BUENOS AIRES. KIRCHNER RETOMO LA INICIATIVA CON SCIOLI. Por Ignacio Fidanza

BUENOS AIRES, Noviembre 30, (PUNTO CERO-La Política OnLine) Dicen que las derrotas en política, y en la vida en general, enseñan más que los triunfos. Néstor Kirchner sin duda tomó debida nota de la paliza de Misiones, de la única manera que interesa en un gobernante: en los hechos. Muchos le recriminarán la ausencia de una autocrítica, y si es posible, acompañada de flagelación pública en la Plaza de Mayo.Un deseo respetable, pero que no hace a la esencia de las cosas.
Y lo cierto es que luego de Misiones, el Presidente dio sobradas muestras de que entendió que su poder no es absoluto y la derrota, como siempre, está ahí nomás, agazapada. Allí están Eduardo Fellner y Felipe Solá, para dar cuenta de este regreso de Kirchner al sentido común.
El pase de Daniel Scioli a la provincia es un eslabón más -complejo, rico de matices políticos- de este reacomodamiento presidencial. Como siempre sucede, las razones parecen ser las obvias: por empezar es el candidato que mejor mide, el único que asegura ciertas chances de triunfo sobre Juan Carlos Blumberg.
Scioli, aunque la Casa Rosada se cuide de difundirlo, es uno de los dirigentes que mejor imagen tiene a nivel nacional, detrás del Presidente y su mujer. Una cosa es tenerlo a raya para que se discipline y otra muy distinta es desperdiciar su enorme potencial político cuando llegue la hora de la verdad.
Como es obvio la provincia de Buenos Aires, es el distrito que define la elección presidencial, y allí, será Felipe Solá quien defina la fecha de convocatoria. No sería extraño que de avanzar la candidatura de Scioli, esa fecha coincida con la elección del próximo presidente.
En la Ciudad de Buenos Aires, lamentablemente para la Casa Rosada, ese resorte está en poder del díscolo Jorge Telerman, quien podría jugar al adelantamiento y entonces ninguno de los votos que eventualmente traccione Scioli sumarían a la presidencial.
La candidatura del vicepresidente resuelve en segundo lugar la complicada interna del peronismo bonaerense y surge como un elegante puente de plata hacia el duhaldismo -y en especial hacia Eduardo Duhalde-, que siempre sintió al vicepresidente como uno de los suyos.
Por más que Kirchner se haga el distraído ninguno de los movimientos de rebeldía que luego de Misiones empezaron a agitar al peronismo, le son indiferentes. Después de todo, él es la expresión más cabal de lo que aún puede ofrecer ese movimiento a la hora de disputar el poder.
Se podrá relativizar el peso del bizarro Peronismo de Pie de Ramón Puerta, pero Eduardo Duhalde es otra cosa y Kirchner lo sabe. El ex presidente, muy hábil, jugo a las escondidas detrás de los amagues de Puerta, José Manuel de la Sota, Juan Carlos Romero y sobre todo, Luís Barrionuevo.
Kirchner, a su peculiar modo, tal vez este ofreciendo a Duhalde, con el pase de Scioli a la provincia, el acuerdo que los nuevos tiempos le exigen.

Señales
Hace dos sábados y como parte de su campaña a Jefe de Gobierno, Scioli encabezó un acto en Villa Lugano. Allí se vio al albertista Diego Kravetz, jefe de los legisladores kirchneristas, en el palco. Hasta aquí lo esperado. Pero una presencia despertó suspicacias: el intendente de La Plata, Julio Alak, departía alegremente con el joven legislador porteño.
Hace ya varias semanas que Alberto Fernández encomendó a su mano derecha en la Capital que empiece a tejer una relación política con el intendente de La Plata. ¿Pura casualidad? Se sabe que Alak más allá de su candidatura a gobernador es hoy un soldado kirchnerista sumando voluntades en la provincia y porque no, un posible compañero de fórmula de Scioli o quien finalmente sea el elegido.
Garantía de cierta continuidad para el felipismo y prenda de unidad con el duhaldismo, Scioli deberá trabajar para superar la natural desconfianza de "los movimientos sociales" que hoy encarna como cabeza visible el vicejefe de Gabinete bonaerense, Emilio Pérsico. Sectores que han crecido con Kirchner y Solá y para quienes el vicepresidente se parece demasiado a un hombre de la derecha.
Si finalmente su pase a la provincia se consolida, habrá que acordar que algo especial sucede con este ex motonauta, que cada vez que empieza a trabajar por conquistar la Ciudad de Buenos Aires, el destino lo llama para un lugar mayor. (PUNTO CERO-La Política OnLine).