El juez Guillermo Schleiber hizo lugar hoy a un amparo presentado por el ex legislador Facundo di Filippo que pidió frenar la remoción de los árboles de la 9 de Julio, como parte del Metrobus que quiere instrumentar el gobierno porteño.
La Justicia dictó hoy una medida cautelar que obliga al gobierno porteño a suspender toda actividad que implique poda, trasplante o remoción de árboles afectados por las obras por el Metrobus, informaron fuentes judiciales.
La resolución fue adoptada por el juez Guillermo Schleiber, quien hizo lugar a una presentación realizada el viernes por el referente del Partido Social y ex legislador, Facundo Di Filippo.
La medida judicial fue anunciada en el marco de la protesta que vecinos, ambientalistas y militantes de partidos políticos realizaron esta tarde en la intercepción de avenida 9 de Julio e Hipólito Yrigoyen, para manifestar su oposición a "la tala de árboles y quita de espacios verdes".
Hoy, otro grupo presentó un segundo recurso de amparo para frenar las obras. Este escrito, que insiste en pedir "el inmediato cese de las obras y el restablecimiento a las condiciones anteriores en la avenida 9 de Julio", contó con las firmas de 600 vecinos de la ciudad.
"Mientras que la primera ponía el foco en el impacto ambiental, nosotros hacemos hincapié en la destrucción simbólica, paisajística, urbana, arquitectónica y arqueológica, a partir de una violación de derechos constitucionales", explicó Nidia Marinaro, de Propamba.
"La nuestra no es una posición romántica de defender a los árboles sino un ejercicio de ciudadanía para exigir el cumplimiento de las normativas vigentes", agregó.
El nuevo recurso de amparo fue patrocinado por la Red por el Patrimonio, Propamba y la legisladora María José Lubertino, y fue presentado este mediodía en la Justicia en lo Contencioso, Administrativo y Tributario porteña.
La polémica por los árboles
Vecinos y ambientalistas denunciaron que las obras del Metrobus obligarán a sacar unos 1.440 ejemplares de palmeras, palos borracho, lapachos y jacarandás que forman parte de la arboleda de la avenida 9 de Julio.
Pero el gobierno porteño aseguró que se sacarán sólo unos 305 del centro de la traza y habrá 550 árboles nuevos sobre el corredor que irá entre la avenida San Juan y la calle Arroyo.
El ministro porteño de Ambiente y Espacio Público, Diego Santilli, dijo días atrás que se hizo un estudio sobre cada uno de los árboles, porque "son fundamentales para nuestro oxígeno, así que los cuidamos como nadie", y sostuvo que Mauricio Macri cuida los árboles "como ningún jefe de Gobierno".
Las obras también merecieron las críticas de legisladores porteños opositores y de la organización ecologista Greenpeace.
El presidente del bloque del Frente Para la Victoria, Juan Cabandié, aseguró que la construcción del Metrobus "es una nueva improvisación del PRO" y consideró que ese transporte público "de ecológico no tiene nada" y que lejos de alivianar el tránsito "lo entorpecerá generando caos".
"Lo único que falta es que Macri trasplante el Obelisco para que pase el Metrobus", ironizó.
Greenpeace dijo "entender y compartir" la preocupación de vecinos y organizaciones sociales por la remoción de árboles, y consideró que el Metrobus es "una decisión innecesaria, que debió ser consultada previamente con la ciudadanía".
El diputado porteño Alejandro Bodart, del Movimiento Socialista de los Trabajadores en Proyecto Sur, dijo que "para mejorar el transporte y no destruir la 9 de julio, que es un símbolo de la ciudad, bastaría realizar las inversiones necesarias en la línea C del subte". (La Política OnLine).
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