MALVINAS ARGENTINAS: Gracias Madre por 150 años de tu amor. -Una fiesta de la espiritualidad-

MALVINAS ARGENTINAS, Febrero 25, (PUNTO CERO). El 11 de febrero del año recién iniciado, se cumplieron 150 años de la aparición en la gruta de Lourdes (Francia), de la Madre, la Virgen María, bajo cuya protección se hallan los vecinos de la ciudad de Grand Bourg, teniendo como lugar de encuentro y oración la Parroquia que lleva su nombre.

No pasó desapercibido un acontecimiento tan especial, por lo tanto, se redoblaron los esfuerzos y las voluntades para congregarse en comunidad, en ocasión de las Fiestas Patronales que se llevaron a cabo el once de febrero y, que este año, precisamente, tuvieron más razón de ser que nunca.
Para llevar a cabo estos eventos los feligreses de Grand Bourg , fueron invitados a acercar su granito de arena, colaborando con lo que les fuera posible, tanto en recursos humanos y operativos como materiales.

La novena de oración, iniciada el dos de febrero, se desarrolló en la Parroquia, dedicándola cada día a una intención en particular (por los enfermos, por los jóvenes, por las familias, entre otras). La concurrencia fue, ciertamente, muy numerosa; participaron los fieles con unción y alegría , acudiendo a la invitación que la Virgen de Lourdes les hacía llegar a sus corazones.
En días previos a la novena, como corresponde al clima de fiesta, fue decorado el templo, colocando junto al altar frases dedicadas a Jesús y a su Madre Santísima. La gruta aledaña a la iglesia lució espléndida, rebosante de plantas y flores. Se rezó frente a ella, el rosario, durante todas las mañanas previas a la ceremonia central.
Y llegó el gran día…
El clima templado y agradable, en pleno verano, acompañó la esperada celebración.
La plazoleta Hipólito Bouchard (rotonda) de Grand Bourg fue el escenario privilegiado para que María, como una lámpara esplendorosa, cobijara bajo su luz a todos sus hijos.
La Santa Misa, fue presidida por el obispo de la Diócesis de San Miguel, monseñor Sergio Alfredo Fenoy. Concelebraron el provincial de los Misioneros de la Sagrada Familia, padre Tomás Llorente Martínez; el párroco local, padre Luis Kozubinski y sus co-hermanos de Congregación , en un ambiente de devoción y gozo espiritual.
Estuvieron presentes alumnos, padres, docentes del colegio parroquial en todos sus niveles, niños, jóvenes y adultos de la catequesis parroquial representados en todos sus grupos, autoridades comunales, representantes de distintas entidades locales, vecinos en general.
Al final de la celebración se entregaron de manos del párroco, recordatorios con el motivo del encuentro.
La misa concluyó con una colorida suelta de globos. Antes de abandonar la plaza para iniciar su "peregrinar", una lluvia de pétalos escolto la salida de la Virgen a modo de perfumada ofrenda.
La procesión por las calles de la ciudad comenzó cuando la imagen, portada por la autobomba de los bomberos locales, dejó el lugar de reunión escoltada por las demás advo-caciones de María, procedentes de las capillas.
La multitud, encabezada por el obispo, Sergio Fenoy y el párroco, padre Luis Kozubinski fue cantando y rezando a la Madre de Dios, deteniéndose en cada misterio, para entregar, como un precioso legado, la imagen de Lourdes a familias de la vecindad.
Al regresar a la plaza, vivando a la Ssma.Virgen, hubo fuegos artificiales y un hermoso espectáculo artístico, para coronar el día festivo.
No olvidemos que "el agradecimiento es la memoria del corazón". Por eso un "gracias" inmenso a todos, los que de una u otra forma, hicieron posible este encuentro del espíritu.
La gratitud mayor para con Maria de Lourdes, que nos congrega como Madre y como mediadora de todas las gracias.
Renovemos nuestra fidelidad en la oración y en la fe, con la confianza puesta en que aquello que pongamos en las manos amorosas de María será presentado a Nuestro Señor Jesucristo.
No nos cansemos de repetir durante este año especial:
¡GRACIAS MADRE POR 150 AÑOS DE TU AMOR!
A. L.