LA PLATA, Octubre 08, (PUNTO CERO) Se están refaccionando las instalaciones para contar con los requisitos solicitados por Anmat para que los medicamentos que produce puedan venderse a todo el país e incluso en el exterior. Además, se invirtió más de 500 mil pesos en la reparación de las comprimidoras y blisteadoras.
El Laboratorio Central del Ministerio de Salud bonaerense inició este año un proceso de reformas estructurales que le permitirá contar con normas de calidad avaladas por el Anmat, de modo tal que, por primera vez, esa planta contará con una producción de medicamentos que podrá venderse a todas las provincias del país y, además, tendrá la posibilidad de exportar.
El Ministerio de Salud desmiente los rumores que circularon en los medios de comunicación acerca de que la planta platense del Laboratorio había dejado de generar medicamentos. Aclaró además que, al asumir la nueva gestión, encabezada por el ministro Claudio Zin, las tres máquinas para producir comprimidos y las dos blisteadoras para envasarlos no funcionaban.
“A partir de diciembre se repararon las cinco máquinas y se hicieron obras de remodelación edilicia para adaptar el laboratorio a las más altas normas de calidad a nivel nacional”, explicó Sebastián Marotz, actual director del Laboratorio Central ‘Tomás Perón’. Y aclaró que hasta el momento los medicamentos que se hacían en esa planta no contaban con el aval de Anmat (Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica), por lo tanto sólo podían distribuirse a nivel provincial.
“Ahora estamos trabajando con la gente del Instituto Nacional de Medicamentos, perteneciente al Anmat, para adecuar las instalaciones de modo tal que el Laboratorio genere medicamentos de tránsito federal, habida cuenta de que las normativas van avanzando con el correr de los años y en nuestro caso no se habían actualizado desde el año ‘93”, detalló Marotz.
Al respecto, desde el Ministerio de Salud provincial se aclaró que las reformas responden a la necesidad de “actualizar las normativas de producción para no estar 15 años atrasados con respecto a la industria privada”.
Cabe aclarar que las reformas edilicias en marcha para adecuar las instalaciones no impidieron este año producir las 15 especialidades medicinales en las plantas descentralizadas que el Ministerio de Salud provincial posee en Necochea, Bahía Blanca y Berazategui.
En rigor, en diciembre de este año la actual gestión se encontró con un Laboratorio devastado, con máquinas rotas, goteras en los techos, falta de pintura y un extractor de aire que no funcionaba, entre otros problemas graves.
Desde entonces a la fecha se repararon las máquinas para producir medicamentos, lo que demandó una inversión superior al medio millón de pesos, se iniciaron las mejoras edilicias necesarias, se incorporaron profesionales, se compraron 32 computadoras nuevas y 30 impresoras láser.
Planificación inédita
Por otra parte, por primera vez en su historia, el Laboratorio Central comenzó a planificar minuciosamente su producción tanto de medicamentos como de vacunas en función de las necesidades de la Provincia.
Vale decir que las direcciones provinciales de Hospitales, de Medicina Preventiva y de coordinación de Regiones Sanitarias ya efectuaron los requerimientos de medicación para el año que viene en función de la demanda, lo que permitirá producir lo que realmente se va a utilizar, con un criterio funcional a las necesidades de la población, y no ya de un modo intuitivo y arbitrario. De este modo, para 2009, se logrará el objetivo de contar con los medicamentos en tiempo y forma.
Lo que se produjo
En lo que va de este año, el Laboratorio Central Tomás Perón produjo 302.600 dosis de vacuna antirrábica efectuadas por cultivo celular, 284.101 dosis de antirrábica canina, 79.900 dosis de antirrábica humana, 608.700 dosis de BCG, 716.000 dosis de Doble Adulto y 354.600 dosis de tuberculina. Por otra parte, entre enero y septiembre de este año, y contrariamente a los rumores acerca del cese de producción, el Laboratorio Central produjo 213 mil comprimidos de Atenolol, 153 suspensiones pediátricas de amoxicilina 250 mg., 58.270 suspensiones pediátrica cefalexina 250 mg., 846.300 comprimidos de ciprofloxacina 500 mg., 7.212 jarabes de difenhidramina HCL, 46.700 comprimidos de enalapril de 10 mg., 42.100 comprimidos de floconazol de 100 mg., 3.290.360 comprimidos de glibenclamida de 5 mg., 5.856 jarabes ibuprofeno de 200 mg., 15.835 jarabes de mebendazol de 200 mg., 13.300 comprimidos de metformina de 500 mg, 20.588 jarabes paracetamol de 200 mg., 13.900 comprimidos de paracetamol de 500 mg., 32.800 lociones de parmetrina al 1 por ciento, 12.957 frascos de gotas de salbutamol, 11.784 frascos de gotas de sulfato ferroso y 235.300 comprimidos de teofilina de 200 mg. (PUNTO CERO).
El Laboratorio Central del Ministerio de Salud bonaerense inició este año un proceso de reformas estructurales que le permitirá contar con normas de calidad avaladas por el Anmat, de modo tal que, por primera vez, esa planta contará con una producción de medicamentos que podrá venderse a todas las provincias del país y, además, tendrá la posibilidad de exportar.
El Ministerio de Salud desmiente los rumores que circularon en los medios de comunicación acerca de que la planta platense del Laboratorio había dejado de generar medicamentos. Aclaró además que, al asumir la nueva gestión, encabezada por el ministro Claudio Zin, las tres máquinas para producir comprimidos y las dos blisteadoras para envasarlos no funcionaban.
“A partir de diciembre se repararon las cinco máquinas y se hicieron obras de remodelación edilicia para adaptar el laboratorio a las más altas normas de calidad a nivel nacional”, explicó Sebastián Marotz, actual director del Laboratorio Central ‘Tomás Perón’. Y aclaró que hasta el momento los medicamentos que se hacían en esa planta no contaban con el aval de Anmat (Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica), por lo tanto sólo podían distribuirse a nivel provincial.
“Ahora estamos trabajando con la gente del Instituto Nacional de Medicamentos, perteneciente al Anmat, para adecuar las instalaciones de modo tal que el Laboratorio genere medicamentos de tránsito federal, habida cuenta de que las normativas van avanzando con el correr de los años y en nuestro caso no se habían actualizado desde el año ‘93”, detalló Marotz.
Al respecto, desde el Ministerio de Salud provincial se aclaró que las reformas responden a la necesidad de “actualizar las normativas de producción para no estar 15 años atrasados con respecto a la industria privada”.
Cabe aclarar que las reformas edilicias en marcha para adecuar las instalaciones no impidieron este año producir las 15 especialidades medicinales en las plantas descentralizadas que el Ministerio de Salud provincial posee en Necochea, Bahía Blanca y Berazategui.
En rigor, en diciembre de este año la actual gestión se encontró con un Laboratorio devastado, con máquinas rotas, goteras en los techos, falta de pintura y un extractor de aire que no funcionaba, entre otros problemas graves.
Desde entonces a la fecha se repararon las máquinas para producir medicamentos, lo que demandó una inversión superior al medio millón de pesos, se iniciaron las mejoras edilicias necesarias, se incorporaron profesionales, se compraron 32 computadoras nuevas y 30 impresoras láser.
Planificación inédita
Por otra parte, por primera vez en su historia, el Laboratorio Central comenzó a planificar minuciosamente su producción tanto de medicamentos como de vacunas en función de las necesidades de la Provincia.
Vale decir que las direcciones provinciales de Hospitales, de Medicina Preventiva y de coordinación de Regiones Sanitarias ya efectuaron los requerimientos de medicación para el año que viene en función de la demanda, lo que permitirá producir lo que realmente se va a utilizar, con un criterio funcional a las necesidades de la población, y no ya de un modo intuitivo y arbitrario. De este modo, para 2009, se logrará el objetivo de contar con los medicamentos en tiempo y forma.
Lo que se produjo
En lo que va de este año, el Laboratorio Central Tomás Perón produjo 302.600 dosis de vacuna antirrábica efectuadas por cultivo celular, 284.101 dosis de antirrábica canina, 79.900 dosis de antirrábica humana, 608.700 dosis de BCG, 716.000 dosis de Doble Adulto y 354.600 dosis de tuberculina. Por otra parte, entre enero y septiembre de este año, y contrariamente a los rumores acerca del cese de producción, el Laboratorio Central produjo 213 mil comprimidos de Atenolol, 153 suspensiones pediátricas de amoxicilina 250 mg., 58.270 suspensiones pediátrica cefalexina 250 mg., 846.300 comprimidos de ciprofloxacina 500 mg., 7.212 jarabes de difenhidramina HCL, 46.700 comprimidos de enalapril de 10 mg., 42.100 comprimidos de floconazol de 100 mg., 3.290.360 comprimidos de glibenclamida de 5 mg., 5.856 jarabes ibuprofeno de 200 mg., 15.835 jarabes de mebendazol de 200 mg., 13.300 comprimidos de metformina de 500 mg, 20.588 jarabes paracetamol de 200 mg., 13.900 comprimidos de paracetamol de 500 mg., 32.800 lociones de parmetrina al 1 por ciento, 12.957 frascos de gotas de salbutamol, 11.784 frascos de gotas de sulfato ferroso y 235.300 comprimidos de teofilina de 200 mg. (PUNTO CERO).
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