BUENOS AIRES, Octubre 10, (PUNTO CERO-Inforegión) A raíz de la escasez de monedas, que se registra desde hace varios meses en el conurbano bonaerense y en distintos puntos del país, algunas empresas de la región implementaron el servicio de tarjetas magnéticas, que se obtienen desde 5 hasta 20 pesos. El saldo se va descontando a medida que se utiliza. La línea 501, de Monte Grande, es la que aplicó el sistema. En tanto, otras como la 266 de Lomas de Zamora ofrece boletos, que pueden ser abonados con billetes y se adquieren en las ventanillas, ubicadas en las estaciones de trenes.
A la hora de viajar, conseguir monedas se convierte en un dolor de cabeza para los miles de usuarios de la región ya que, a raíz del último incremento en la tarifa del boleto, que rige desde el 1 de enero, es mucho más dificil acceder al metal.
Debido a la problemática se pensó en un método que agilice el acceso al transporte público de pasajeros, como el de la tarjeta magnética que hasta ahora para ser una de las soluciones posibles.
En la región algunas líneas implementaron el sistema de las tarjetas magnéticas, que se adquieren con billetes y por el monto que más le convenga al usuario, que va descontando el saldo a medida que es utilizada. La ventaja de este sistema es evitar “realizar todo tipo de travesías” para encontrar una moneda y poder viajar.
La firma Monte Grande SA, que posee las líneas 245, 394 y 501, que realizan el recorrido que va desde el centro del distrito al Cruce de Lomas y a Ezeiza, es una de las que primeras en aplicar el sistema en todos sus ramales.
Según explicaron desde la empresa a Info Región, las tarjetas se adquieren en distintos puntos, ubicados estratégicamente en las paradas de colectivos de la estación de Monte Grande. Allí los usuarios pueden encontrar tarjetas que van desde 5 hasta 20 pesos.
“Esta fue una de las formas para apalear un poco la situación, ya que la gente se queja constantemente por la falta de monedas y viajar se tornaba en un problema más que grave. Entonces, esto sirvió para que se viaje un poco mejor”, sostuvo uno de lo empleados de la línea.
Los usuarios pueden adquirir las tarjetas en las estaciones de trenes, donde la mayoría de los colectivos tienen la terminal, por lo general, desde las 14:00 a las 20:00. Según indican desde las distintas empresas, desde enero se incrementó la utilización de este sistema casi en un 50 por ciento.
La modalidad de tarjetas es la misma que se utiliza en los subtes y el conocido abono prepago de algunos trenes. Las tarjetas desechables pueden ser de cartón y de plástico con banda magnética o más moderna, con un chip que funciona por acercamiento a una lectora.
Quienes fomentan la utilización de tarjetas argumentan que “aliviará el padecimiento de los usuarios de colectivos" y "ayudará a descomprimir el caudal de monedas que absorbe el transporte urbano de pasajeros”.
Otros de los métodos utilizados por las diferentes líneas es la utilización de los boletos que se venden en las ventanillas ubicadas en las estaciones. La línea 266, que recorre Lomas de Zamora, el Cementerio de Avellaneda, las localidades de Rafael Calzada y Burzaco en el partido de Almirante Brown y San Francisco Solano, emplea esta modalidad que también facilita el viaje. Los boletos se adquieren con billetes y se pueden comprar para realizar un viaje o más de diez.
“La gente se lleva lo que necesita. Muchos vienen y compran para toda una semana, otras simplemente ida y vuelta, todo va a en relación a la necesidad del pasajero”, indicaron desde la empresa ante la consulta de Info Región.
Otras empresas, en cambio, aún no establecieron este tipo de método en sus servicios por diferentes causas. Desde la empresa Expreso Lomas, que posee la línea 165, que realiza el trayecto Plaza Miserere -en el barrio porteño de Once- hasta Loma Verde, señalaron que “no se utilizan tarjetas magnéticas porque tienen maquinas alemanas que no cuentan con la ranura, y son muchas para sacarlas de todas las formaciones”.
En tanto, desde la línea 278, que recorre desde Banfield hasta el Balneario de Quilmes, manifestaron que “hasta el momento no cuenta con ese servicio” y explicaron que se desconoce “en cuánto se podría implementar”.
La puesta en marcha de la tarjeta magnética sería una “solución” para las largas filas que se hacen en las puertas de las empresas de transporte en busca de la compra de monedas -en la mayoría de los sitios adicionan entre 2 y 3 pesos por cada 100 de cambio- o evitar las discusiones con los empleados de los bancos que entregan a penas 5 pesos por persona.
A la hora de viajar, conseguir monedas se convierte en un dolor de cabeza para los miles de usuarios de la región ya que, a raíz del último incremento en la tarifa del boleto, que rige desde el 1 de enero, es mucho más dificil acceder al metal.
Debido a la problemática se pensó en un método que agilice el acceso al transporte público de pasajeros, como el de la tarjeta magnética que hasta ahora para ser una de las soluciones posibles.
En la región algunas líneas implementaron el sistema de las tarjetas magnéticas, que se adquieren con billetes y por el monto que más le convenga al usuario, que va descontando el saldo a medida que es utilizada. La ventaja de este sistema es evitar “realizar todo tipo de travesías” para encontrar una moneda y poder viajar.
La firma Monte Grande SA, que posee las líneas 245, 394 y 501, que realizan el recorrido que va desde el centro del distrito al Cruce de Lomas y a Ezeiza, es una de las que primeras en aplicar el sistema en todos sus ramales.
Según explicaron desde la empresa a Info Región, las tarjetas se adquieren en distintos puntos, ubicados estratégicamente en las paradas de colectivos de la estación de Monte Grande. Allí los usuarios pueden encontrar tarjetas que van desde 5 hasta 20 pesos.
“Esta fue una de las formas para apalear un poco la situación, ya que la gente se queja constantemente por la falta de monedas y viajar se tornaba en un problema más que grave. Entonces, esto sirvió para que se viaje un poco mejor”, sostuvo uno de lo empleados de la línea.
Los usuarios pueden adquirir las tarjetas en las estaciones de trenes, donde la mayoría de los colectivos tienen la terminal, por lo general, desde las 14:00 a las 20:00. Según indican desde las distintas empresas, desde enero se incrementó la utilización de este sistema casi en un 50 por ciento.
La modalidad de tarjetas es la misma que se utiliza en los subtes y el conocido abono prepago de algunos trenes. Las tarjetas desechables pueden ser de cartón y de plástico con banda magnética o más moderna, con un chip que funciona por acercamiento a una lectora.
Quienes fomentan la utilización de tarjetas argumentan que “aliviará el padecimiento de los usuarios de colectivos" y "ayudará a descomprimir el caudal de monedas que absorbe el transporte urbano de pasajeros”.
Otros de los métodos utilizados por las diferentes líneas es la utilización de los boletos que se venden en las ventanillas ubicadas en las estaciones. La línea 266, que recorre Lomas de Zamora, el Cementerio de Avellaneda, las localidades de Rafael Calzada y Burzaco en el partido de Almirante Brown y San Francisco Solano, emplea esta modalidad que también facilita el viaje. Los boletos se adquieren con billetes y se pueden comprar para realizar un viaje o más de diez.
“La gente se lleva lo que necesita. Muchos vienen y compran para toda una semana, otras simplemente ida y vuelta, todo va a en relación a la necesidad del pasajero”, indicaron desde la empresa ante la consulta de Info Región.
Otras empresas, en cambio, aún no establecieron este tipo de método en sus servicios por diferentes causas. Desde la empresa Expreso Lomas, que posee la línea 165, que realiza el trayecto Plaza Miserere -en el barrio porteño de Once- hasta Loma Verde, señalaron que “no se utilizan tarjetas magnéticas porque tienen maquinas alemanas que no cuentan con la ranura, y son muchas para sacarlas de todas las formaciones”.
En tanto, desde la línea 278, que recorre desde Banfield hasta el Balneario de Quilmes, manifestaron que “hasta el momento no cuenta con ese servicio” y explicaron que se desconoce “en cuánto se podría implementar”.
La puesta en marcha de la tarjeta magnética sería una “solución” para las largas filas que se hacen en las puertas de las empresas de transporte en busca de la compra de monedas -en la mayoría de los sitios adicionan entre 2 y 3 pesos por cada 100 de cambio- o evitar las discusiones con los empleados de los bancos que entregan a penas 5 pesos por persona.
El sistema ya está en funcionamiento en Quilmes, Berazategui, Florencio Varela, Pilar y Mar del Plata y en provincias como Santa Fe, Rosario, Córdoba, Mendoza, Neuquén, Bariloche y Salta. En tanto, en la región esperan que se pueda implementar con rapidez para dejar de padecer la escasez del tan preciado metálico (PUNTO CERO-Inforegión).
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