BUENOS AIRES, Enero 25, (PUNTO CERO-La Política OnLine) El gobierno anunciaría la semana próxima las refacciones urgentes. El tema lo maneja directamente Mauricio Macri con Andrés Ibarra, el funcionario a cargo. Hasta ahora sólo se informó de convocatorias para 30 establecimientos –sobre un total de más de 300 escuelas con problemas- y los plazos se acortan.
Fue una de las grandes promesas de Macri y para cumplirla apeló a una mecanismo muy cuestionado: la contratación directa. Pero tiene una explicación, el inminente inicio de clases le pone plazos de urgencia a la reparación de las escuelas de la Ciudad. Es comprensible que el jefe de Gobierno no quiera iniciar su gestión con episodios de techos caídos en las aulas, como sucedió.
La Política Online rastreó el avance de estas obras y los recursos que se destinan a su concreción. Por primera vez, en un gobierno que hasta ahora se ha mostrado muy abierto en términos de informar sobre sus actos se encontró con evasivas o sencillamente el silencio.
¿El motivo? Es un secreto a voces que la ciudad está financieramente en rojo y la pregunta es de dónde saldrán los fondos necesarios para financiarlas.
La ley 2565 que votó la Legislatura el 29 de diciembre pasado no indica cual será el monto máximo que se destinará a esta tarea, pero extra oficialmente se habla de una cifra ubicada entre los 150 y los 250 millones.
En su momento se habló de emitir un bono, pero el mecanismo de doble lectura que obliga la Constitución porteña para tomar deuda y lo engorroso de su proceso legal, llevó a los funcionarios a descartar esa vía.
La ley se limita a decir que los fondos se obtendrán del cincuenta por ciento del presupuesto de inversiones previsto para la Dirección General de Infraestructura del Ministerio de Educación y podrán afectarse subsidios, subvenciones, legados, donaciones, expropiaciones y herencias vacantes.
Lo que no está claro es si efectivamente en los lugares mencionados existe el dinero necesario para las obras.
El tema lo maneja bajo siete llaves el subsecretario de Gestión Económica, Financiera y Administrativa de Recursos del Ministerio de Educación, Andrés Ibarra, un ex gerente General de Boca Juniors y amigo de Macri. Las contrataciones las realiza la Dirección General de Infraestructura y equipamiento.
Las contrataciones
Hasta hoy viernes oficialmente el gobierno de la Ciudad, según informa en su página web, sólo convocó a 17 contrataciones (ver nota linkeada), sobre un total de 347 establecimientos escolares con problemas edilicios, según un informe oficial.
El promedio de las obras es de 60 días una vez iniciadas, lo que indica que en el mejor de los casos finalizarán con las clases ya empezadas.
Una fuente del gobierno porteño explicó a La Política Online que “nos encontramos con una situación mucho más grave de lo previsto. Esto es lo que está generando las demoras en los anuncios de las obras, porque se quiere anunciar sólo lo que verdaderamente se va a poder hacer”.
Además de las reparaciones urgentes, desde el Ministerio de Educación también prometen que comenzarán a girar fondos para terminar cuanto antes las obras para construir escuelas nuevas, que con el cambio de gobierno quedaron paralizadas.
El tema es que ni en el Ministerio de Hacienda, ni en la Legislatura, ni en la citada Subsecretaría a cargo de Andrés Ibarra, pudo La Política Online conseguir al momento, información precisa sobre el monto, origen y destino de los fondos disponibles para las refacciones.
Si bien la ejecución de la obra corresponde al Ejecutivo, fue la Legislatura que aprobó la ley de emergencia edilicia de las escuelas públicas porteñas, otorgándole al gobierno los superpoderes necesarios para la contratación directa de obras, sin pasar por los mecanismos habituales de control.
La iniciativa se lanzó luego que el ministro de Educación, Mariano Narodowski, informara a la Legislatura, antes de asumir el cargo, que la Ciudad vive un "colapso edilicio", porque sobre 535 edificios escolares relevados, 347 (el 67%) se encontraban en situación grave o crítica.
Los principales problemas, según informó Narodowski son las fallas en las redes de electricidad y gas, el hacinamiento en las aulas y la antigüedad de los edificios: "De 729 establecimientos, 380 tienen entre 50 y 100 años, y 115 tienen entre 100 y 200 años", explicó Narodowski.
Se votó entonces la mencionada iniciativa para darle al gobierno porteño las herramientas necesarias para avanzar urgente con las obras. Se acordó que si las obras a realizar eran hasta $ 3.000.000, el Ejecutivo podía hacerlas acortando los tiempos de las licitaciones públicas.
Las obras de hasta 600.000 pesos podrían ser licitadas directamente entre privados, mientras que se autorizaban las contrataciones directas por hasta $ 600.000 y se permitía comprar bienes y servicios en forma directa por hasta $ 100.000.
Quedaron fuera de la norma las obras para hacer escuelas nuevas y se resolvió que se crearía una comisión de seguimiento para controlar las compras y contrataciones realizadas por el integrada por cinco diputados: dos del macrismo y tres de la oposición. Hasta ahora esta comisión no ha dado indicios de su existencia.
Fue una de las grandes promesas de Macri y para cumplirla apeló a una mecanismo muy cuestionado: la contratación directa. Pero tiene una explicación, el inminente inicio de clases le pone plazos de urgencia a la reparación de las escuelas de la Ciudad. Es comprensible que el jefe de Gobierno no quiera iniciar su gestión con episodios de techos caídos en las aulas, como sucedió.
La Política Online rastreó el avance de estas obras y los recursos que se destinan a su concreción. Por primera vez, en un gobierno que hasta ahora se ha mostrado muy abierto en términos de informar sobre sus actos se encontró con evasivas o sencillamente el silencio.
¿El motivo? Es un secreto a voces que la ciudad está financieramente en rojo y la pregunta es de dónde saldrán los fondos necesarios para financiarlas.
La ley 2565 que votó la Legislatura el 29 de diciembre pasado no indica cual será el monto máximo que se destinará a esta tarea, pero extra oficialmente se habla de una cifra ubicada entre los 150 y los 250 millones.
En su momento se habló de emitir un bono, pero el mecanismo de doble lectura que obliga la Constitución porteña para tomar deuda y lo engorroso de su proceso legal, llevó a los funcionarios a descartar esa vía.
La ley se limita a decir que los fondos se obtendrán del cincuenta por ciento del presupuesto de inversiones previsto para la Dirección General de Infraestructura del Ministerio de Educación y podrán afectarse subsidios, subvenciones, legados, donaciones, expropiaciones y herencias vacantes.
Lo que no está claro es si efectivamente en los lugares mencionados existe el dinero necesario para las obras.
El tema lo maneja bajo siete llaves el subsecretario de Gestión Económica, Financiera y Administrativa de Recursos del Ministerio de Educación, Andrés Ibarra, un ex gerente General de Boca Juniors y amigo de Macri. Las contrataciones las realiza la Dirección General de Infraestructura y equipamiento.
Las contrataciones
Hasta hoy viernes oficialmente el gobierno de la Ciudad, según informa en su página web, sólo convocó a 17 contrataciones (ver nota linkeada), sobre un total de 347 establecimientos escolares con problemas edilicios, según un informe oficial.
El promedio de las obras es de 60 días una vez iniciadas, lo que indica que en el mejor de los casos finalizarán con las clases ya empezadas.
Una fuente del gobierno porteño explicó a La Política Online que “nos encontramos con una situación mucho más grave de lo previsto. Esto es lo que está generando las demoras en los anuncios de las obras, porque se quiere anunciar sólo lo que verdaderamente se va a poder hacer”.
Además de las reparaciones urgentes, desde el Ministerio de Educación también prometen que comenzarán a girar fondos para terminar cuanto antes las obras para construir escuelas nuevas, que con el cambio de gobierno quedaron paralizadas.
El tema es que ni en el Ministerio de Hacienda, ni en la Legislatura, ni en la citada Subsecretaría a cargo de Andrés Ibarra, pudo La Política Online conseguir al momento, información precisa sobre el monto, origen y destino de los fondos disponibles para las refacciones.
Si bien la ejecución de la obra corresponde al Ejecutivo, fue la Legislatura que aprobó la ley de emergencia edilicia de las escuelas públicas porteñas, otorgándole al gobierno los superpoderes necesarios para la contratación directa de obras, sin pasar por los mecanismos habituales de control.
La iniciativa se lanzó luego que el ministro de Educación, Mariano Narodowski, informara a la Legislatura, antes de asumir el cargo, que la Ciudad vive un "colapso edilicio", porque sobre 535 edificios escolares relevados, 347 (el 67%) se encontraban en situación grave o crítica.
Los principales problemas, según informó Narodowski son las fallas en las redes de electricidad y gas, el hacinamiento en las aulas y la antigüedad de los edificios: "De 729 establecimientos, 380 tienen entre 50 y 100 años, y 115 tienen entre 100 y 200 años", explicó Narodowski.
Se votó entonces la mencionada iniciativa para darle al gobierno porteño las herramientas necesarias para avanzar urgente con las obras. Se acordó que si las obras a realizar eran hasta $ 3.000.000, el Ejecutivo podía hacerlas acortando los tiempos de las licitaciones públicas.
Las obras de hasta 600.000 pesos podrían ser licitadas directamente entre privados, mientras que se autorizaban las contrataciones directas por hasta $ 600.000 y se permitía comprar bienes y servicios en forma directa por hasta $ 100.000.
Quedaron fuera de la norma las obras para hacer escuelas nuevas y se resolvió que se crearía una comisión de seguimiento para controlar las compras y contrataciones realizadas por el integrada por cinco diputados: dos del macrismo y tres de la oposición. Hasta ahora esta comisión no ha dado indicios de su existencia.
En Educación son concientes de la importancia del tema y el peso que tuvo la promesa de Macri de solucionar cuanto antes este problema. Por ello no se descarta que la próxima semana el propio jefe de Gobierno despeje las dudas sobre el avance de esta iniciativa con una conferencia de prensa en una de las obras que ya están en marcha. (PUNTO CERO La Política OnLine).
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