El Comité Argentino de Seguimiento y Aplicación de la Convención Internacional de los Derechos del Niño (CASACIDN) manifestó que la resolución dictada por la Cámara Penal de Morón "es procesalmente un paso adelante, porque reafirma que el sacerdote Julio Grassi es culpable y que debe ir preso, aunque de hecho desde 2009 a la fecha sigue en libertad y solo estuvo dos meses en prisión domiciliaria", a pesar de estar condenado en dos instancias judiciales. Se considera que este tipo de cumplimiento de condena también favoreció su situación ya que no habría ningún motivo, ni de edad ni de salud, que justifiquen este privilegio.
La resolución 127172 que la Cámara Penal de Morón dictó el pasado jueves 18 de abril fue en respuesta a una apelación de la Fiscalía y los particulares damnificados para que el sacerdote cumpla en prisión la condena a 15 años que se le impuso por abuso y corrupción de menores en 2009, y que fue ratificada en segunda instancia en el 2010.
El CASACIDN ha actuado intensamente en la causa, y lo sigue haciendo, con el único propósito de resguardar los derechos de los afectados, a través de numerosas presentaciones judiciales y asumiendo la representación directa de las víctimas.
Cabe recordar que "esta causa fue apelada, y está en la Corte Suprema de Justicia Bonaerense, aguardando su resolución desde hace ya tres años.”
La causa contra el cura católico se inició en 2002 y llegó a juicio oral en 2009, cuando se lo acusó por 17 hechos de abuso sexual y corrupción de menores en perjuicio de tres chicos de la Fundación que conducía. Fue condenado a 15 años de prisión por 2 de esos 17 abusos en perjuicio de uno de los tres denunciantes, por eso apelamos la sentencia.
El CASACIDN continúa reafirmando su compromiso y preocupación por la pronta resolución de este caso emblemático de las vulneraciones a los derechos de los niños y niñas en distinto ámbitos, especialmente en el religioso.
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