El PRO no logró capitalizar la imagen positiva de Macri, que está en su pico histórico, y Michetti ganó la elección de senadores superando apenas los 31 puntos. El rabino Bergman sacó el 27% y su triunfo estará en duda en octubre ante la amenaza del frente de centroizquierda, que se acercó al 35% sumando sus tres listas.
El PRO volvió a ganar las elecciones en Capital Federal, aunque esta vez con el sabor agridulce que provocó la irrupción del frente Unen, que podría empañar el triunfo del partido de Mauricio Macri en las generales de octubre.
Los candidatos del PRO no pudieron capitalizar la imagen positiva de Macri, que según fuentes del gobierno porteño supera hoy en día el 70 por ciento en la Capital.
El jefe de gobierno acumuló esos números en base a las obras que se ven en la calle pero que no supo vender en términos electorales.
La campaña del PRO se basó en la inauguración sistemática de esas obras, en especial la del Metrobús de la 9 de julio, que consistieron en mostrar a Macri junto a sus candidatos y las cintas de inauguración.
Pero la ciudadanía emparentó las obras directamente con Macri y no con Gabriela Michetti o el rabino Sergio Bergman.
Los números
Michetti obtuvo el primer lugar superando apenas el 30 por ciento de los votos, unos 5 ó 6 puntos menos de lo que esperaban conseguir en el PRO. La elección de la ex vicejefa fue prácticamente igual a la de 2009, cuando encabezó la lista de diputados y superó el 31 por ciento de los votos.
En segundo lugar quedó Daniel Filmus con cerca del 21 por ciento de los votos, en una elección similar a la que hizo en 2007 cuando accedió a su banca en el Senado. En tercer lugar quedó Pino Solanas, con el 13 por ciento, y cuarto quedó Rodolfo Terragno, con el 10,3. Alfonso Prat Gay, en tanto, sacó el 6,9 por ciento.
En la elección de diputados, el rabino Sergio Bergman sufrió un corte de boleta menor al esperado y consiguió el primer lugar con 27 puntos. En 2009, con los 31 puntos de Michetti, el PRO consiguió 5 bancas de las 13 que se ponían en juego para la Cámara de Diputados. Si la lista del rabino repite esta performance en octubre, podría colocar sólo 4 diputados.
En segundo lugar quedó la lista del Frente para la Victoria que encabezó Juan Cabandié, con el 19 por ciento de los votos. Tercera quedó Elisa Carrió, con poco más del 16 por ciento, seguida por Martín Lousteau, que superó el 12 por ciento. La lista de Ricardo Gil Lavedra (4%), en tanto, sacó casi los mismos votos que la de Jorge Altamira.
El fenómeno
La interna de Unen acaparó gran parte del atractivo de la elección puesto que fue el único frente que le dio a las primarias el sentido real por el que se implementaron en 2011.
Pero además, demostró que las internas pueden potenciar a los candidatos que medían menos de 5 puntos hace unos meses y ahora pueden disputarle el primer puesto al PRO.
Entre todos los candidatos a diputados de Unen sacaron más de 100 mil votos por encima del PRO, que gobierna la Ciudad. No es un detalle que Claudio Lozano, que no quiso participar de la interna de Unen, sacó el 2,5 por ciento y apenas logró superar el piso para poder competir en octubre.
Amenaza
Los números indican que los candidatos de Unen, por separado, quedaron detrás del PRO y el Frente para la Victoria tanto en las elecciones de diputados como las de senadores.
Aunque si se suman los porcentajes de las tres listas de senadores y las tres de diputados de este frente, Unen quedó primero en senadores superando el 31 por ciento contra el 30 de Michetti y ganó cómodamente la elección de diputados con el 35 por ciento de los votos contra el 27 del rabino Bergman.
La incógnita es si el frente logrará mantener en octubre el caudal de votos con la nueva composición que tendrán sus listas tras este domingo. La lista de senadores, que encabezará Pino Solanas junto a Fernanda Reyes, no integrará a ningún candidato de las listas de Rodolfo Terragno y Alfonso Prat Gay, que quedaron afuera de las generales.
En el hipotético caso que todos esos porcentajes se acumulen en octubre, Unen le disputará el primer puesto a Michetti y como mínimo le complicará la renovación a Daniel Filmus, que por ahora estaría logrando con su segundo lugar.
En el caso de diputados, Carrió, que ganó la interna de Unen con casi el 50 por ciento de los votos. Segunda quedó la lista de Marín Lousteau, que sacó el 35% dentro de Unen. La lista que encabezó Ricardo Gil Lavedra con Humberto Tumini apenas superó el 4 por ciento en la general y quedó afuera de las elecciones de octubre porque no logró superar el piso del 22% que había dispuesto el frente para integrar la lista de diputados.
Con estos resultados, si el frente de Unen logra conservar este caudal de votos en octubre, se quedará con 6 de las 13 bancas que se ponen en juego en Diputados. La lista de Carrió se quedaría con 4 lugares en la lista definitiva de Unen. Lousteau iría en el tercer lugar de esa lista y su compañero de fórmula, Adrián Ramos, también tendrá un lugar entre esos primeros 6 puestos. En este contexto el PRO metería 4 diputados y el Frente para la Victoria los 3 restantes.
Una vez que se conocieron los datos oficiales, Carrió se subió al escenario del Palais Rouge junto a Pino y envió varias señales. En primer lugar dio a entender que buscará la unidad del frente, lo que necesita para potenciar su performance en octubre. “Al autoritarismo feroz de Cristina Kirchner le oponemos la democracia interna”, dijo Lilita.
Y si bien intentó levantar la figura de Pino y asegurar que será senador, por otro lado felicitó a Michetti por el triunfo y la mencionó como “su amiga”, acaso promoviendo el corte de boleta del que tanto se especuló que podría favorecer a ambas. (La Política OnLine).
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