MERCEDES, Mayo 24, (PUNTO CERO-El Nuevo Cronista) El pasado lunes se realizó una sesión ordinaria en la cual el tema de mayor atracción era el seguro debate que se generaría en torno a la petición particular presentada por los trabajadores autoconvocados reclamando un salario mínimo de 915 pesos.
En realidad el HCD solo puede realizar una declaración sobre el tema salarial. Solo puede modificar los salarios cuando se analiza el presupuesto –hecho este que terminó en una presentación en la Corte- o cuando es el Ejecutivo quien remite un proyecto para debatir en el seno del cuerpo. Fuera de esas dos excepciones la regla es que los salarios municipales los fija el poder ejecutivo.
Casi al inicio de la sesión una multitud de trabajadores se hicieron presentes en el recinto con bombos y pancartas. Fue a raíz de ello que el concejal Eduardo Cerulli solicitó que sea modificado el orden del día y debatido en primer turno ese tema, moción esta que fue aprobada por unanimidad.
Acosta
El HCD le otorgó la posibilidad a los trabajadores presentes que eligiesen a un representante para que se exprese, elección esta que recayó en Daniel Acosta quien ocupó la banca vacía de Martín Zubeldía.
Acosta justificó el aumento reclamado argumentando la necesidad de “dignificar” la vida del municipal “estamos cansados de tener que comer segundas marcas y tener que fotocopiar libros para educar a nuestros hijos”, dijo entre cosas no sin antes agradecer al cuerpo la posibilidad de expresarse y a sus compañeros que lo hayan elegido. Habló de la situación de inestabilidad de los contratados (entre quienes se incluye) y de lo insuficiente del aumento anunciado por el Ejecutivo. Varios de sus pasajes fueron aplaudidos por el más de centenar trabajadores presentes y quiso transmitirle tranquilidad a los contribuyentes “que son quienes pagan nuestros sueldos en definitiva” de que los servicios no corrían riesgo.
Apoyo
El discurso de Acosta tuvo el primer apoyo desde el bloque presidido por Juan Pablo López quien tras recordar la permanente preocupación por la cuestión salarial recordó que desde el Ejecutivo no se quiso cumplir el aumento otorgado por el cuerpo en la sesión que se trató el presupuesto. Justificó que el mismo era posible en el aumento anunciado ahora por el Ejecutivo sin modificar las partidas “si ahora es posible es un doce, antes era posible un diez”, dijo y recalcó que ya en aquella oportunidad había defendido la posición del bloque asegurando que ese aumento era exiguo “casi miserable”, graficó. Además el edil opositor justificó la posibilidad de abonar el monto ahora exigido por los trabajadores en el importante aumento de la coparticipación y el superávit de años anteriores. “No digo que no haya que cambiar el presupuesto, digo que es posible y el Ejecutivo debe hacer un esfuerzo; los trabajadores se lo merecen”, razonó.
El concejal radical Juan Manuel Torres coincidió con López aunque agregó su preocupación por la constante política salarial de Selva. “Ya siendo concejal, sabiendo que iba a ser intendente se opuso a una suba salarial” recordó. Pancho habló de su paso como empleado municipal y recordó los distintos intentos del bloque radical de mejorar la situación salarial durante la actual gestión. “Ahora parece mucho, pero el aumento no sería tanto si no se hubiese atrasado tanto el salario municipal”, razonó.
En sintonía con esta postura el concejal David Valerga denunció que en último presupuesto el objetivo del oficialismo era subirle un 33% el salario a los funcionarios “y no darle nada a los trabajadores.” Valerga con recibos y calculadora en mano también dijo que el promocionado aumento del 93 a los trabajadores municipales en esta gestión no excedía el 55% si se tomaba a la suma fija como parte del mismo.
Mientras esto sucedía la barra aplaudía y cada tanto entonaba un cántico que mencionaba, solo mencionaba a la concejal Defelippe.
El primer oficialista es salir al cruce fue Mariano Castelucci quien fue interrumpido un par de veces y el presidente del cuerpo le anunció a la barra que de no permitirle hablar al edil se vería obligado a desalojar la sala. El escribano cuestionó la falta de elementos que avalaban la posibilidad de otorgar ese aumento y acusó elípticamente a Juan Carlos Benítez de politizar un justo reclamo de los trabajadores y aseguró que hablar de un aumento de $ 915 era hacer demagogia.
También la concejal Marisa Defelippe no pudo dejar pasar la oportunidad de intentar defender a la gestión. Pero –como si se tratara de otra discusión- denunció un supuesto manejo de horas extras por parte del anterior presidente del HCD, David Valerga. Además defendió el reclamo salarial de los trabajadores pero dentro de los gremios y alabó la sensibilidad del intendente. A pesar de que la barra estaba contenida, la concejal oficialista fue víctima de algunos exabruptos por parte de los presentes hecho este que molestó a la concejal oficialista que pidió que sean expulsados los que gritaban.
Fue ahí donde el concejal Luis Colao le recordó al oficialismo lo que había ocurrido en anteriores ocasiones donde los insultados eran los opositores. Luego insistió en justificar las posibilidades existentes para pagar el aumento de los trabajadores municipales e insistió en el aumento de la coparticipación.
Por último el concejal Diego Aguilar Mazzuca sorprendió a todos cuando recordó los sucesos de las últimas entre los trabajadores municipales y le pidió a Selva que imite al gobernador Sancho de Santa Cruz y renuncie al cargo.
A la hora de la votación el final fue previsible: los concejales oficialistas no apoyaron la resolución y el radicalismo, el ARI, el FPV Proyecto Nacional y el Partido Justicialista acompañaron la iniciativa que fue aprobada por mayoría.
En realidad el HCD solo puede realizar una declaración sobre el tema salarial. Solo puede modificar los salarios cuando se analiza el presupuesto –hecho este que terminó en una presentación en la Corte- o cuando es el Ejecutivo quien remite un proyecto para debatir en el seno del cuerpo. Fuera de esas dos excepciones la regla es que los salarios municipales los fija el poder ejecutivo.
Casi al inicio de la sesión una multitud de trabajadores se hicieron presentes en el recinto con bombos y pancartas. Fue a raíz de ello que el concejal Eduardo Cerulli solicitó que sea modificado el orden del día y debatido en primer turno ese tema, moción esta que fue aprobada por unanimidad.
Acosta
El HCD le otorgó la posibilidad a los trabajadores presentes que eligiesen a un representante para que se exprese, elección esta que recayó en Daniel Acosta quien ocupó la banca vacía de Martín Zubeldía.
Acosta justificó el aumento reclamado argumentando la necesidad de “dignificar” la vida del municipal “estamos cansados de tener que comer segundas marcas y tener que fotocopiar libros para educar a nuestros hijos”, dijo entre cosas no sin antes agradecer al cuerpo la posibilidad de expresarse y a sus compañeros que lo hayan elegido. Habló de la situación de inestabilidad de los contratados (entre quienes se incluye) y de lo insuficiente del aumento anunciado por el Ejecutivo. Varios de sus pasajes fueron aplaudidos por el más de centenar trabajadores presentes y quiso transmitirle tranquilidad a los contribuyentes “que son quienes pagan nuestros sueldos en definitiva” de que los servicios no corrían riesgo.
Apoyo
El discurso de Acosta tuvo el primer apoyo desde el bloque presidido por Juan Pablo López quien tras recordar la permanente preocupación por la cuestión salarial recordó que desde el Ejecutivo no se quiso cumplir el aumento otorgado por el cuerpo en la sesión que se trató el presupuesto. Justificó que el mismo era posible en el aumento anunciado ahora por el Ejecutivo sin modificar las partidas “si ahora es posible es un doce, antes era posible un diez”, dijo y recalcó que ya en aquella oportunidad había defendido la posición del bloque asegurando que ese aumento era exiguo “casi miserable”, graficó. Además el edil opositor justificó la posibilidad de abonar el monto ahora exigido por los trabajadores en el importante aumento de la coparticipación y el superávit de años anteriores. “No digo que no haya que cambiar el presupuesto, digo que es posible y el Ejecutivo debe hacer un esfuerzo; los trabajadores se lo merecen”, razonó.
El concejal radical Juan Manuel Torres coincidió con López aunque agregó su preocupación por la constante política salarial de Selva. “Ya siendo concejal, sabiendo que iba a ser intendente se opuso a una suba salarial” recordó. Pancho habló de su paso como empleado municipal y recordó los distintos intentos del bloque radical de mejorar la situación salarial durante la actual gestión. “Ahora parece mucho, pero el aumento no sería tanto si no se hubiese atrasado tanto el salario municipal”, razonó.
En sintonía con esta postura el concejal David Valerga denunció que en último presupuesto el objetivo del oficialismo era subirle un 33% el salario a los funcionarios “y no darle nada a los trabajadores.” Valerga con recibos y calculadora en mano también dijo que el promocionado aumento del 93 a los trabajadores municipales en esta gestión no excedía el 55% si se tomaba a la suma fija como parte del mismo.
Mientras esto sucedía la barra aplaudía y cada tanto entonaba un cántico que mencionaba, solo mencionaba a la concejal Defelippe.
El primer oficialista es salir al cruce fue Mariano Castelucci quien fue interrumpido un par de veces y el presidente del cuerpo le anunció a la barra que de no permitirle hablar al edil se vería obligado a desalojar la sala. El escribano cuestionó la falta de elementos que avalaban la posibilidad de otorgar ese aumento y acusó elípticamente a Juan Carlos Benítez de politizar un justo reclamo de los trabajadores y aseguró que hablar de un aumento de $ 915 era hacer demagogia.
También la concejal Marisa Defelippe no pudo dejar pasar la oportunidad de intentar defender a la gestión. Pero –como si se tratara de otra discusión- denunció un supuesto manejo de horas extras por parte del anterior presidente del HCD, David Valerga. Además defendió el reclamo salarial de los trabajadores pero dentro de los gremios y alabó la sensibilidad del intendente. A pesar de que la barra estaba contenida, la concejal oficialista fue víctima de algunos exabruptos por parte de los presentes hecho este que molestó a la concejal oficialista que pidió que sean expulsados los que gritaban.
Fue ahí donde el concejal Luis Colao le recordó al oficialismo lo que había ocurrido en anteriores ocasiones donde los insultados eran los opositores. Luego insistió en justificar las posibilidades existentes para pagar el aumento de los trabajadores municipales e insistió en el aumento de la coparticipación.
Por último el concejal Diego Aguilar Mazzuca sorprendió a todos cuando recordó los sucesos de las últimas entre los trabajadores municipales y le pidió a Selva que imite al gobernador Sancho de Santa Cruz y renuncie al cargo.
A la hora de la votación el final fue previsible: los concejales oficialistas no apoyaron la resolución y el radicalismo, el ARI, el FPV Proyecto Nacional y el Partido Justicialista acompañaron la iniciativa que fue aprobada por mayoría.
Tras el aplauso de los trabajadores el presidente del cuerpo agradeció el comportamiento de los trabajadores y Daniel Acosta pidió hacer nuevamente uso de la palabra para agradecer a todos los concejales “a quienes nos apoyaron y a quienes no y que todos sepan que mañana vamos a estar trabajando como lo estaríamos si no hubiesen aprobado este proyecto”, insistió y lentamente el recinto comenzó a despoblarse. (PUNTO CERO-El Nuevo Cronista).
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