La Justicia marplatense adecuará todos sus tribunales colegiados de familia en juzgados unipersonales. Dju realiza es un recorrido por los caminos que atravesaron este proceso: la sanción de la legislación en 2008 y las postergaciones, las dilaciones y las resoluciones de la Corte bonaerense.
Fueron muchas resoluciones de la Suprema Corte de Buenos Aires (SCBA) y postergaciones de parte de la legislatura provincial, pero finalmente el proyecto que prevé transformar los tribunales colegiados de familia en juzgados unipersonales va tomando forma. En febrero próximo Mar Del Plata va a llevar a cabo las acciones correspondientes para completar de forma acabada esta iniciativa que surgió como una propuesta legislativa y judicial.
En diciembre de 2008 el Poder Judicial consensuó el proyecto junto a legisladores de distintos bloques y desde entonces la propuesta tuvo idas y venidas que postergaron durante años la transformación.
Esta idea se pudo llevar a cabo gracias a la sanción de la Ley 13.634, que, entre otras cosas, contempla los "Principios Generales del Fuero de Familia y del Fuero Penal del Niño", y también establece que "los niños tienen derecho a ser oídos en cualquier etapa del proceso, a peticionar, a expresar sus opiniones y a que éstas se tengan en cuenta en las decisiones que afecten o hagan a sus derechos, considerando su desarrollo psicofísico".
En este sentido, la normativa también establece que "la internación y cualquier otra medida que signifique el alojamiento del niño en una institución pública, semipública o privada, cualquiera sea el nombre que se le asigne a tal medida y aún cuando sea provisional tendrá carácter excepcional y será aplicada como medida de último recurso, por el tiempo más breve posible y debidamente fundada".
Pero el derrotero de la iniciativa que comenzó en 2008 incluyó resoluciones de la SCBA para poder llevar a cabo, aunque sea de forma incipiente, la concreción del objetivo que era redistribuir y poder canalizar mejor los reclamos del fuero de Familia.
En primer lugar los problemas surgieron a raíz de otro inconveniente impostergable para las autoridades del Poder Judicial: la emergencia edilicia. Según constataron en diferentes pronunciamientos, fue difícil para los miembros de la administración de Justicia bonaerense adaptarse a esta situación. Por supuesto, las medidas de transformación eran llevadas a cabo también por el Ejecutivo a través del Ministerio de Justicia.
Así fue que a través de un plan improvisado, pero de forma organizada, los integrantes de la SCBA lograron poner en funcionamientos los juzgados correspondientes a localidades como San Miguel y San Martín o ciudades como La Plata. Por eso el paso dado en Mar Del Plata es fundamental, dado que es una de las jurisdicciones de mayor envergadura en relación al caudal de causas que se tramitan allí.
En 2011 la Corte bonaerense comenzó a dar los primeros grandes pasos en este respecto, pero aún faltaba la aprobación oficial de la legislatura que seguía prorrogando la puesta en funcionamiento del pleno de estos juzgados.
En 2012, el Poder Judicial decidió tomar acciones directas en este respecto y comenzaron las transformaciones más profundas. Se reorganizó el esquema edilicio y laboral para los magistrados.
Al mismo tiempo, los integrantes del Máximo Tribunal provincial encomendaron a la Secretaría de Planificación “la realización de las adecuaciones necesarias en el sistema "Inforec", instalado en la Receptoría de Expedientes departamental, que permitan la aplicación del mecanismo de adjudicación de las causas en trámite ante el actual Tribunal de Familia entre los nuevos Juzgados del fuero”.
En diciembre de 2008 el Poder Judicial consensuó el proyecto junto a legisladores de distintos bloques y desde entonces la propuesta tuvo idas y venidas que postergaron durante años la transformación.
Esta idea se pudo llevar a cabo gracias a la sanción de la Ley 13.634, que, entre otras cosas, contempla los "Principios Generales del Fuero de Familia y del Fuero Penal del Niño", y también establece que "los niños tienen derecho a ser oídos en cualquier etapa del proceso, a peticionar, a expresar sus opiniones y a que éstas se tengan en cuenta en las decisiones que afecten o hagan a sus derechos, considerando su desarrollo psicofísico".
En este sentido, la normativa también establece que "la internación y cualquier otra medida que signifique el alojamiento del niño en una institución pública, semipública o privada, cualquiera sea el nombre que se le asigne a tal medida y aún cuando sea provisional tendrá carácter excepcional y será aplicada como medida de último recurso, por el tiempo más breve posible y debidamente fundada".
Pero el derrotero de la iniciativa que comenzó en 2008 incluyó resoluciones de la SCBA para poder llevar a cabo, aunque sea de forma incipiente, la concreción del objetivo que era redistribuir y poder canalizar mejor los reclamos del fuero de Familia.
En primer lugar los problemas surgieron a raíz de otro inconveniente impostergable para las autoridades del Poder Judicial: la emergencia edilicia. Según constataron en diferentes pronunciamientos, fue difícil para los miembros de la administración de Justicia bonaerense adaptarse a esta situación. Por supuesto, las medidas de transformación eran llevadas a cabo también por el Ejecutivo a través del Ministerio de Justicia.
Así fue que a través de un plan improvisado, pero de forma organizada, los integrantes de la SCBA lograron poner en funcionamientos los juzgados correspondientes a localidades como San Miguel y San Martín o ciudades como La Plata. Por eso el paso dado en Mar Del Plata es fundamental, dado que es una de las jurisdicciones de mayor envergadura en relación al caudal de causas que se tramitan allí.
En 2011 la Corte bonaerense comenzó a dar los primeros grandes pasos en este respecto, pero aún faltaba la aprobación oficial de la legislatura que seguía prorrogando la puesta en funcionamiento del pleno de estos juzgados.
En 2012, el Poder Judicial decidió tomar acciones directas en este respecto y comenzaron las transformaciones más profundas. Se reorganizó el esquema edilicio y laboral para los magistrados.
Al mismo tiempo, los integrantes del Máximo Tribunal provincial encomendaron a la Secretaría de Planificación “la realización de las adecuaciones necesarias en el sistema "Inforec", instalado en la Receptoría de Expedientes departamental, que permitan la aplicación del mecanismo de adjudicación de las causas en trámite ante el actual Tribunal de Familia entre los nuevos Juzgados del fuero”.
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