean” los discursos con planteos políticos desde la soledad no tan sola y se ponen en primera plana escritos plagados de números y tecnicismos que sólo miran de frente el árbol con el cual ocultan el bosque, y lo señalan para que todos lo veamos cuando es en el bosque donde hay que dar la pelea.
En definitiva, ¿qué se puso de manifiesto con la aprobación de este presupuesto municipal?:
-No hubo cuestionamiento a la diagramación propuesta por esta gestión; en general están de acuerdo con la distribución de partidas y por ende con la política de Selva desplegada en números.
-No se planteó tampoco desde la oposición mayoritaria una visión integral: con los mismos remiendos a que apeló el ejecutivo se podaron algunas partidas para conceder otras que no son más que parches.
-Hubo acuerdos tácitos para respetar el número de la planta política y los gastos de representación del intendente que constituyen un 15% de su sueldo.
-No hubo pronunciamiento, excepto el de nuestro bloque para que se incorporaran al básico las sumas que actualmente percibe en negro el empleado municipal.
-Quedó puesto de manifiesto que la capacitación está bien para los empleados, pero no se habla de la capacitación de funcionarios ni mucho menos para concejales, y que quien lo hace es el tonto de la película.
Algunos árboles impiden ver el bosque. A veces es necesario buscar un mejor ángulo desde el cual no perder de vista que somos depositarios y no dueños de un poder delegado por los ciudadanos de Mercedes, gracias a múltiples interpretaciones de la realidad, pero coincidentes en el objetivo de implementar políticas públicas que mejoren nuestra calidad de vida; y por ello, tenemos la obligación de actuar en consecuencia. Por tanto, la irracionalidad en las decisiones adoptadas, los personalismos o simplemente el capricho no pueden tener cabida.
Deberíamos poder ser garantes de ese poder y ese deber delegados en pos de proteger los derechos amparados por la ley. En lugar de ello convertimos los ámbitos de discusión instituida o los instrumentos para el ejercicio de nuestras obligaciones, en el coto de caza de intereses mezquinos. Entonces el diálogo se transforma en mascarada, se pierde el rumbo y continuamos navegando en el mar de la demagogia.
Se ha hablado mucho acerca de la estabilidad laboral de los empleados y de basar su carrera en el mérito puesto de manifiesto a través de concursos y capacitaciones, pero nada se dice de los funcionarios, ni de los concejales por cierto. Haber tenido la buena disposición de haber asistido a una capacitación técnica para la implementación de un nuevo sistema de presentación del presupuesto se torna, para todos quienes estuvieron ausentes con aviso al mismo, en un blanco fácil para la chanza confundiendo los términos, cuando el mismo apuntaba a una voluntad de conocer para hablar con fundamento. Frente a lo que se pregona como una obligación, para otros, se valora en otros ámbitos o simplemente se dice porque es políticamente correcto en los hechos, se devalúa en el discurso cuando no se puede dar cuenta en lo personal, del mismo.
Se plantean situaciones maniqueas que demoizan al otro, tornando las cosas blancas o negras cuando es preciso avanzar hacia una concepción en que quepan los matices, que se plantean cuando hay un verdadero diálogo abierto; e insisto, la coherencia no sólo entre lo que se dice y se hace sino también en lo que se plantea en el tiempo y en diferentes contextos.
Desmascarada
Constituye un hecho injusto que no se renueve contrato a un empleado después de que casi ha estado cuatro años desempeñándose en la administración pública, desnudando motivaciones políticas en tal acto, y que genera una revisión de la situación de más de un empleado en condiciones laborales precarias.
No menos injusto es que todavía haya rehenes de un accionar local que adhiere a una continua postergación de la redistribución del ingreso, porque confundidos en el discurso que plantea ir en busca de mejorar la calidad de vida de “amplios sectores en vulnerabilidad social”, hace que pierdan identidad tantas historias de gente común, cuya verdad nos grita en la cara.
No menos injusta es la situación de todos y cada uno de los que con la misma bronca solo esperan a que los políticos hagamos algo, que con las herramientas que nos han dado seamos su voz, no obstante, “ningunean” los discursos con planteos políticos desde la soledad no tan sola y se ponen en primera plana escritos plagados de números y tecnicismos que sólo miran de frente el árbol con el cual ocultan el bosque, y lo señalan para que todos lo veamos cuando es en el bosque donde hay que dar la pelea.
En definitiva, ¿qué se puso de manifiesto con la aprobación de este presupuesto municipal?:
-No hubo cuestionamiento a la diagramación propuesta por esta gestión; en general están de acuerdo con la distribución de partidas y por ende con la política de Selva desplegada en números.
-No se planteó tampoco desde la oposición mayoritaria una visión integral: con los mismos remiendos a que apeló el ejecutivo se podaron algunas partidas para conceder otras que no son más que parches.
-Hubo acuerdos tácitos para respetar el número de la planta política y los gastos de representación del intendente que constituyen un 15% de su sueldo.
-No hubo pronunciamiento, excepto el de nuestro bloque para que se incorporaran al básico las sumas que actualmente percibe en negro el empleado municipal.
-Quedó puesto de manifiesto que la capacitación está bien para los empleados, pero no se habla de la capacitación de funcionarios ni mucho menos para concejales, y que quien lo hace es el tonto de la película.
-Que los bloques opositores, excepto el nuestro, pautaron acuerdos para mantener un statu quo, cuando por mayoría podrían haberse planteado políticas públicas para el menor manejo de los fondos públicos. En tanto se vociferaban críticas en el recinto, se terminó avalando la política desplegada por el Ejecutivo. (Parte de la negociación entre CC, oficialismo y PJ terminó aprobando la incorporación de personal contratado a planta política pero avaló la permanencia de 14 cargos políticos vacantes) (PUNTO CERO).
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