El lunes quedará inaugurado el nuevo servicio que unirá la provincia de Buenos Aires con Tacuarembó, en Uruguay. Será explotado por el Grupo Cometrans SA, el mismo que administra TBA y que aspira a quedarse con más ramales en tierras orientales. Las formaciones fueron compradas en Alemania y prestaban servicios en Holanda.
Si todo sale como esperan tanto en el gobierno de Argentina como en el del Uruguay, se concretará “un acto simbólico que refrenda la unidad de las dos naciones" como lo marcaron Cristina Kirchner y José “Pepe” Mujica. Es que el lunes quedará reinaugurada la conexión ferroviaria entre ambos países y que en un primer tramo unirá a la entrerriana ciudad de Concordia con Salto, en tierras orientales.
Sin embargo, se espera que para septiembre el servicio configure si recorrido final y una a la provincia de Buenos Aires, desde la estación Pilar hasta Paso de los Toros, en el departamento uruguayo de Tacuarembó. Serán 813 kilómetros con una frecuencia semanal en el primer mes pero que desde la Secretaría de Transporte que conduce Juan Pablo Schiavi prometen ampliar a tres en octubre.
El ramal, conectará así a Buenos Aires con otras localidades entrerrianas de importancia como Villaguay y Basavilbaso. Se estima que el costo del pasaje oscilará entre los 100 y 180 pesos pero todavía la Secretaría no definió el cuadro tarifario.
Así, cuando se reinaugure el ramal, será el primer viaje oficial después de 26 años ya que el servicio de pasajeros internacional funcionó entre 1982 y 1985 pero luego de una huelga ferroviaria en Uruguay comenzó a desmantelarse.
Durante los tres años en que funcionó el servicio se alternó la circulación de coches motores argentinos y uruguayos y los servicios entre Salto y Concordia estaban diagramados de tal forma que combinaban con los trenes de Ferrocarriles Argentinos hacia y desde Buenos Aires, Corrientes, Posadas y Asunción, en Paraguay.
La red del Ferrocarril Urquiza, nombre que tenía el ramal creado en 1947, llegó a tener más de 2800 Km. de extensión. Pero en la década de 1970 comenzó a sufrir su desguace. Así, se clausuraron 10 mil kilómetros de vías de los 42.500 existentes y se clausuraron 1000 de las 2400 estaciones, por ejemplo. En 1993, en pleno gobierno menemista, se suprimió la totalidad de los servicios de larga distancia de pasajeros en la Línea Urquiza.
Inversión privada
El nuevo servicio será explotado por grupo argentino Cometrans SA que entre otras firmas, gestiona Trenes de Buenos Aires (TBA). El consorcio adquirió en enero de este año diez unidades automotoras diésel constituidas por dos coches motrices que fueron fabricados en Alemania por la firma Waggonfabrik Uerdingen entre 1981 y 1982. Además, para restaurar la línea ferroviaria se invirtieron unos 4 millones de dólares. “Todo sin intervención del Estado”, destacan en Cometrans.
En junio, los coches, que estaban prestando servicios en Holanda, llegaron al puerto de Buenos Aires y el 30 de julio se realizó el viaje de prueba desde la Capital hasta Concordia. El domingo 31 se concretó la excursión hasta el puente ferrovial de la Represa de Salto Grande y el fin de semana del 6 y 7 de agosto se realizaron los viajes de prueba del lado uruguayo llegando hasta Montevideo.
Este último dato no es menor. Es que Cometrans acordó con Mujica la posibilidad de explorar otros ramales en el Uruguay. Por caso, la intención de la empresa es de la de explotar el tramo Montevideo-Florida-Durazno-Tacuarembó-Rivera (en la frontera con Brasil); Montevideo-Minas; Montevideo- Nico Pérez y sumar también servicios en las cercanías de la capital uruguaya. (La Política OnLine).
Si todo sale como esperan tanto en el gobierno de Argentina como en el del Uruguay, se concretará “un acto simbólico que refrenda la unidad de las dos naciones" como lo marcaron Cristina Kirchner y José “Pepe” Mujica. Es que el lunes quedará reinaugurada la conexión ferroviaria entre ambos países y que en un primer tramo unirá a la entrerriana ciudad de Concordia con Salto, en tierras orientales.
Sin embargo, se espera que para septiembre el servicio configure si recorrido final y una a la provincia de Buenos Aires, desde la estación Pilar hasta Paso de los Toros, en el departamento uruguayo de Tacuarembó. Serán 813 kilómetros con una frecuencia semanal en el primer mes pero que desde la Secretaría de Transporte que conduce Juan Pablo Schiavi prometen ampliar a tres en octubre.
El ramal, conectará así a Buenos Aires con otras localidades entrerrianas de importancia como Villaguay y Basavilbaso. Se estima que el costo del pasaje oscilará entre los 100 y 180 pesos pero todavía la Secretaría no definió el cuadro tarifario.
Así, cuando se reinaugure el ramal, será el primer viaje oficial después de 26 años ya que el servicio de pasajeros internacional funcionó entre 1982 y 1985 pero luego de una huelga ferroviaria en Uruguay comenzó a desmantelarse.
Durante los tres años en que funcionó el servicio se alternó la circulación de coches motores argentinos y uruguayos y los servicios entre Salto y Concordia estaban diagramados de tal forma que combinaban con los trenes de Ferrocarriles Argentinos hacia y desde Buenos Aires, Corrientes, Posadas y Asunción, en Paraguay.
La red del Ferrocarril Urquiza, nombre que tenía el ramal creado en 1947, llegó a tener más de 2800 Km. de extensión. Pero en la década de 1970 comenzó a sufrir su desguace. Así, se clausuraron 10 mil kilómetros de vías de los 42.500 existentes y se clausuraron 1000 de las 2400 estaciones, por ejemplo. En 1993, en pleno gobierno menemista, se suprimió la totalidad de los servicios de larga distancia de pasajeros en la Línea Urquiza.
Inversión privada
El nuevo servicio será explotado por grupo argentino Cometrans SA que entre otras firmas, gestiona Trenes de Buenos Aires (TBA). El consorcio adquirió en enero de este año diez unidades automotoras diésel constituidas por dos coches motrices que fueron fabricados en Alemania por la firma Waggonfabrik Uerdingen entre 1981 y 1982. Además, para restaurar la línea ferroviaria se invirtieron unos 4 millones de dólares. “Todo sin intervención del Estado”, destacan en Cometrans.
En junio, los coches, que estaban prestando servicios en Holanda, llegaron al puerto de Buenos Aires y el 30 de julio se realizó el viaje de prueba desde la Capital hasta Concordia. El domingo 31 se concretó la excursión hasta el puente ferrovial de la Represa de Salto Grande y el fin de semana del 6 y 7 de agosto se realizaron los viajes de prueba del lado uruguayo llegando hasta Montevideo.
Este último dato no es menor. Es que Cometrans acordó con Mujica la posibilidad de explorar otros ramales en el Uruguay. Por caso, la intención de la empresa es de la de explotar el tramo Montevideo-Florida-Durazno-Tacuarembó-Rivera (en la frontera con Brasil); Montevideo-Minas; Montevideo- Nico Pérez y sumar también servicios en las cercanías de la capital uruguaya. (La Política OnLine).
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