JUNIN, Marzo 31, (PUNTO CERO-La Verdad) Un solo geriátrico habilitado y una gran cantidad de pensiones que en su mayoría no cumplen con los requisitos básicos para la atención de ancianos, condiciones que establece el Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires, han derivado en la necesidad de crear un marco legal que intime a esos establecimientos a brindar garantías seguridad a los internos.
En ese rumbo, el director del área de Discapacidad y Tercera Edad de la Municipalidad, Carlos Alberto Liggera, adelantó que se está tratando de acelerar un proyecto de ordenanza que sería presentado al Concejo Deliberante en el mes de abril. “Nuestra intención no es desmerecer a nadie sino integrar los establecimientos dentro del marco de la ley, para que no sigan siendo un depósito de `viejos´ - aclara que utiliza esa calificación en términos de cariño-, sino que cuando una persona llegue a la tercera edad pueda ingresar a un lugar donde se le brinde la contención necesaria”, dijo el funcionario en declaraciones a La Verdad.
Incorporado a las huestes municipales en octubre pasado, Liggera aseguró estar trabajando para trasladar al plano local las disposiciones de las leyes provinciales un proyecto de ordenanza donde se establezcan, sobre todas las cosas, los requisitos para el funcionamiento de pensiones de ancianos.
El director comunal dijo que son uno o dos geriátricos los que se encuadran dentro de la ley, pero dejó entrever que la actividad de las pensiones que presuntamente se especializan en el cuidado de abuelos, incluso los habilitados por la comuna, está más descontrolado. “El tema de las pensiones está mas descontrolado, porque hoy en día pasas por una casa con un cartel que dice `Cuido abuelos´. Yo pienso que la familia, antes de dejar a una persona en ese lugar tiene que interiorizarse sobre las características del lugar: si el personal es idóneo, si hay médicos, enfermeras, si tiene contratado un servicio de ambulancia, porque cualquier persona mayor puede sufrir ante una caída una rotura de cadera o de otras partes del cuerpo”, graficó Liggera. El funcionario enfatizó que “los diagnósticos para pacientes de entre setenta y ochenta años requieren mayor urgencia y eso es lo que siempre trato de recalcar en las reuniones que tenemos con los centros de jubilados”.
Liggera apuntó que “hay una ley provincial que estipula que todos los geriátricos y pensiones de ancianos deben estar inscriptos en el Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires y para ello se necesita una serie de requisitos, en cobertura tanto del bien inmueble como para el resguardo de la parte humana”.
“Los geriátricos sí o sí deben tener un médico, una enfermera, una mucama y reunir muchísimas condiciones. Hoy por hay unos pocos que están dentro de ese conjunto y otros tendrán que hacer muchas modificaciones”, añadió. Reunión con propietariosde pensionesEl director de Discapacidad y Tercera Edad adelantó que en los próximos días se va a convocar a los propietarios de los lugares que operan como pensiones de ancianos. “En esa reunión se los va a asesorar sobre las condiciones que se van a determinar para que puedan trabajar, que no van a ser tantas como para los geriátricos”, anticipó Carlos Liggera.
De todos modos advirtió que “sí vamos a pedir que tengan un piso antideslizante, baños en las condiciones que fija el Ministerio de Salud, puertas que abran de adentro hacia fuera y que dispongan de un espacio en el que pase una silla de ruedas”.Formación de cuidadoresAdemás del proyecto para esclarecer las reglas respecto del funcionamiento de geriátricos y pensiones de ancianos, Liggera resaltó que en el corto plazo se emprenderá la tarea de formar cuidadores o auxiliares domiciliarios.
“Queremos que los viejos sean atendidos en las condiciones que se merecen y que los últimos años de su vida los pasen con sus hijos, sus nietos y el resto de sus seres queridos. O sea que la contención sea más domiciliaria que extradomiciliaria”, afirmó. (PUNTO CERO-La Verdad).
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