La muerte de una niña de 8 años por presunta desnutrición, acaecido en el Hospital de Niños “Sor María Ludovica” de La Plata, dio lugar a la presentación de un pedido de informes dirigido al Poder Ejecutivo bonaerense de parte de los senadores de la Coalición Cívica Fernando López Villa y Andrés Antedoménico.
En ese orden preguntan cuál fue el diagnóstico emitido por los profesionales que atendieron a la niña Belén Anahí Leguizamón al arribar al referido nosocomio, y las conclusiones de los estudios médicos realizados tras su fallecimiento. También sostienen que dado que a priori se consideró que la causa del óbito habría sido desnutrición, y que los otros seis hijos de la familia de la niña no presentan manifestaciones de dicho padecimiento, surgió como causa probable que su estado se debiera a un cuadro de celiaquía, por lo que desean saber qué funcionario y dependencia provincial debió hacerse responsable de lo determinado por la ley 10.499 y su modificatoria 12.631, que asigna al Estado la responsabilidad de arbitrar los medios para proveer de alimentos adecuados a los celíacos carenciados.
Los legisladores de la Coalición Cívica demandan precisiones en torno del accionar de los médicos en la Unidad Sanitaria 14, de la capital provincial, a la cual habría recurrido en primera instancia la familia de Belén, y de la demora de un mes en concedérsele un turno para ser atendida en el Hospital de Niños, inexplicable dada la gravedad del cuadro.
Deslinde de responsabilidades
En los fundamentos de su presentación afirman López Villa y Antedoménico que la pequeña Belén, fallecida por un cuadro perfectamente evitable, vivía en el barrio denominado La Favela, cuyos habitantes afrontan condiciones insostenibles al carecer de servicios tales como agua potable o desagües cloacales, de los cuales dependen, en gran medida, los riesgos a que someten su salud y su vida.
Dada la sospecha de los médicos de que la niña sufría de inconvenientes en la asimilación de los alimentos, llegando a mencionar específicamente a la celiaquía, “urge determinar las responsabilidades que desencadenaron el trágico episodio a partir de la legislación específica en vigor que establece con irrefutable claridad el rol que le cabe al Estado en la preservación de la vida y la salud de los bonaerenses, de modo de garantizar -sobre todo- que lo sucedido no vuelva a acontecer, y establecer a la vez con absoluta certeza tanto el rol desempeñado por los médicos y funcionarios intervinientes como los mecanismos que deben arbitrarse para la detección y reversión de todo tipo de déficits nutricionales”.-
En ese orden preguntan cuál fue el diagnóstico emitido por los profesionales que atendieron a la niña Belén Anahí Leguizamón al arribar al referido nosocomio, y las conclusiones de los estudios médicos realizados tras su fallecimiento. También sostienen que dado que a priori se consideró que la causa del óbito habría sido desnutrición, y que los otros seis hijos de la familia de la niña no presentan manifestaciones de dicho padecimiento, surgió como causa probable que su estado se debiera a un cuadro de celiaquía, por lo que desean saber qué funcionario y dependencia provincial debió hacerse responsable de lo determinado por la ley 10.499 y su modificatoria 12.631, que asigna al Estado la responsabilidad de arbitrar los medios para proveer de alimentos adecuados a los celíacos carenciados.
Los legisladores de la Coalición Cívica demandan precisiones en torno del accionar de los médicos en la Unidad Sanitaria 14, de la capital provincial, a la cual habría recurrido en primera instancia la familia de Belén, y de la demora de un mes en concedérsele un turno para ser atendida en el Hospital de Niños, inexplicable dada la gravedad del cuadro.
Deslinde de responsabilidades
En los fundamentos de su presentación afirman López Villa y Antedoménico que la pequeña Belén, fallecida por un cuadro perfectamente evitable, vivía en el barrio denominado La Favela, cuyos habitantes afrontan condiciones insostenibles al carecer de servicios tales como agua potable o desagües cloacales, de los cuales dependen, en gran medida, los riesgos a que someten su salud y su vida.
Dada la sospecha de los médicos de que la niña sufría de inconvenientes en la asimilación de los alimentos, llegando a mencionar específicamente a la celiaquía, “urge determinar las responsabilidades que desencadenaron el trágico episodio a partir de la legislación específica en vigor que establece con irrefutable claridad el rol que le cabe al Estado en la preservación de la vida y la salud de los bonaerenses, de modo de garantizar -sobre todo- que lo sucedido no vuelva a acontecer, y establecer a la vez con absoluta certeza tanto el rol desempeñado por los médicos y funcionarios intervinientes como los mecanismos que deben arbitrarse para la detección y reversión de todo tipo de déficits nutricionales”.-
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