¨Los colores que elegimos representan las cuatro estaciones y resaltan lo más importante que tiene e balneario: la naturaleza¨
La intervención de los arquitectos del IBVA en los Parques Balcarce y Aguer está tomando su definitiva fisonomía con el avance de los trabajos de pintura que se están llevando a cabo.
La paisajista, Andrea Lanzetta, en su primera visita a la ciudad con los trabajos en marcha, hechos realidad fuera del papel en el que se hicieron proyecto, explicó su intención destacando que lo más importante que tuvieron en cuenta a la hora de originar esta intervención fue la verdadera identidad del Balneario y su entorno.
Hablando de las gamas de colores utilizados, la paisajista decía que “lo de los colores empieza a ser una consecuencia; una primera impresión que nos dio el tema del parque y el Balneario, en general, cuando asumimos la tarea de trabajar sobre ellos en la primer visita, que fue en invierno, lo que empezamos a ver era que había gran cantidad de cosas que no estaban conectadas entre sí, entonces empezamos a pensar cómo hacer para que el parque en todo su conjunto tuviera una imagen integral, empezamos desde atrás pensando que si el parque de Tapalqué estaba en el eje de la ciudad, ya que uno entra a Tapalqué y ve la avenida principal y al final está ¨la frutilla del postre¨: los parques con el Balneario, el Camping, la Colonia, en la disposición urbana el parque forma algo muy importante y no solamente eso sino que nos metemos dentro del parque y está atravesado por un arroyo y éste significa mucho más de lo que pasa por dentro del parque”.
¨Al ver qué era Tapalqué -se entusiasmaba la arquitecta-, que significa totoral, al empezar a ver cuál era la cuestión y viendo las cosas que se hacen acá, como por ejemplo Tapalim…, todo esto de la sustentabilidad, la idea de volver a la naturaleza aparecía como primera idea y más que el parque en sí, cuando uno apoya por primera vez un pie acá, ve que está lleno de árboles, algo que es muy bonito. Nuestra idea fue que hay que poner en valor eso, lo natural, y darle una identidad a lo construido, lo hecho por el hombre, de manera que esto no se notara tanto, porque vimos que había cosas pintadas de un montón de colores… entonces, ya que estábamos en lo natural y en lo sustentable pensamos ¿qué es lo que caracteriza al paisaje de la Pampa?, y concluimos en que algo que se nota claramente son las estaciones del año, por esto decidimos dar identidad con estos colores. Con esa idea de las estaciones del año decidimos que cada uno de los sectores del parque que dividimos en cuatro: la parte de la entrada con el Balneario, la parte donde esta el restaurante, la parte de la colonia y la parte del quincho, dijimos: trabajemos con las estaciones del año, si logramos darle uniformidad al color cada sector en sí va a representar a cada estación, pero a la vez los cuatro juntos van a mostrar una totalidad, como nos parecía que un solo color para marcar la estación del año quedaba muy monótono dijimos: trabajemos entre dos colores que puedan significar cada estación y así pasamos al invierno, a la primavera que tiene que ver con los amarillos, con los ocre y el verano que esta relacionado con la gama de bordó y los rojos¨.
¨Entre las cosas que íbamos relevando -detalló la Srta. Lanzetta- entre lo que era el imaginario popular de los colores, era como que saltaban o la primer justificación que tratamos de dar hace un tiempo era de por qué cambiarle el color al cajón, porque consideramos que el Arroyo Tapalqué es de llanura, estos arroyos arrastran tierra y el fondo es de tierra y ésta no es de color celeste sino marrón, el agua no es clorizada y por lo tanto, el tratar de mantener el imaginario de que porque uno pinte de celeste el cajón va a tener característica de agua de piscina no es lo mismo, son aguas diferentes, uno puede elegir en algún momento bañarse en una piscina y en otro bañarse en el arroyo, el arroyo es arroyo y sería cambiarle la identidad”.
Para terminar, la paisajista enfatizó ¨lo que estamos tratando de reforzar con la intervención que hacemos en el parque es la identidad; Tapalqué tiene una identidad como pueblo, tiene una identidad geográfica y una identidad natural y esas son las cosas que deberían poder mostrarse, con estos colores” y concluyó diciendo que una vez pintadas “vemos que las mesas no están, no están los juegos, porque en realidad, lo importante para ver es la naturaleza, o sea: ¿vos qué ves?, el bosque y el agua, las mesas son un equipamiento para que el usuario esté cómodo, pero no es un valor en sí mismo”.
La intervención de los arquitectos del IBVA en los Parques Balcarce y Aguer está tomando su definitiva fisonomía con el avance de los trabajos de pintura que se están llevando a cabo.
La paisajista, Andrea Lanzetta, en su primera visita a la ciudad con los trabajos en marcha, hechos realidad fuera del papel en el que se hicieron proyecto, explicó su intención destacando que lo más importante que tuvieron en cuenta a la hora de originar esta intervención fue la verdadera identidad del Balneario y su entorno.
Hablando de las gamas de colores utilizados, la paisajista decía que “lo de los colores empieza a ser una consecuencia; una primera impresión que nos dio el tema del parque y el Balneario, en general, cuando asumimos la tarea de trabajar sobre ellos en la primer visita, que fue en invierno, lo que empezamos a ver era que había gran cantidad de cosas que no estaban conectadas entre sí, entonces empezamos a pensar cómo hacer para que el parque en todo su conjunto tuviera una imagen integral, empezamos desde atrás pensando que si el parque de Tapalqué estaba en el eje de la ciudad, ya que uno entra a Tapalqué y ve la avenida principal y al final está ¨la frutilla del postre¨: los parques con el Balneario, el Camping, la Colonia, en la disposición urbana el parque forma algo muy importante y no solamente eso sino que nos metemos dentro del parque y está atravesado por un arroyo y éste significa mucho más de lo que pasa por dentro del parque”.
¨Al ver qué era Tapalqué -se entusiasmaba la arquitecta-, que significa totoral, al empezar a ver cuál era la cuestión y viendo las cosas que se hacen acá, como por ejemplo Tapalim…, todo esto de la sustentabilidad, la idea de volver a la naturaleza aparecía como primera idea y más que el parque en sí, cuando uno apoya por primera vez un pie acá, ve que está lleno de árboles, algo que es muy bonito. Nuestra idea fue que hay que poner en valor eso, lo natural, y darle una identidad a lo construido, lo hecho por el hombre, de manera que esto no se notara tanto, porque vimos que había cosas pintadas de un montón de colores… entonces, ya que estábamos en lo natural y en lo sustentable pensamos ¿qué es lo que caracteriza al paisaje de la Pampa?, y concluimos en que algo que se nota claramente son las estaciones del año, por esto decidimos dar identidad con estos colores. Con esa idea de las estaciones del año decidimos que cada uno de los sectores del parque que dividimos en cuatro: la parte de la entrada con el Balneario, la parte donde esta el restaurante, la parte de la colonia y la parte del quincho, dijimos: trabajemos con las estaciones del año, si logramos darle uniformidad al color cada sector en sí va a representar a cada estación, pero a la vez los cuatro juntos van a mostrar una totalidad, como nos parecía que un solo color para marcar la estación del año quedaba muy monótono dijimos: trabajemos entre dos colores que puedan significar cada estación y así pasamos al invierno, a la primavera que tiene que ver con los amarillos, con los ocre y el verano que esta relacionado con la gama de bordó y los rojos¨.
¨Entre las cosas que íbamos relevando -detalló la Srta. Lanzetta- entre lo que era el imaginario popular de los colores, era como que saltaban o la primer justificación que tratamos de dar hace un tiempo era de por qué cambiarle el color al cajón, porque consideramos que el Arroyo Tapalqué es de llanura, estos arroyos arrastran tierra y el fondo es de tierra y ésta no es de color celeste sino marrón, el agua no es clorizada y por lo tanto, el tratar de mantener el imaginario de que porque uno pinte de celeste el cajón va a tener característica de agua de piscina no es lo mismo, son aguas diferentes, uno puede elegir en algún momento bañarse en una piscina y en otro bañarse en el arroyo, el arroyo es arroyo y sería cambiarle la identidad”.
Para terminar, la paisajista enfatizó ¨lo que estamos tratando de reforzar con la intervención que hacemos en el parque es la identidad; Tapalqué tiene una identidad como pueblo, tiene una identidad geográfica y una identidad natural y esas son las cosas que deberían poder mostrarse, con estos colores” y concluyó diciendo que una vez pintadas “vemos que las mesas no están, no están los juegos, porque en realidad, lo importante para ver es la naturaleza, o sea: ¿vos qué ves?, el bosque y el agua, las mesas son un equipamiento para que el usuario esté cómodo, pero no es un valor en sí mismo”.
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