jueves, julio 14, 2011

SAN ISIDRO: CICLO DE CINE DEDICADO A LOS HERMANOS MARX.

Entre las múltiples actividades que programó la Dirección de Cultura de la Municipalidad de San Isidro para las próximas vacaciones de invierno, se realizará del 18 al 22 de julio próximos el ciclo “Salón Biógrafo, Los Hermanos Marx”. Será en el horario de las 20, con entrada libre y gratuita, en el Teatro del Viejo Concejo, ubicado en 9 de Julio 512, en San Isidro.

El ciclo comenzará el lunes 18 con la proyección de “Plumas de caballo”. El martes 19 se exhibirá, a las 20.30, “Sopa de ganso”; el miércoles 20 será el turno de “Una noche en la Ópera”; el jueves 21 le corresponderá a “Un día en las carreras” y, por último, el viernes 22, los espectadores disfrutarán de “Una noche en Casablanca”.

A continuación, una reseña de las películas que se exhibirán:
Plumas de caballo. 1932
Con Groucho, Harpo, Chico y Zeppo Marx, Thelma Todd.
En este film, los hermanos Marx incursionan en el mundo del deporte universitario. El nuevo director del prestigioso colegio Huxley comete un error: en lugar de tomar a los dos jugadores estrellas con quienes pretendía ganar la final del campeonato, ingresa al equipo a dos aficionados. En medio de esta disparatada trama, Groucho, en el papel del director, realiza una corrosiva crítica anti-institucional.
“No sé lo que tienen para decir. De todas formas me es indiferente. Sea lo que sea, me opongo. Su propuesta puede ser buena, pero dejemos algo en claro. Sea lo que sea, me opongo”, es un fragmento del memorable guión.

Sopa de ganso. 1933
Con Groucho, Harpo Chico y Zeppo Marx, Margaret Dumont.
La República Democrática de Freedonia, un pequeño país centroeuropeo, liderado por el muy liberal señor Rufus T. Firefly (Groucho), se ve amenazada por la dictadura de Sylvania, país de vieja y reconocida solvencia como agresor. Dos espías de prestigio, Chicolini (Chico) y Pinky (Harpo), sirven a Sylvania, lo que no impide que acaben siendo ministros del ahora ya excelentísimo Firefly.
Entre los momentos inolvidables del film se destaca la siguiente: "No permitiré injusticias ni juego sucio, pero... si agarramos a alguien haciendo algún acto ilícito, sin que yo reciba una comisión, lo pondremos contra la pared... ¡Y daremos la orden de disparar!"

Una noche en la ópera. 1935
Con Groucho, Harpo y Chico Marx, Margaret Dumont.
El extravagante sentido para los negocios de Groucho hace embarcar hacia Nueva York a las grandes estrellas de la Ópera de Milán, con unos polizones inesperados a bordo: Harpo y Chico. Entre los tres revolucionan el barco, organizan un escándalo en Nueva York y convierten la noche del estreno en una locura que el mundo de la ópera nunca podrá olvidar.
La cita memorable de la película: “El contrato tiene una cláusula por accidente que te protegerá completamente sin importar lo que suceda. Si pierdes una pierna, te ayudaré a buscarla”.

Un día en las carreras. 1937
Con Groucho, Harpo y Chico Marx, Maureen O'Sullivan, Margaret Dumont.
La propietaria de un hospital se encuentra en una delicada situación financiera, por lo que se ve obligada a depender del dinero de una millonaria o ceder el negocio a un magnate avaro. Pero aparecen en escena los hermanos Marx encabezados por Groucho, quien interpreta a un veterinario que se hacer pasar por doctor para ayudar a mantener en el hospital a la hipocondríaca ricachona. Pero como todo esto no es suficiente, deciden apostar a un caballo para intentar conseguir dinero.
“Emily, tengo que hacerte una confesión. En realidad soy un doctor de caballos. Pero cásate conmigo, nunca miraré otro caballo”, es una línea inolvidable del libro cinematográfico.

Una noche en Casablanca. 1946
Con Groucho, Harpo y Chico Marx, Charles Drake.
El gerente del Gran Hotel ha muerto en extrañas circunstancias y Ronald Kornblow (Groucho) será contratado para ocupar la vacante, ignorando que en el establecimiento hay un tesoro escondido por los alemanes durante la Segunda Guerra Mundial.
A continuación se transcribe un fragmento memorable del largometraje: “De ahora en adelante la prioridad del hotel será la velocidad. Si un cliente pide por un huevo cocinado en tres minutos, le daremos uno hecho en dos. Si pide por un huevo hecho en dos minutos, le daremos uno hecho en un minuto. Y si pide un huevo hecho en un minuto, le daremos la gallina y que se encargue del resto”.

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