La junta interna de la Asociación de Trabajadores del Estado del Hospital de Pediatría Juan Garrahan emitió un comunicado ratificando que el nene correntino que falleció en ese centro de salud hace más de una semana, murió como consecuencia de los agrotóxicos. En diálogo con Informativo FARCO el trabajador Gustavo Lerer, miembro de la comisión de ATE del Garrahan dijo que “sin ninguna duda esto fue por los agrotóxicos”, ya que también habían muerto otros animales de los alrededores de ese campo. Hace casi un año otro chico de Lavalle, provincia de Corrientes, murió por agrotóxicos cuando iba a ser trasladado al hospital.
Los trabajadores de ATE del Garrahan, el hospital de pediatría más prestigioso del país, además están apoyando la lucha de los médicos de pueblos fumigados, que se reúnen periódicamente y realizan charlas informativas sobre la contaminación por estos venenos que se usan en las plantaciones. En diálogo con Informativo FARCO el trabajador Gustavo Lerer, explicó que “sin ninguna duda esto fue por los agrotóxicos. Esta gente, como dice el comunicado, vive lindero a una plantación de tomates. El chico fue envenenado al llevarse tierra a la boca. Aparte los datos precedentes que son la muerte del perro, la muerte de los chanchos, la muerte de las aves de corral, todos ellos además sin agusanarse”. En el comunicado los trabajadores indican que “si bien aún resta confirmar el origen de la toxicidad, las circunstancias, el lugar y los antecedentes indicarían, sin lugar a dudas que la causa del envenenamiento fueron los agrotóxicos utilizados en la horticultura”.
Lerer dijo también que además de estos casos agudos, atienden numerosos casos crónicos de chicos con problemas de salud por estar expuestos a fumigaciones con agrotóxicos. Tal como lo indican los trabajadores de la junta interna de ATE del Garrahan, Lerer dijo que piden que se deje de fumigar: “No planteamos una distancia. Nosotros planteamos que se deje de fumigar. Porque vos imaginate que cuando se hacen fumigaciones a gran escala el esparcimiento por el aire, o el deposito en terreno, o el deposito en las aguas es muy difícil de poder medir. Entonces nosotros planteamos que por lo menos rápidamente se deje de fumigar con esos venenos. Porque son venenos y si son venenos matan y lo que hay que hacer es dejar de fumigar”, aseguró.
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