BUENOS AIRES, Setiembre 25, (PUNTO CERO) No basta con buenas intenciones, si a una cifra incalculable de personas, entre los más de 2 millones de discapacitados registrados en el país, no llegan por igual los beneficios de una Ley, que todos reconocen como “buena”, pero que, por diversas razones, en particular la ausencia de una política de Estado, no se aplica en algunas provincias y en otras solo parcialmente.
Esta realidad sumada a la inequidad, que marca una brecha entre discapacitados carenciados y adinerados, me impulsan a afirmar eufemísticamente que la Ley nacional de Discapacidad, anda sobre silla de ruedas.
La diputada nacional Lucrecia Monti, ocupa desde el mes de marzo la presidencia de la Comisión de Discapacidad ante la Cámara Baja, y ya está fuertemente involucrada en los temas que urge resolver para que la “discapacitada” Ley, eche a andar por sus propios “pies”
¿Por qué no se cumple la Ley Nacional de Discapacidad?
Hay que reconocer que es una Ley muy buena pero de difícil cumplimiento. Por ello, desde esta Comisión estamos trabajando mucho, con mucha concurrencia de todos los diputados que nos reunimos cada quince días y promoviendo algunos proyectos vinculados a intereses comunes para lograr que la Ley sea efectiva.
¿Por qué no lo es?
Por razones de inequidad. porque es una ley para Suiza hecha en Argentina, un país donde hay provincias que todavía no han adoptado la Ley porque se adhieren a una propia o no tienen ninguna.
TRABAJO DIGNO
Hoy, por suerte, tenemos un país que está saliendo adelante económicamente, y existen mejores posibilidades de trabajar en el tema Discapacidad, fundamentalmente en el tema del trabajo.
Según dice la Ley, el Estado tiene que darle la posibilidad a un 4 % de personas discapacitadas, para que puedan acceder a un empleo y ello en general no se cumple
¿Por qué razón?
En primer lugar hay que reconocer que no es fácil, la actividad no está organizada debidamente. Una persona con cualquier discapacidad no puede estar en cualquier puesto, hay que hacer todo un trabajo de selección, clasificación de acuerdo a la discapacidad.
Por ejemplo: quien tiene una discapacidad motora, tal vez puede trabajar con computadoras, sentado atendiendo al público. Los no videntes podrían hacer otro tipo de trabajo, esto todavía no está planificado.
Tiene que haber una política de Estado para que esto se cumpla en todas partes.
Hemos hecho una jornada de debates donde estuvo presente también el Sector privado y se analizó puntualmente este tema.
Llegamos a la conclusión de que los puestos de trabajo tienen que ser adaptados a las personas según su discapacidad, lo que significa que el trabajador requiere terapia ocupacional, apoyo de sus compañeros de trabajo para favorecer una integración efectiva y de que se haga una evaluación de la sensibilidad edilicia.
Ese es el otro tema, la sensibilidad, porque en nuestro propio edificio del Congreso de la Nación no hay sensibilidad en todos lados para que puedan entrar los discapacitados, ni baños había para ellos.
Creo que la sensibilidad es un tema que debemos fomentar en todo el país.
Volviendo al tema del empleo ¿qué salida han encontrado?
Hemos pensado en el trabajo a domicilio, y en el teletrabajo; en fin hay muchas opciones, pero requieren de una planificación y nosotros fundamentalmente desde la Comisión lo que tratamos es que todo esto sea posible, trazar estrategias para que en un año, dos años, se vayan logrando , cosa que a los cuatro años el 4 % de discapacitados estén realmente incorporados al trabajo.
¿Cómo sería el teletrabajo?
Es una posibilidad laboral a partir del desarrollo tecnológico actual, por ejemplo cumplir encargos laborales a través de Internet.
El tener trabajo para un discapacitado, estimula mucho su autoestima y su dignidad. En la Comisión nos hemos propuesto algunas cosas como es trabajar mucho el tema laboral, es una demanda muy fuerte, después el tema de la accesibilidad, que es fundamental, para que los discapacitados puedan llegar a los lugares que les exige la vida cotidiana, mediante rampas, transporte convenientemente adaptado.
La ley es muy buena, pero le falta concretar muchos eslabones. Podés tener una silla pero de mucho no sirve si no podés subir al transporte que te lleve al trabajo o la universidad, y peor aún si ves que solamente lo podrán hacer aquellos que tienen dinero.
Su proyecto de Ley sobre el otorgamiento de la Certificación de Discapacidad ¿en qué se fundamenta?
En una gran injusticia. Porque en la encuesta se dice que el 80 % de las personas discapacitadas del país, no tienen certificado.
El Certificado de Discapacidad es muy importante porque es el documento que permite la cobertura en temas de salud, transporte, viajar gratis, sobre todo las personas que son del interior y tienen que venir a Buenos Aires a recibir un tratamiento médico, o sea, todo lo que dice la ley sobre los derechos se accede a través de ese Certificado.
¿Por qué no lo tienen?
Porque no existe una comunicación en el interior, ni una política fuerte para que las familias que tienen una persona con discapacidad, puedan tramitar el carné, para acceder a los beneficios., repito, acá no hay política de Estado con respecto a la discapacidad.
Además por la burocracia una persona, por ejemplo de cualquier provincia del Norte, si no existe una Junta que la certifique, tiene que venir a la Capital a sacar ese Certificado, donde le dan un turno de 9 meses, entonces la gente no lo saca.
La Ley que propongo es que todas las gobernaciones provinciales, municipalidades, hospitales, etc., tengan la posibilidad de certificar y que éste documento sea válido en cualquier provincia, porque en la actualidad quien obtuvo el certificado por ejemplo en Jujuy, no le vale en Buenos Aires y si tiene que viajar gratis va a la empresa y la burocracia lo absorbe.
De modo que pretendemos que este certificado sea válido para todo el territorio nacional, algo muy importante y esperemos que salga.
¿Cree que el proyecto tendrá opositores?
No lo creo, porque está firmado y consensuado con los diputados de todos los bloques. Por eso insisto en que como legisladores lo tenemos que hacer es determinar cosas como ésta. Si vemos que la encuesta está diciendo que hay un 80 % que no tienen el carné, tenemos que preguntarnos ¿por qué, qué está pasando?
La discapacidad siempre está ligada a las personas de menos recursos, es la que menos posibilidad tiene de viajar acá a pedir el certificado.
Nuestro país tiene una deuda muy grande con estos sectores de la población vulnerables y necesitados.
¿Que opina acerca de la rehabilitación?
Que es muy importante para los discapacitados, pero ocurre que en el interior no existen institutos de rehabilitación, de ahí nuestro planteo de que se organicen institutos regionales porque sabemos que muchos discapacitados que viven en otras provincias, tienen que viajar a Buenos Aires a hacerse la rehabilitación. La idea es que estos institutos puedan agrupar 3-4 provincias según su proximidad geográfica.
Ya fue aprobado también nuestro Proyecto de Resolución que declaró de interés de la Cámara de diputados de la Nación, el proyecto de la Fundación FRIDIM, denominado Trabajo multidisciplinario institucional sobre discapacidad en comunidad.
¿Qué persigue?
La creación de espacios para que toda la población discapacitada con problemas socio-económicos, pueda acceder a una atención calificada acorde con su diagnóstico.
Se trata de un trabajo de rehabilitación ambulatoria comunitaria de tipo interinstitucional con un espacio interdisciplinario, que abarca todos los aspectos de la discapacidad.
Estamos apoyando también que se realice el IV Congreso Nacional de Kinesiología. Antes estaba solo la Universidad Nacional, pero ahora hay muchas privadas y tecnologías, avances nuevos, pero también estos tratamientos son además de costos, prolongados, y la kinesiología llega, lamentablemente a la gente con más recursos, habría que poner más servicios de este tipo en los hospitales públicos para que la familia aprenda y participe en la rehabilitación.Para mí la discapacidad hay que trabajarla desde temas fuertes con una política informativa que llegue a todos los discapacitados en la educación también para que se terminen las escuelas especiales y haya una educación inclusiva, con una política integradora. (PUNTO CERO).
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