(La Política On Line). Las dos empresas que tienen la concesión en la Ciudad operan con los contratos vencidos desde hace nueve años. La demora en el llamado a licitación respondería a los fuertes intereses político-económicos que se oponen a perder un negocio millonario y sin controles estatales.
Si hay algo que no hacen las empresas Servicio de Tránsito Ordenado –más conocida como STO, de Dakota S.A., vinculada al ex intendente de Buenos Aires, Carlos Grosso- y Servicio de Estacionamiento Controlado –o SEC, perteneciente a BRD S.A.I.C.F.I., de Pablo Moyano- es gala de sus nombres.
Muy por el contrario, las quejas de los vecinos y la inacción de la Auditoría General de la Ciudad, evidencian un negocio bien tapado y que le reporta tres millones de pesos mensuales a las empresas –que operan con el contrato vencido desde hace nueve años, como anunció este medio en otros informes-, contra el pago de un canon irrisorio que apenas alcanza los 20 mil pesos.
Consultado por LPO, Juan Manuel Chavarri, al frente de la asociación “No al parquímetro”, aseguró que “Guillermo Dietrich (subsecretario de Transporte y Tránsito porteño) nos prometió que antes del 15 diciembre, saldría la licitación para los nuevos concesionarios del estacionamiento medido y grúas. Desde 2008 que vienen diciendo que llamarán a licitación ‘la semana que viene’, y ya estamos en 2010”.
A su vez, Chavarri denuncia que “las empresas declaran otra facturación de acarreo que no es la real”, ya que “pueden declarar cualquier cosa sobre las tickeadoras: si bien el negocio de ellos es el acarreo, como los parquímetros no tienen verificación fiscal, pueden dibujar los números sin control”.
La respuesta del PRO
Daniel Amoroso (PRO) estuvo al frente de la Comisión de Tránsito y Transporte entre 2007 y diciembre de 2009, en la Legislatura porteña. Consultado por LPO sobre por qué la Auditoría General de la Ciudad de Buenos Aires no investiga desde 2004 el trabajo de SEC y STO en las calles porteñas, el legislador aseguró que “desde que presidí la comisión, nunca nadie pidió que se auditara”.
“Habría que preguntarle a la oposición por qué no le pidió a la Auditoría que investigara el tema. Nosotros no lo hicimos porque no nos interesa ya que sabemos cómo funciona: desde el Ejecutivo se hizo un relevamiento zona por zona, se convocó a las empresas, se pidieron informes y finalmente se dio impulso a la ley sancionada en noviembre y que establece un sistema similar al de La Plata”, concluyó Amoroso.
El sistema que funciona en La Plata le permite a los conductores reservar un lugar vía telefónica o incluso por Internet. Desde la asociación “No al parquímetro” tienen dudas de su implementación: “Hay que ver si andamos preparados para eso. Si reservo un lugar y hay otro auto, ¿Qué pasa? O te agarrás a las piñas o lo dejás en otro espacio y la grúa te lo lleva”.
Cumbre macrista
Fuentes allegadas al Ejecutivo porteño fueron más autocríticos frente a LPO: “Es verdad, el tema de las licitaciones está demorado y desde la Legislatura no se hizo nada durante 25 meses, pero hay que preguntarle a Dietrich por qué el asunto está parado”.
Según pudo averiguar este medio, en una reunión, tanto Marcos Peña como el jefe de Gobierno Mauricio Macri se mostraron al tanto de las necesidades urgentes que padece la Ciudad en materia de tránsito y del reclamo por “reglas comunes en toda la Capital”, llevado adelante por Chavarri.
La cúpula del oficialismo porteño se empeñaría en demorar la licitación por la puja político-económica que envuelve a las concesiones de grúas y parquímetros. “Hay gente muy influyente que está apostando en el negocio,”, afirma la fuente del Ejecutivo, que además de mencionar Grosso y a Moyano, señala a Gerardo Meyer como uno de los propietarios de la concesión vencida.
Si hay algo que no hacen las empresas Servicio de Tránsito Ordenado –más conocida como STO, de Dakota S.A., vinculada al ex intendente de Buenos Aires, Carlos Grosso- y Servicio de Estacionamiento Controlado –o SEC, perteneciente a BRD S.A.I.C.F.I., de Pablo Moyano- es gala de sus nombres.
Muy por el contrario, las quejas de los vecinos y la inacción de la Auditoría General de la Ciudad, evidencian un negocio bien tapado y que le reporta tres millones de pesos mensuales a las empresas –que operan con el contrato vencido desde hace nueve años, como anunció este medio en otros informes-, contra el pago de un canon irrisorio que apenas alcanza los 20 mil pesos.
Consultado por LPO, Juan Manuel Chavarri, al frente de la asociación “No al parquímetro”, aseguró que “Guillermo Dietrich (subsecretario de Transporte y Tránsito porteño) nos prometió que antes del 15 diciembre, saldría la licitación para los nuevos concesionarios del estacionamiento medido y grúas. Desde 2008 que vienen diciendo que llamarán a licitación ‘la semana que viene’, y ya estamos en 2010”.
A su vez, Chavarri denuncia que “las empresas declaran otra facturación de acarreo que no es la real”, ya que “pueden declarar cualquier cosa sobre las tickeadoras: si bien el negocio de ellos es el acarreo, como los parquímetros no tienen verificación fiscal, pueden dibujar los números sin control”.
La respuesta del PRO
Daniel Amoroso (PRO) estuvo al frente de la Comisión de Tránsito y Transporte entre 2007 y diciembre de 2009, en la Legislatura porteña. Consultado por LPO sobre por qué la Auditoría General de la Ciudad de Buenos Aires no investiga desde 2004 el trabajo de SEC y STO en las calles porteñas, el legislador aseguró que “desde que presidí la comisión, nunca nadie pidió que se auditara”.
“Habría que preguntarle a la oposición por qué no le pidió a la Auditoría que investigara el tema. Nosotros no lo hicimos porque no nos interesa ya que sabemos cómo funciona: desde el Ejecutivo se hizo un relevamiento zona por zona, se convocó a las empresas, se pidieron informes y finalmente se dio impulso a la ley sancionada en noviembre y que establece un sistema similar al de La Plata”, concluyó Amoroso.
El sistema que funciona en La Plata le permite a los conductores reservar un lugar vía telefónica o incluso por Internet. Desde la asociación “No al parquímetro” tienen dudas de su implementación: “Hay que ver si andamos preparados para eso. Si reservo un lugar y hay otro auto, ¿Qué pasa? O te agarrás a las piñas o lo dejás en otro espacio y la grúa te lo lleva”.
Cumbre macrista
Fuentes allegadas al Ejecutivo porteño fueron más autocríticos frente a LPO: “Es verdad, el tema de las licitaciones está demorado y desde la Legislatura no se hizo nada durante 25 meses, pero hay que preguntarle a Dietrich por qué el asunto está parado”.
Según pudo averiguar este medio, en una reunión, tanto Marcos Peña como el jefe de Gobierno Mauricio Macri se mostraron al tanto de las necesidades urgentes que padece la Ciudad en materia de tránsito y del reclamo por “reglas comunes en toda la Capital”, llevado adelante por Chavarri.
La cúpula del oficialismo porteño se empeñaría en demorar la licitación por la puja político-económica que envuelve a las concesiones de grúas y parquímetros. “Hay gente muy influyente que está apostando en el negocio,”, afirma la fuente del Ejecutivo, que además de mencionar Grosso y a Moyano, señala a Gerardo Meyer como uno de los propietarios de la concesión vencida.
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