(Pilar de Todos). El Defensor de Pueblo de Pilar quiere asegurarse sobre la calidad del agua. Estudios privados indican valores físico químicos por encima de lo permitido por el Código Alimentario Argentino.
La Defensoría del Pueblo de Pilar le solicitó a la Secretaría de Salud de la comuna que “extreme los controles” sobre el servicio prestado por la empresa Sudamericana de Aguas.
La Defensoría del Pueblo de Pilar le solicitó a la Secretaría de Salud de la comuna que “extreme los controles” sobre el servicio prestado por la empresa Sudamericana de Aguas, concesionaria de la red de agua en parte del Distrito.
En el escrito al que tuvo acceso Pilar de Todos, la Defensoría hace referencia a una denuncia de la concejal de la Coalición Cívica Marcela Campagnoli, radicada no solamente en la Defensoría local, sino ante el ombudsman de la Nación, en donde se señala que “ los exámenes de Laboratorios tomados en distintos barrios dan muestras que no se cumple con el Código Alimentario Argentino y las normas vigentes Ley 13.133, haciendo referencia además la denunciante a que no existe el Ente de Control local, que el Occaba no controla y el usuario no tiene donde efectuar los reclamos”.
Distintos estudios realizados en urbanizaciones cerradas y complejos comerciales de Pilar dan cuenta de que el agua no es apta para el consumo humano, ya que transgrede, en algunos casos, los límites permitidos por el Código Alimentario Argentino para Arsénico y Nitratos.
“La denunciante —sigue fundamentando la Defensoría— hace referencia a que la ingesta (de agua con presencia de Arsénico y Nitratos) es peligrosa especialmente para los lactantes y las mujeres embarazadas, como así también poder tener algún efecto laxante para aquellas personas que no estén acostumbradas”.
La Defensoría, además, indica que “potabilizar el agua es un deber de la empresa que la distribuye, pero también es responsabilidad de las autoridades públicas efectuar los controles pertinentes y en su caso intimar y sancionar a los responsables de incumplir con lo normado”.
Es en ese marco en el que le reclama a Salud, área que tiene bajo su órbita a la Dirección de Bromatología, que “extreme” los controles para asegurar la calidad del agua.
La empresa Sudamericana de Aguas, de todos modos, asegura que el fluido que distribuye está dentro de lo reglamentado por la Ley, aunque aducen que no rige el Código Alimentario Argentino para el caso de la concesión de Pilar, sino de otras normativas que permiten niveles de Arsénico y Nitratos que no son violados por la compañía.
La Defensoría del Pueblo de Pilar le solicitó a la Secretaría de Salud de la comuna que “extreme los controles” sobre el servicio prestado por la empresa Sudamericana de Aguas.
La Defensoría del Pueblo de Pilar le solicitó a la Secretaría de Salud de la comuna que “extreme los controles” sobre el servicio prestado por la empresa Sudamericana de Aguas, concesionaria de la red de agua en parte del Distrito.
En el escrito al que tuvo acceso Pilar de Todos, la Defensoría hace referencia a una denuncia de la concejal de la Coalición Cívica Marcela Campagnoli, radicada no solamente en la Defensoría local, sino ante el ombudsman de la Nación, en donde se señala que “ los exámenes de Laboratorios tomados en distintos barrios dan muestras que no se cumple con el Código Alimentario Argentino y las normas vigentes Ley 13.133, haciendo referencia además la denunciante a que no existe el Ente de Control local, que el Occaba no controla y el usuario no tiene donde efectuar los reclamos”.
Distintos estudios realizados en urbanizaciones cerradas y complejos comerciales de Pilar dan cuenta de que el agua no es apta para el consumo humano, ya que transgrede, en algunos casos, los límites permitidos por el Código Alimentario Argentino para Arsénico y Nitratos.
“La denunciante —sigue fundamentando la Defensoría— hace referencia a que la ingesta (de agua con presencia de Arsénico y Nitratos) es peligrosa especialmente para los lactantes y las mujeres embarazadas, como así también poder tener algún efecto laxante para aquellas personas que no estén acostumbradas”.
La Defensoría, además, indica que “potabilizar el agua es un deber de la empresa que la distribuye, pero también es responsabilidad de las autoridades públicas efectuar los controles pertinentes y en su caso intimar y sancionar a los responsables de incumplir con lo normado”.
Es en ese marco en el que le reclama a Salud, área que tiene bajo su órbita a la Dirección de Bromatología, que “extreme” los controles para asegurar la calidad del agua.
La empresa Sudamericana de Aguas, de todos modos, asegura que el fluido que distribuye está dentro de lo reglamentado por la Ley, aunque aducen que no rige el Código Alimentario Argentino para el caso de la concesión de Pilar, sino de otras normativas que permiten niveles de Arsénico y Nitratos que no son violados por la compañía.
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