Los datos de estudios internacionales demuestran que el número de personas con diabetes en el año 2011 ha llegado a 366 millones. Este año, más de 4 millones de muertes se atribuyen a la diabetes, lo que implica que 1 persona muere de diabetes cada 7 segundos. El gasto sanitario en diabetes ha llegado a 465 mil millones de dólares.
La cifra de 366 millones de personas con diabetes en 2011 es casi un 30% mayor de los 285 millones citados para el año 2010. Los datos completos se publicarán en 5 ª edición del Diabetes Atlas.
La Sociedad Argentina de Diabetes anticipó que la Argentina no escapa a la regla: la última Encuesta Nacional de Factores de Riesgo del Ministerio de Salud de la Nación mostró que el 10% de la población adulta argentina vive con diabetes, cifra que aumentó en los últimos 4 años. Quiere decir que 1 de cada 10 adultos padecen diabetes.
Esta Encuesta también demostró que disminuyó el consumo de frutas y verduras, aumentó la obesidad, el sedentarismo, la hipertensión y el colesterol, todos trastornos relacionados con la enfermedad.
De las personas con diabetes, la mayoría (90%) tiene el tipo 2 (que no necesita insulina para vivir), y, de ese grupo, casi todos tienen algún grado de obesidad; ésta tiene tanta importancia que, para algunos especialistas, casi no habría diabéticos si no hubiese obesos.
Una vida saludable
Pese al dramatismo de las cifras, los estudios han demostrado que muchas de las complicaciones de la enfermedad pueden prevenirse o retrasarse mediante un comportamiento eficaz. Esto incluye medidas relacionadas con el estilo de vida, como una dieta saludable, actividad física, prevención del sobrepeso, la obesidad y el tabaquismo.
Por su parte, la atención preventiva no necesariamente involucra costosos medicamentos. La educación sobre un buen cuidado del pie y su revisión regular, son un buen ejemplo de una medida preventiva de bajo costo.
Los sistemas sanitarios capaces de proveer una atención óptima necesitan diseñarse alrededor de las necesidades de la persona, ya que la atención diaria de la mayoría de los cuidados de la diabetes es responsabilidad de la persona y no del profesional de la salud.
La educación de la diabetes juega un papel importante en el reforzamiento de las personas afectadas, ya que les proporciona el conocimiento y las habilidades necesarias para manejar su propia condición con eficacia, y llevar una vida completa y saludable.
Instituido mediante una resolución histórica de la Organización de Naciones Unidas, se celebra el 14 DE NOVIEMBRE para conmemorar el aniversario del nacimiento de Frederick Banting, quien, junto con Charles Best, tuvo un papel determinante en el descubrimiento en 1922 de la insulina, hormona que permite tratar a los diabéticos y salvarles la vida.
El Día Mundial de la Diabetes fue introducido por la Federación Internacional de Diabetes (FID) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 1991, ante el preocupante aumento en la incidencia de la diabetes alrededor del mundo.
Ese día, millones de personas en todo el mundo proponen diferentes formas de involucrar a la comunidad, llamar la atención de los medios de comunicación y aumentar la concienciación sobre temas clave de la diabetes, sobre todo entre las personas con poder de decisión y las llamadas poblaciones de riesgo. Las actividades organizadas cada año incluyen la iluminación con el color azul –color del logotipo- de monumentos, edificios y hogares.
La cifra de 366 millones de personas con diabetes en 2011 es casi un 30% mayor de los 285 millones citados para el año 2010. Los datos completos se publicarán en 5 ª edición del Diabetes Atlas.
La Sociedad Argentina de Diabetes anticipó que la Argentina no escapa a la regla: la última Encuesta Nacional de Factores de Riesgo del Ministerio de Salud de la Nación mostró que el 10% de la población adulta argentina vive con diabetes, cifra que aumentó en los últimos 4 años. Quiere decir que 1 de cada 10 adultos padecen diabetes.
Esta Encuesta también demostró que disminuyó el consumo de frutas y verduras, aumentó la obesidad, el sedentarismo, la hipertensión y el colesterol, todos trastornos relacionados con la enfermedad.
De las personas con diabetes, la mayoría (90%) tiene el tipo 2 (que no necesita insulina para vivir), y, de ese grupo, casi todos tienen algún grado de obesidad; ésta tiene tanta importancia que, para algunos especialistas, casi no habría diabéticos si no hubiese obesos.
Una vida saludable
Pese al dramatismo de las cifras, los estudios han demostrado que muchas de las complicaciones de la enfermedad pueden prevenirse o retrasarse mediante un comportamiento eficaz. Esto incluye medidas relacionadas con el estilo de vida, como una dieta saludable, actividad física, prevención del sobrepeso, la obesidad y el tabaquismo.
Por su parte, la atención preventiva no necesariamente involucra costosos medicamentos. La educación sobre un buen cuidado del pie y su revisión regular, son un buen ejemplo de una medida preventiva de bajo costo.
Los sistemas sanitarios capaces de proveer una atención óptima necesitan diseñarse alrededor de las necesidades de la persona, ya que la atención diaria de la mayoría de los cuidados de la diabetes es responsabilidad de la persona y no del profesional de la salud.
La educación de la diabetes juega un papel importante en el reforzamiento de las personas afectadas, ya que les proporciona el conocimiento y las habilidades necesarias para manejar su propia condición con eficacia, y llevar una vida completa y saludable.
Instituido mediante una resolución histórica de la Organización de Naciones Unidas, se celebra el 14 DE NOVIEMBRE para conmemorar el aniversario del nacimiento de Frederick Banting, quien, junto con Charles Best, tuvo un papel determinante en el descubrimiento en 1922 de la insulina, hormona que permite tratar a los diabéticos y salvarles la vida.
El Día Mundial de la Diabetes fue introducido por la Federación Internacional de Diabetes (FID) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 1991, ante el preocupante aumento en la incidencia de la diabetes alrededor del mundo.
Ese día, millones de personas en todo el mundo proponen diferentes formas de involucrar a la comunidad, llamar la atención de los medios de comunicación y aumentar la concienciación sobre temas clave de la diabetes, sobre todo entre las personas con poder de decisión y las llamadas poblaciones de riesgo. Las actividades organizadas cada año incluyen la iluminación con el color azul –color del logotipo- de monumentos, edificios y hogares.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario