BUENOS AIRES, Octubre 06, (PUNTO CERO-Diariohoy.net). Con Alberto Balestrini casi seguro en la presidencia, las peleas por los consejeros en los distritos se tornan cada vez más intensas. Las peripecias de los municipios más importantes de la Primera y de la Tercera Sección. Y los cambios en el sistema de afliación. Las principales hipótesis de conflicto.
Si bien el ex presidente Néstor Kirchner está pendiente de la situación nacional en su nuevo “cargo” de esposo de la Presidenta Cristina Fernández, se comenta que mientras recorría las calles de Nueva York, durante la última visita gubernamental a la Gran Manzana, no borraba de su cabeza una imagen que le quita el sueño: el Conurbano bonaerense. Bastión justicialista de siempre, es allí donde se dirimirán los cargos trascendentales de la interna del partido prevista para noviembre próximo. Y también es el lugar donde las luchas por el poder local ofrecen más condimento a un presente ya muy picante.
En la Primera Sección Electoral, San Martín se roba las miradas. La otrora tierra de Luis Barrionuevo ofrece a la esposa del referente gremial gastronómico, la diputada Graciela Camaño, como punta de lanza para superar las aspiraciones de la dupla que componen un ex candidato a intendente local, Gabriel Katopodis, junto con el concejal Alejandro Battaglia.
Vicente López también se presenta, a priori, como una zona donde la batalla a librar será reñida. Allí, el diputado sciolista Guido Lorenzino medirá fuerzas con el titular del Sindicato de Trabajadores Municipales, Victorio Pirillo.
La Tercera es la más controvertida, básicamente por la importancia de cada uno de los distritos. En muchos lugares, los nombres ya están confirmados: la mayoría de los intendentes que consiguieron ese lugar en las últimas elecciones con la boleta del Frente para la Victoria (FpV) irán en busca de la presidencia local para acuñar la lealtad de todos los que en algún momento supieron responder al ex caudillo bonaerense Eduardo Duhalde.
En diálogo con Hoy, un importante jefe comunal confirmó que Daniel Scioli les brindó su apoyo absoluto. En realidad, ese apoyo conlleva otro, más importante, oculto: el de Néstor Kirchner. El poder duhaldista, si bien intenta recuperarse con el Movimiento Productivo Argentino, ya no es el de antes, pero igualmente el kirchnerismo viene en franca caída a raíz del fracaso de la pelea con el campo y el deteriro de la situación económica del país.
En ese contexto, hay distritos en los que todavía muchos responden a Duhalde. O, al menos, se muestran alejados del actual mandamás. En Lanús trascendió que las cosas están más que parejas y cualquier avatar puede ser crucial para definir la elección para uno u otro lado.
¿Cuáles son esos lados? El del intendente Darío Díaz Pérez, kirchnerista de la nueva camada, y el histórico Manuel Quindimil, que representa a los sectores justicialistas más tradicionales. Desde el sector del jefe comunal afirman que está tranquilo, pensando en la gestión más que en la interna, donde irá como vicepresidente del candidato K José Pampuro. Quienes lo conocen saben que visualiza una victoria. “Estoy muy comprometido con la gestión de Lanús y confío en el trabajo de Pampuro”, aseguró el intendente.
Dentro del armado y la rosca política en tierra bonaerense, también cobra protagonismo la maratónica afiliación de personas de cara a los comicios. Las sospechas de irregularidades en cuanto a los padrones se basan en que, antes, las personas que se acercaban en busca de una afiliación la conseguían únicamente con la ficha del partido. Ahora esta realidad es otra: también precisan la fotocopia del DNI.
El diputado Jorge Landau arriesgó que alcanzan 1,6 millones de afiliados. De esta manera, el PJ provincial nuclea la mayor cantidad de adeptos del país al partido de Perón y Evita. “Logramos sumar 420.845. Hay que ver cuántos quedan después del filtro de la Justicia”, aclaró.
Los jefes comunales con mandatos recientes parecen tener que esperar para luchar por cosas más importantes, ya que al parecer la vieja guardia justicialista los supera por varios cuerpos de ventaja, al menos en la distribución de cargos. Según pudo averiguar este diario, la idea es que primero obtengan el poder absoluto dentro de su propio distrito, para después sí intentar “negociar” de igual a igual con los demás referentes del Conurbano.
Daniel Di Sabatino debe convivir con la sombra de Antonio Arcuri, duhaldista de primera mano, en San Vicente. Di Sabatino ya confirmó que irá por el poder total en la comuna, lugar que cobijó durante las primeras reuniones al grupo de intendentes más afines al kirchnerismo.
Otro en situación similar es Darío Giustozzi. La sombra de Jorge Villaverde sobrevuela Almirante Brown y, si bien aún no confirmó su candidatura, Giustozzi querrá confirmar sus deseos justicialistas. Fernando Gray, de Esteban Echeverría, también, aunque su situación es más distendida en cuanto a su afiliación partidaria. Desde su círculo dejaron trascender que “Fernando se preocupa mucho por la gestión y no tanto por el partido, pero hará lo mejor y seguramente lo que diga el ex presidente Kirchner”.
Así dadas las cosas, las cartas están echadas y la verdad se develará mediante las urnas. Los afiliados al partido deberán decidir si Balestrini será quien comande el partido en la Provincia, al menos oficialmente, porque todos los que conocen el justicialismo se inclinan por asegurar que, amén de las peripecias reinantes, Néstor Kirchner es quien tiene la última palabra. Al menos por ahora.
Definiciones La Tercera Sección Electoral es la más controvertida. Por población e historia, muy vinculada con el justicialismo, influyen mucho tanto la disputa de líderes locales como los cuatro consejeros que representarán a la sección en la Provincia. En este caso se observa la disputa de duhaldistas y kirchneristas, aunque en la actualidad queda claro para qué lado se inclina la balanza.
Según trascendió, las candidaturas ya estarían definidas. El quilmeño Aníbal Fernández, ministro del Interior, y el senador José Pampuro, oriundo de Lanús, ya tendrían aseguradas las nominaciones. Los otros dos lugares serían para el jefe comunal de Berazategui, Juan José Mussi, y el de Avellaneda, Baldomero “Cacho” Alvarez de Oliveira.
En la Primera Sección Electoral, San Martín se roba las miradas. La otrora tierra de Luis Barrionuevo ofrece a la esposa del referente gremial gastronómico, la diputada Graciela Camaño, como punta de lanza para superar las aspiraciones de la dupla que componen un ex candidato a intendente local, Gabriel Katopodis, junto con el concejal Alejandro Battaglia.
Vicente López también se presenta, a priori, como una zona donde la batalla a librar será reñida. Allí, el diputado sciolista Guido Lorenzino medirá fuerzas con el titular del Sindicato de Trabajadores Municipales, Victorio Pirillo.
La Tercera es la más controvertida, básicamente por la importancia de cada uno de los distritos. En muchos lugares, los nombres ya están confirmados: la mayoría de los intendentes que consiguieron ese lugar en las últimas elecciones con la boleta del Frente para la Victoria (FpV) irán en busca de la presidencia local para acuñar la lealtad de todos los que en algún momento supieron responder al ex caudillo bonaerense Eduardo Duhalde.
En diálogo con Hoy, un importante jefe comunal confirmó que Daniel Scioli les brindó su apoyo absoluto. En realidad, ese apoyo conlleva otro, más importante, oculto: el de Néstor Kirchner. El poder duhaldista, si bien intenta recuperarse con el Movimiento Productivo Argentino, ya no es el de antes, pero igualmente el kirchnerismo viene en franca caída a raíz del fracaso de la pelea con el campo y el deteriro de la situación económica del país.
En ese contexto, hay distritos en los que todavía muchos responden a Duhalde. O, al menos, se muestran alejados del actual mandamás. En Lanús trascendió que las cosas están más que parejas y cualquier avatar puede ser crucial para definir la elección para uno u otro lado.
¿Cuáles son esos lados? El del intendente Darío Díaz Pérez, kirchnerista de la nueva camada, y el histórico Manuel Quindimil, que representa a los sectores justicialistas más tradicionales. Desde el sector del jefe comunal afirman que está tranquilo, pensando en la gestión más que en la interna, donde irá como vicepresidente del candidato K José Pampuro. Quienes lo conocen saben que visualiza una victoria. “Estoy muy comprometido con la gestión de Lanús y confío en el trabajo de Pampuro”, aseguró el intendente.
Dentro del armado y la rosca política en tierra bonaerense, también cobra protagonismo la maratónica afiliación de personas de cara a los comicios. Las sospechas de irregularidades en cuanto a los padrones se basan en que, antes, las personas que se acercaban en busca de una afiliación la conseguían únicamente con la ficha del partido. Ahora esta realidad es otra: también precisan la fotocopia del DNI.
El diputado Jorge Landau arriesgó que alcanzan 1,6 millones de afiliados. De esta manera, el PJ provincial nuclea la mayor cantidad de adeptos del país al partido de Perón y Evita. “Logramos sumar 420.845. Hay que ver cuántos quedan después del filtro de la Justicia”, aclaró.
Los jefes comunales con mandatos recientes parecen tener que esperar para luchar por cosas más importantes, ya que al parecer la vieja guardia justicialista los supera por varios cuerpos de ventaja, al menos en la distribución de cargos. Según pudo averiguar este diario, la idea es que primero obtengan el poder absoluto dentro de su propio distrito, para después sí intentar “negociar” de igual a igual con los demás referentes del Conurbano.
Daniel Di Sabatino debe convivir con la sombra de Antonio Arcuri, duhaldista de primera mano, en San Vicente. Di Sabatino ya confirmó que irá por el poder total en la comuna, lugar que cobijó durante las primeras reuniones al grupo de intendentes más afines al kirchnerismo.
Otro en situación similar es Darío Giustozzi. La sombra de Jorge Villaverde sobrevuela Almirante Brown y, si bien aún no confirmó su candidatura, Giustozzi querrá confirmar sus deseos justicialistas. Fernando Gray, de Esteban Echeverría, también, aunque su situación es más distendida en cuanto a su afiliación partidaria. Desde su círculo dejaron trascender que “Fernando se preocupa mucho por la gestión y no tanto por el partido, pero hará lo mejor y seguramente lo que diga el ex presidente Kirchner”.
Así dadas las cosas, las cartas están echadas y la verdad se develará mediante las urnas. Los afiliados al partido deberán decidir si Balestrini será quien comande el partido en la Provincia, al menos oficialmente, porque todos los que conocen el justicialismo se inclinan por asegurar que, amén de las peripecias reinantes, Néstor Kirchner es quien tiene la última palabra. Al menos por ahora.
Definiciones La Tercera Sección Electoral es la más controvertida. Por población e historia, muy vinculada con el justicialismo, influyen mucho tanto la disputa de líderes locales como los cuatro consejeros que representarán a la sección en la Provincia. En este caso se observa la disputa de duhaldistas y kirchneristas, aunque en la actualidad queda claro para qué lado se inclina la balanza.
Según trascendió, las candidaturas ya estarían definidas. El quilmeño Aníbal Fernández, ministro del Interior, y el senador José Pampuro, oriundo de Lanús, ya tendrían aseguradas las nominaciones. Los otros dos lugares serían para el jefe comunal de Berazategui, Juan José Mussi, y el de Avellaneda, Baldomero “Cacho” Alvarez de Oliveira.
El sufragio, por partes
Qué se elige además de presidente en las internas justicialistas
Los comicios internos del PJ no sólo eligen presidente del partido. También se eligen los cuatro consejeros por cada una de las ocho secciones electorales. Esta pelea es la más fuerte de todas, ya que en muchas secciones está la disputa por ver quiénes pueden ser aquellos que accedan a esos cargos.
Además, se votarán los cinco miembros de cada una de las tres ramas: la gremial, la de juventud y la femenina.
Los comicios internos del PJ no sólo eligen presidente del partido. También se eligen los cuatro consejeros por cada una de las ocho secciones electorales. Esta pelea es la más fuerte de todas, ya que en muchas secciones está la disputa por ver quiénes pueden ser aquellos que accedan a esos cargos.
Además, se votarán los cinco miembros de cada una de las tres ramas: la gremial, la de juventud y la femenina.
En los 134 municipios se agrega la votación de un consejo de partido en cada uno, y la elección de congresales provinciales, que son seleccionados de acuerdo a la cantidad de votantes que hubo en la última primaria.
La Carta Orgánica establece que el único puesto que debe estar preservado es el de presidente. La distribución de los demás cargos se hará una vez confirmados los consejeros.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario