El próximo miércoles 16 de diciembre se abrirá el período de inscripción de alumnos para el Ciclo Lectivo 2010, para todos los niveles y modalidades de la educación pública.
La Dirección General de Cultura y Educación de la Provincia de Buenos Aires dejó sin efecto, el año el mecanismo de asignación de vacantes por orden de llegada para el ingreso a los distintos niveles, por lo que desde entonces se aplica una serie de criterios para evitar que los padres o tutores formen colas en el frente de los edificios de los establecimientos educativos, a la hora de anotar a un hijo. Para el Ciclo Lectivo 2010, la normativa de la cartera de Educación de la provincia de Buenos Aires fijó seis criterios que los directivos deberán tener en cuanta para la inscripción.
Mario Oporto, titular de la cartera de Educación de la provincia, enfatizó: “Queremos dejar en claro la nueva normativa para que las familias no tengan dudas: el criterio del orden de llegada para la inscripción no va a ser utilizado para otorgar vacantes en las escuelas”.
La normativa referida al ingreso de alumnos tiene seis criterios que los directivos de las escuelas deberán tener en cuenta para asignar las vacantes en el período de inscripción.
Primero se debe observar la articulación pedagógica entre niveles o modalidades; es decir que aquellos alumnos que ya se encuentran cursando en escuelas que articulan distintos niveles –jardín de infantes, primario y secundario- tendrán asegurados los bancos para el siguiente año lectivo.
Segundo: el aspirante que tenga un hermano o hermanos en la institución; tercero: se dará prioridad a los hijos de docentes y personal no docente de la Escuela; cuarto orden: se tendrá en cuenta la cercanía del domicilio particular con el establecimiento educativo; y, en quinto lugar: la cercanía con el lugar de trabajo de los padres. Sexto: en los casos que, a pesar de la utilización de este orden de prioridades, continúe habiendo más aspirantes que vacantes, se procederá a realizar un sorteo público.
“Por supuesto que hay vacantes para todos los chicos de la Provincia y nosotros creemos que las familias tienen libertad en elegir la Escuela en que quieren inscribirlos, pero para no confundir a las familias, decimos que el orden de llegada para la inscripción no es criterio para la asignación de una vacante en las escuelas”, sostuvo Mario Oporto.
Para la inscripción de los alumnos se debe concurrir con el DNI del menor, la libreta sanitaria y una certificación de domicilio –boleta de un servicio, por ejemplo-. Estos requisitos son necesarios para cumplimentar el trámite, pero no son indispensables para inscribir a un alumno en una Escuela: en el caso que el menor no tenga documento, las autoridades educativas deberán inscribirlo y, posteriormente, ayudar a la familia a realizar los trámites correspondientes para la obtención del DNI. En relación a lo cual, Oporto indicó: “no hay nada que impida anotar a los chicos en la Escuela”, y explicó: “si el chico no tiene el documento de identidad, que la familia lo anote igual, porque en la Escuela le van a decir cómo conseguirlo; los directivos del establecimiento van a inscribir al menor de edad y después se hará el trámite documentario”.
La Dirección General de Cultura y Educación de la Provincia de Buenos Aires dejó sin efecto, el año el mecanismo de asignación de vacantes por orden de llegada para el ingreso a los distintos niveles, por lo que desde entonces se aplica una serie de criterios para evitar que los padres o tutores formen colas en el frente de los edificios de los establecimientos educativos, a la hora de anotar a un hijo. Para el Ciclo Lectivo 2010, la normativa de la cartera de Educación de la provincia de Buenos Aires fijó seis criterios que los directivos deberán tener en cuanta para la inscripción.
Mario Oporto, titular de la cartera de Educación de la provincia, enfatizó: “Queremos dejar en claro la nueva normativa para que las familias no tengan dudas: el criterio del orden de llegada para la inscripción no va a ser utilizado para otorgar vacantes en las escuelas”.
La normativa referida al ingreso de alumnos tiene seis criterios que los directivos de las escuelas deberán tener en cuenta para asignar las vacantes en el período de inscripción.
Primero se debe observar la articulación pedagógica entre niveles o modalidades; es decir que aquellos alumnos que ya se encuentran cursando en escuelas que articulan distintos niveles –jardín de infantes, primario y secundario- tendrán asegurados los bancos para el siguiente año lectivo.
Segundo: el aspirante que tenga un hermano o hermanos en la institución; tercero: se dará prioridad a los hijos de docentes y personal no docente de la Escuela; cuarto orden: se tendrá en cuenta la cercanía del domicilio particular con el establecimiento educativo; y, en quinto lugar: la cercanía con el lugar de trabajo de los padres. Sexto: en los casos que, a pesar de la utilización de este orden de prioridades, continúe habiendo más aspirantes que vacantes, se procederá a realizar un sorteo público.
“Por supuesto que hay vacantes para todos los chicos de la Provincia y nosotros creemos que las familias tienen libertad en elegir la Escuela en que quieren inscribirlos, pero para no confundir a las familias, decimos que el orden de llegada para la inscripción no es criterio para la asignación de una vacante en las escuelas”, sostuvo Mario Oporto.
Para la inscripción de los alumnos se debe concurrir con el DNI del menor, la libreta sanitaria y una certificación de domicilio –boleta de un servicio, por ejemplo-. Estos requisitos son necesarios para cumplimentar el trámite, pero no son indispensables para inscribir a un alumno en una Escuela: en el caso que el menor no tenga documento, las autoridades educativas deberán inscribirlo y, posteriormente, ayudar a la familia a realizar los trámites correspondientes para la obtención del DNI. En relación a lo cual, Oporto indicó: “no hay nada que impida anotar a los chicos en la Escuela”, y explicó: “si el chico no tiene el documento de identidad, que la familia lo anote igual, porque en la Escuela le van a decir cómo conseguirlo; los directivos del establecimiento van a inscribir al menor de edad y después se hará el trámite documentario”.
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