Un mástil de Movistar en el barrio Las Acacias no contaba con habilitación ni permisos legales • Un petitorio vecinal tuvo una respuesta inmediata de los departamentos de Obras Públicas y Catastro.
El rápido accionar de un grupo de vecinos, y la fulminante respuesta del personal municipal, permitieron que se suspendiera la instalación de un mástil de telefonía móvil de Movistar que no contaba con habilitación ni permisos legales. Las obras para asentar el dispositivo irradiante estaban en curso sobre un terreno ubicado en calles 44 y 103, y provocó la respuesta de los barrios afectados: Las Acacias, Pago Chico y Santa María. El petitorio de una veintena de vecinos tuvo una respuesta inmediata de los departamentos de Obras Públicas y Catastro, que actuaron en cuestión de horas para clausurar la construcción.
La oculista Marcela Escobar reside en la zona a 150 metros del predio en cuestión. Relató a El Nuevo Cronista que al advertir los trabajos, y consciente de los riesgos para la salud que entraña la cercanía de un mástil de estas dimensiones, alertó a sus vecinos. Todos juntos presentaron una nota en Mesa de Entradas el viernes 15, donde dejaron constancia de su preocupación por la obra, enclavada en una zona netamente residencial. Los vecinos expresaron que el dispositivo podría afectar a la salud pública, además del daño estético sobre la zona, y se preguntaron si el proyecto contaba con habilitación municipal y la aprobación del OPDS (Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible).
Hechos consumados
Los vecinos solicitaron que, en caso de que se tratara de una obra clandestina, se procediera a su inmediata clausura aprovechando que la obra aún estaba en etapa de construcción, ya que “en casos similares, una vez instalada este tipo de antenas, las empresas suelen ampararse en que la misma ya se encuentra operando y prestando un servicio público, dejando relegados a los primeros damnificados, que somos quienes vivimos en las proximidades”.
“En Mercedes hay muchas antenas que no se pueden sacar por este motivo”, dice Marcela Escobar, quien instó a los vecinos a “estar atentos” porque las empresas actúan con la lógica del hecho consumado. Marcela expresó su agradecimiento a todo el personal municipal, que en brevísimo tiempo se apersonó en la obra para clausurarla, por la celeridad del procedimiento.
10 años por adelantado
La municipalidad anticipó que promoverá acciones legales contra la empresa y contra el dueño del terreno, a quien la empresa le habría alquilado por la suma de 30 mil pesos anuales, con la promesa del pago de 10 años por adelantado, según informaron los vecinos.
Intentaron seguir con la obra
Pese al accionar municipal, el sábado por la mañana una cuadrilla intentó proseguir con la obra, dijeron los vecinos. Si vivieron momentos de tensión cuando los obreros se negaron a reconocer la faja de clausura, y también desconocieron a un inspector municipal que se apersonó en el lugar. El dueño del terreno también intervino en la discusión. Finalmente la cuadrilla fue disuadida, pero dado el carácter de la discusión, uno de los vecinos decidió poner en alerta a la fiscalía de turno.
Un rechazo mundial a los mástiles
Los reportes oficiales aseguran que las antenas de móviles no representan ningún peligro contra la salud. Sin embargo, numerosos estudios demuestran lo contrario. Existen hasta el momento dos estudios científicos que relacionan las antenas de telefonía con un incremento del cáncer en su zona de influencia. Ambos se han publicado en revistas científicas durante el año 2004. También se vinculan la cercanía de los mástiles con el insomnio, alergias y otros disturbios de la salud.
Comunidades en todo el mundo se movilizan contra la presencia de mástiles de telefonía, y Mercedes no es la excepción. El episodio de Las Acacias se suma a otro similar, ocurrido meses atrás en el barrio Bello Horizonte, donde los vecinos impidieron la instalación de un mástil.
El rápido accionar de un grupo de vecinos, y la fulminante respuesta del personal municipal, permitieron que se suspendiera la instalación de un mástil de telefonía móvil de Movistar que no contaba con habilitación ni permisos legales. Las obras para asentar el dispositivo irradiante estaban en curso sobre un terreno ubicado en calles 44 y 103, y provocó la respuesta de los barrios afectados: Las Acacias, Pago Chico y Santa María. El petitorio de una veintena de vecinos tuvo una respuesta inmediata de los departamentos de Obras Públicas y Catastro, que actuaron en cuestión de horas para clausurar la construcción.
La oculista Marcela Escobar reside en la zona a 150 metros del predio en cuestión. Relató a El Nuevo Cronista que al advertir los trabajos, y consciente de los riesgos para la salud que entraña la cercanía de un mástil de estas dimensiones, alertó a sus vecinos. Todos juntos presentaron una nota en Mesa de Entradas el viernes 15, donde dejaron constancia de su preocupación por la obra, enclavada en una zona netamente residencial. Los vecinos expresaron que el dispositivo podría afectar a la salud pública, además del daño estético sobre la zona, y se preguntaron si el proyecto contaba con habilitación municipal y la aprobación del OPDS (Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible).
Hechos consumados
Los vecinos solicitaron que, en caso de que se tratara de una obra clandestina, se procediera a su inmediata clausura aprovechando que la obra aún estaba en etapa de construcción, ya que “en casos similares, una vez instalada este tipo de antenas, las empresas suelen ampararse en que la misma ya se encuentra operando y prestando un servicio público, dejando relegados a los primeros damnificados, que somos quienes vivimos en las proximidades”.
“En Mercedes hay muchas antenas que no se pueden sacar por este motivo”, dice Marcela Escobar, quien instó a los vecinos a “estar atentos” porque las empresas actúan con la lógica del hecho consumado. Marcela expresó su agradecimiento a todo el personal municipal, que en brevísimo tiempo se apersonó en la obra para clausurarla, por la celeridad del procedimiento.
10 años por adelantado
La municipalidad anticipó que promoverá acciones legales contra la empresa y contra el dueño del terreno, a quien la empresa le habría alquilado por la suma de 30 mil pesos anuales, con la promesa del pago de 10 años por adelantado, según informaron los vecinos.
Intentaron seguir con la obra
Pese al accionar municipal, el sábado por la mañana una cuadrilla intentó proseguir con la obra, dijeron los vecinos. Si vivieron momentos de tensión cuando los obreros se negaron a reconocer la faja de clausura, y también desconocieron a un inspector municipal que se apersonó en el lugar. El dueño del terreno también intervino en la discusión. Finalmente la cuadrilla fue disuadida, pero dado el carácter de la discusión, uno de los vecinos decidió poner en alerta a la fiscalía de turno.
Un rechazo mundial a los mástiles
Los reportes oficiales aseguran que las antenas de móviles no representan ningún peligro contra la salud. Sin embargo, numerosos estudios demuestran lo contrario. Existen hasta el momento dos estudios científicos que relacionan las antenas de telefonía con un incremento del cáncer en su zona de influencia. Ambos se han publicado en revistas científicas durante el año 2004. También se vinculan la cercanía de los mástiles con el insomnio, alergias y otros disturbios de la salud.
Comunidades en todo el mundo se movilizan contra la presencia de mástiles de telefonía, y Mercedes no es la excepción. El episodio de Las Acacias se suma a otro similar, ocurrido meses atrás en el barrio Bello Horizonte, donde los vecinos impidieron la instalación de un mástil.
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