En estos últimos días escuche hablar de zona liberada, de aumento de penas, de pena de muerte, y de recetas mágicas.
Son todos diagnósticos livianos y erróneos.
En principio, la liberación de zonas se produce por una falta de personal policial, tomando como base que un móvil con dos policías tienen a su cargo aproximadamente la seguridad de 140 manzanas; que en cada manzana hay como mínimo 40 casas y que a su vez viven allí alrededor de 4 integrantes, estamos hablando de la protección de la seguridad de 22.400 habitantes como mínimo, cada doce horas.
Resulta obvio, como primera medida, que para mejorar esto se debe incorporar más personal, pero que a su vez, es imprescindible mejorar las condiciones de trabajo (horas y salario proporcional al trabajo realizado).
¿La seguridad es un problema del Ministerio de Seguridad solamente?
La respuesta es NO.
En cuestiones de seguridad intervienen múltiples disciplinas por lo tanto hay responsabilidad de varios ministerios: Justicia, Desarrollo Social, Educación, Salud, e Infraestructura, entre otros.
Por esta razón es injusto escuchar a diario que sólo se culpa de la inseguridad reinante, al Ministerio de seguridad y a la fuerza policial.
El mayor problema es la falta de recursos económicos en estas áreas, imprescindible para mejorar a mediano y largo plazo la seguridad.
Desde hace mucho tiempo vengo sosteniendo que la provincia necesita mayor coparticipación o contribución de la Nación teniendo en cuenta la cantidad de habitantes que esta posee, la extensión, y el producto bruto que generamos los bonaerenses.
Pongamos la lupa en todas partes. El poder judicial tiene una importante responsabilidad en la seguridad, de la cantidad de delitos que se cometen sólo se denuncian el 25 %, de éstos sólo un 6% llega a juicio y 1,5 % finalmente obtiene sentencia.
El otro factor es la distorsión en la aplicación de las penas, que permiten que delincuentes con sentencia o que arribaron a un juicio abreviado ganen la calle muy rápidamente.
El Congreso nacional debe modificar el artículo 54 del Código penal. De esta forma, ante la multiplicidad de delitos se acumularía la pena por cada uno de los hechos cometidos. Sería un sistema similar a EE.UU. o España, países en los que se habla de penas de 100 años o más e impide que el delincuente entre y salga rápidamente.
Por esto, desde hace tiempo también, vengo proponiendo la creación de un gabinete de crisis, que estaría compuesto por todos los ministerios que ya he mencionado, la Procuración y la Corte Suprema.
La finalidad es dar respuesta rápida y anticipada al delito.
Debe existir además, un segundo gabinete con los mismos actores institucionales pero que incluya también sociólogos, antropólogos, politólogos, criminalistas, licenciados en seguridad Interior; un gabinete que mantenga vinculación con la oposición, y cree políticas de seguridad a largo plazo, para ver sus resultados a 10 años.
La seguridad no se recupera con un chasquido de dedos, la única forma es atacando lo inmediato, y proyectando políticas de seguridad que se transformen en una cuestión de Estado para que gobiernos venideros no modifiquen el rumbo.
Por eso creo que las responsabilidades son compartidas, pero no se puede mejorar sin recursos económicos destinados a esto.
Resulta reiterativo, pero lamentablemente imperioso remarcar que la Provincia debe solicitar más coparticipación o mayor aporte del Estado Nacional.
Caso contrario, transitamos el camino del facilismo, de los nombres y los slogans, pero no de las soluciones.
Dr. Angel Gabriel Villegas
Diputado de la Provincia de Buenos Aires
Bloque PJ
Son todos diagnósticos livianos y erróneos.
En principio, la liberación de zonas se produce por una falta de personal policial, tomando como base que un móvil con dos policías tienen a su cargo aproximadamente la seguridad de 140 manzanas; que en cada manzana hay como mínimo 40 casas y que a su vez viven allí alrededor de 4 integrantes, estamos hablando de la protección de la seguridad de 22.400 habitantes como mínimo, cada doce horas.
Resulta obvio, como primera medida, que para mejorar esto se debe incorporar más personal, pero que a su vez, es imprescindible mejorar las condiciones de trabajo (horas y salario proporcional al trabajo realizado).
¿La seguridad es un problema del Ministerio de Seguridad solamente?
La respuesta es NO.
En cuestiones de seguridad intervienen múltiples disciplinas por lo tanto hay responsabilidad de varios ministerios: Justicia, Desarrollo Social, Educación, Salud, e Infraestructura, entre otros.
Por esta razón es injusto escuchar a diario que sólo se culpa de la inseguridad reinante, al Ministerio de seguridad y a la fuerza policial.
El mayor problema es la falta de recursos económicos en estas áreas, imprescindible para mejorar a mediano y largo plazo la seguridad.
Desde hace mucho tiempo vengo sosteniendo que la provincia necesita mayor coparticipación o contribución de la Nación teniendo en cuenta la cantidad de habitantes que esta posee, la extensión, y el producto bruto que generamos los bonaerenses.
Pongamos la lupa en todas partes. El poder judicial tiene una importante responsabilidad en la seguridad, de la cantidad de delitos que se cometen sólo se denuncian el 25 %, de éstos sólo un 6% llega a juicio y 1,5 % finalmente obtiene sentencia.
El otro factor es la distorsión en la aplicación de las penas, que permiten que delincuentes con sentencia o que arribaron a un juicio abreviado ganen la calle muy rápidamente.
El Congreso nacional debe modificar el artículo 54 del Código penal. De esta forma, ante la multiplicidad de delitos se acumularía la pena por cada uno de los hechos cometidos. Sería un sistema similar a EE.UU. o España, países en los que se habla de penas de 100 años o más e impide que el delincuente entre y salga rápidamente.
Por esto, desde hace tiempo también, vengo proponiendo la creación de un gabinete de crisis, que estaría compuesto por todos los ministerios que ya he mencionado, la Procuración y la Corte Suprema.
La finalidad es dar respuesta rápida y anticipada al delito.
Debe existir además, un segundo gabinete con los mismos actores institucionales pero que incluya también sociólogos, antropólogos, politólogos, criminalistas, licenciados en seguridad Interior; un gabinete que mantenga vinculación con la oposición, y cree políticas de seguridad a largo plazo, para ver sus resultados a 10 años.
La seguridad no se recupera con un chasquido de dedos, la única forma es atacando lo inmediato, y proyectando políticas de seguridad que se transformen en una cuestión de Estado para que gobiernos venideros no modifiquen el rumbo.
Por eso creo que las responsabilidades son compartidas, pero no se puede mejorar sin recursos económicos destinados a esto.
Resulta reiterativo, pero lamentablemente imperioso remarcar que la Provincia debe solicitar más coparticipación o mayor aporte del Estado Nacional.
Caso contrario, transitamos el camino del facilismo, de los nombres y los slogans, pero no de las soluciones.
Dr. Angel Gabriel Villegas
Diputado de la Provincia de Buenos Aires
Bloque PJ
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