(La Política On Line). Después del 10 de diciembre tanto Proyecto Sur como el neo-kirchnerismo buscan una agenda común y no descartan un interbloque a futuro. El sindicalista docente quiere avanzar en un “espacio plural y amplio” y en las huestes de Pino Solanas no descartan sumar más figuras al armado. Cabandié divide aguas. Los conflictos para que confluyan los independientes y los ibarristas.
Se conocen desde años y compartieron la militancia en la CTA (Central de Trabajadores Argentinos). Los legisladores electos por Proyecto Sur, Fabio Basteiro, y el kirchnerista Francisco “Tito” Nenna podrían confluir después del 10 de diciembre cuando tomen posesión de sus bancas y complicar a Mauricio Macri.
Si bien tienen una lectura diferente del gobierno nacional, comparten las ideas en lo que respecta a la ciudad y en especial en referencia al gobierno que está llevando adelante el PRO. “La caracterización del gobierno macrista los acerca”, resume una fuente kirchnerista.
En la campaña de este año la buena sintonía era evidente: se cruzaban permanentemente como cabezas de lista en entrevistas y programas. Sus discursos sonaban parecidos. De hecho en temas como vivienda ambos denunciaron el vaciamiento del Instituto de la Vivienda porteño y la subejecución en el área, los conflictos en el área de Salud por la falta de insumos y la baja del presupuesto en educación. Cuando hablaban, prácticamente se complementaban.
Por ello, pensando en la Legislatura que vendrá, tanto cerca de Basteiro como de Nenna confían en que habrá una agenda común entre ambos espacios ya que comparten “la misma visión de ciudad”.
Además, un dato central: muchos dirigentes de Ute y Ctera (los gremios docentes que tuvieron a Nenna como secretario general en el primer caso y como secretario adjunto en el segundo) jugaron en las elecciones con Proyecto Sur.
Es el caso de la legisladora electa por las huestes de Solanas, Laura Garcia Tuñon, militante docente de Ctera y con un largo paso por Ute.
Si bien aún no hay un acuerdo formal, la conformación de la oposición legislativa ya se visualiza en la actualidad: cuando comenzó el reclamo por la designación de Jorge “el Fino” Palacios, Proyecto Sur formó parte junto al kirchnerismo opositor de la embestida contra Macri.
“Hay grandes posibilidades que se voten en conjunto leyes de vivienda, salud y educación porque el progresismo tiene posiciones muy parecidas”, cuentan cerca de Nenna.
Entre los suyos, el gremialista docente repite que hay que construir desde afuera hacia adentro. Su temor es que se repitan las mayorías de la Legislatura actual, donde los kirchneristas (en especial los albertistas) han votado sistemáticamente con el PRO. Por ello, Diego Kravetz quedará afuera de este espacio opositor.
Misma situación para los peronistas Silvina Pedreira y Mateo Romeo, vinculados al sindicato de porteros (Suterh).
Mientras tanto, el senador Daniel Filmus, quien estuvo en París durante 15 días en la cumbre de la UNESCO, todavía no logra agrupar a los K hacia el interior.
Es que hay resistencia a que el legislador Juan Cabandié se quede con la bancada. Es que el joven se muestra como el kirchnerista más ortodoxo, de hecho tiene línea directa con el ex presidente, y esto es inaceptable tanto para muchos de los opositores independientes como para los legisladores electos de Pino Solanas.
Por ello, además, Cabandié dinamitaría la posibilidad de que, además de María José Lubertino y Claudio Palmeyro, se le sumen otros legisladores que o bien supieron estar con el kirchnerismo o se presentan como progresistas en el espectro ideológico legislativo.
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