JOSE C. PAZ, Julio 11, (PUNTO CERO-www.aquilanoticia.com) En el conglomerado kirchnerista, por primera vez, apareció gente con camperas rojas que decía representar al intendente de José C. Paz, Mario Ishii.
Los militantes se ubicaron en el medio de los refugios de Compromiso K y Militancia Social y pensaban acampar allí hasta el miércoles. Estamos con Cristina a muerte , aseguraban. Anoche se estaba por montar otra carpa K, la séptima. Sería sólo a título testimonial y tendría la firma del PJ de Merlo.
Los militantes del Frente Transversal desenfundaban bombos cuando los simpatizantes del Movimiento Evita suspendieron un partido de truco para probar el generador eléctrico.
A unos metros, La Cámpora levantaba banderas observada por vecinos nuevos: los paceños de José C. Paz, que tomaban café en la carpa del intendente, Mario Alberto Ishii.
Del otro lado, Raúl Castells visitaba el búnker frente al suyo que unos ruralistas autoconvocados terminaban de armar. "¡Bienvenido a la carpa de la unión!", sonreía Armando Zabala, el productor líder de la iniciativa.
Caía la noche y, con brío renovado, volvía el campamento militante frente al Congreso, más poblado que nunca. Sumadas las que estaban, las rearmadas y las nuevas, ayer eran once las carpas frente al Parlamento.
"Arrancó la redistribución de la riqueza... ¡Y empezó por el carpero!", gritaba contento José Luis "Yiyo" Fiezzi, el empresario que alquila la mayoría. Anoche se regodeaba haciendo números en el refugio de Militancia Social. Fiezzi cobrará 8000 pesos por esa carpa. Costará un poco menos que la de Compromiso K, que ronda los 12.000 pesos, 4000 más que la semana pasada.
"¿Qué querés? ¡Pasó el tren bala y me subí!", ironizó Fiezzi al diario capitalino La Nación. También instaló una pantalla gigante para seguir la sesión y una "carpa sanitaria". Ella, junto a las de Compromiso K, el Movimiento Evita, el Frente Transversal, la JP, La Cámpora y Militancia Social sumaban siete refugios. La octava carpa K la aportó Ishii. Y también la instaló Fiezzi.
Según los líderes K, el objetivo es "copar el espacio público" y evitar "reclamos ruralistas", un día después de que anunciaran una marcha para el martes próximo y apoyo para una carpa que instalará Carbap. El carpero, claro, será Fiezzi.
Los militantes se ubicaron en el medio de los refugios de Compromiso K y Militancia Social y pensaban acampar allí hasta el miércoles. Estamos con Cristina a muerte , aseguraban. Anoche se estaba por montar otra carpa K, la séptima. Sería sólo a título testimonial y tendría la firma del PJ de Merlo.
Los militantes del Frente Transversal desenfundaban bombos cuando los simpatizantes del Movimiento Evita suspendieron un partido de truco para probar el generador eléctrico.
A unos metros, La Cámpora levantaba banderas observada por vecinos nuevos: los paceños de José C. Paz, que tomaban café en la carpa del intendente, Mario Alberto Ishii.
Del otro lado, Raúl Castells visitaba el búnker frente al suyo que unos ruralistas autoconvocados terminaban de armar. "¡Bienvenido a la carpa de la unión!", sonreía Armando Zabala, el productor líder de la iniciativa.
Caía la noche y, con brío renovado, volvía el campamento militante frente al Congreso, más poblado que nunca. Sumadas las que estaban, las rearmadas y las nuevas, ayer eran once las carpas frente al Parlamento.
"Arrancó la redistribución de la riqueza... ¡Y empezó por el carpero!", gritaba contento José Luis "Yiyo" Fiezzi, el empresario que alquila la mayoría. Anoche se regodeaba haciendo números en el refugio de Militancia Social. Fiezzi cobrará 8000 pesos por esa carpa. Costará un poco menos que la de Compromiso K, que ronda los 12.000 pesos, 4000 más que la semana pasada.
"¿Qué querés? ¡Pasó el tren bala y me subí!", ironizó Fiezzi al diario capitalino La Nación. También instaló una pantalla gigante para seguir la sesión y una "carpa sanitaria". Ella, junto a las de Compromiso K, el Movimiento Evita, el Frente Transversal, la JP, La Cámpora y Militancia Social sumaban siete refugios. La octava carpa K la aportó Ishii. Y también la instaló Fiezzi.
Según los líderes K, el objetivo es "copar el espacio público" y evitar "reclamos ruralistas", un día después de que anunciaran una marcha para el martes próximo y apoyo para una carpa que instalará Carbap. El carpero, claro, será Fiezzi.
El piquetero Castells también lo contrató a él. "Le hicimos precio. Le cobramos 4000", contó. Justo frente a la suya ruralistas autoconvocados ayer pusieron otra carpa. "Nos quedamos hasta el 18", adelantó Zabala. Pagó 2700 pesos. Con la de los grupos aborígenes, que recolectan firmas para que les "restituyan tierras ancestrales", son las únicas que no son de Fiezzi. (PUNTO CERO-www.aquilanoticia.com).
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