NECOCHEA: Otra mujer fue víctima de un violento asalto. Ingresaron por el frente de la vivienda y la golpearon para robarle.

NECOCHEA, Setiembre 26, (PUNTO CERO) Cuando aún no se han podido conseguir pistas firmes que permitan esclarecer el crimen de Mónica Neila, ocurrido el jueves pasado, a manos de asaltantes, se produjo en la mañana de ayer un hecho de similares características, que por fortuna esta vez no terminó en tragedia.
La damnificada fue una mujer de 79 años que resultó golpeada por los delincuentes en su vivienda de calle 46 entre 61 y 63. Incluso pudieron asfixiarla, ya que uno de los ladrones la tiró sobre la cama y le cubrió la cabeza con una almohada por varios minutos. Este aspecto le confiere mayor similitud con el asesinato de Neila, que tras los golpes murió asfixiada.
Este delito se registró a sólo seis cuadras de la vivienda donde vivía Neila.
El hecho ocurrió en la madrugada de ayer, alrededor de la 1.30, cuando varios sujetos levantaron la persiana de una ventana que da a la calle, rompieron el vidrio y entraron en la vivienda.
Concepción Reca, de 79 años, no pudo reaccionar ante el violento ingreso de los delincuentes y no opuso resistencia. Pese a ello la golpearon y le cubrieron la cabeza con la almohada, con la aparente intención de que la mujer no los pudiera ver.
Luego revisaron todas las habitaciones de la casa en busca de elementos de valor. Se cree que los malvivientes sospechaban que en la casa había dinero, pero lo cierto es que Reca es jubilada y cobra el haber mínimo.
No obstante, los sujetos le quitaron de la mano las alianzas de oro y robaron todas las alhajas que encontraron en la casa. Aunque la mujer no pudo precisar el valor de lo sustraído.

Aterrorizada
Una vez que terminaron con la recorrida, los malvivientes salieron por la puerta del frente, cerraron con llave y se fueron del lugar con total impunidad.
Sin embargo, antes deben haber amenazado a la mujer, ya que no pidió auxilio hasta casi cinco horas más tarde. Eran aproximadamente las 7 cuando escuchó detenerse frente a su casa el vehículo de un vecino.
Recién entonces se animó a pedir auxilio y poco después efectivos de varias dependencia de la Jefatura Departamental Necochea, Policía Científica, DDI y personal de Fiscalía se encontraba en el lugar.
Debido al desorden que había dentro de la casa la mujer no se pudo precisar cuánto dinero le habían robado y tampoco los objetos que se llevaron los delincuentes.
Según se informó ayer en la Comisaría Primera, la vecina no fue a realizar la denuncia durante la tarde, por lo cual efectivos de esa dependencia fueron direcamente a tomársela a la casa.

Sospechas
Trascendió que existen fuertes sospechas entre los investigadores de que los autores de este robo sean los mismos que ingresaron el jueves en la casa de Mónica Neila a robar y la asesinaron.
Aunque también se podría decir que endosarle a los autores del crimen este robo es tal vez el camino más corto, lo cierto es que existen algunas similitudes.
Los delincuentes ingresaron a las viviendas por la fuerza y no les importó que hubiera gente dentro de la casa e incluso utilizar la fuerza.
En ambos casos buscaban una importante suma de dinero, alhajas y otros objetos de valor, por lo que se cree que la víctima había sido vigilada.
También resulta sospechoso el hecho de que Neila haya sido asfixiada y que en el asalto de ayer, uno de los delincuentes cubriera la cabeza de la víctima con una almohada.
Por otra parte, una fuente cercana a la investigación recordó que hace un tiempo se produjo en la calle 44, a la misma altura, un hecho de similares características.
Por esta razón, por ahora lo única certeza con la que cuentan los investigadores es que la seguridad ha sido burlada y que la ola de violencia parece cobrar cada vez más fuerza. En tanto, una importante cantidad de sujetos encausados, de conocida peligrosidad, continúan libres y otros, que incluso ya han sido juzgado y sentenciados, gozan de detención domiciliaria y circulan con total impunidad por las calles de la ciudad. Este presencia de sujetos con antecedentes y con sentencia, pero libres, amplía el abanico de sospechosos para la autoría de delitos violentos como los aquí narrados. (PUNTO CERO).