BUENOS AIRES, Junio 22, (PUNTO CERO-La Política On Line) El ex diputado y yerno del ex presidente confirmó que el peronismo no kirchnerista trabaja en un frente opositor y que cuentan con el respaldo de Duhalde. Habló de la “sangría” en las filas oficialistas y afirmó: “trabajamos para ganarle la elección a Kirchner”.
Afirmado como ladero de Francisco De Narváez, el ex diputado Gustavo Ferri trabaja hoy por fuera de la estructura que el kirchnerismo instaló sobre el PJ, situación que comparte con esa gran masa peronista a la que hoy se podría catalogar como “disidente”.
Yerno de Eduardo Duhalde, es una palabra más que autorizada para hablar de la intimidad y la actualidad política del ex presidente, a quien espera poder adjuntar al menos como colaborador en el armado de ese frente con el que, según sus propias, espera “ganarle la elección a Kirchner”.
Viendo el marco político del PJ, ¿Cómo se diferencia hoy entre peronismo y kirchnerismo?
Finalmente parece que los acontecimientos se han dado tan rápido que comenzó a darse la sangría que sabíamos que iba a darse. En este caso, Kirchner lo único que trata de lograr es buscar apoyo donde puede y tendría que haber hecho esto hace mucho tiempo. Haber alineado y conducido al peronismo orgánicamente, todo el mundo se lo pidió. Él en algún punto hasta denostó la figura de muchos compañeros a los que hoy les va a pedir apoyo.
Usted convivió como diputado con el kirchnerismo. ¿Cómo fue esa experiencia?
A mi me tocó vivir como diputado nacional dos del bloque oficial del que después me fui y nunca, en ningún caso, atendió a ningún diputado y muchísimo menos reuniones con diputados nacionales o senadores. En estas últimas semanas hemos visto que se junta hasta con los legisladores provinciales, que si uno le pregunta un poquito en profundidad no sabe ni sus nombres.
Usted acá señala que Kirchner busca apoyo donde puede. ¿Dónde cree usted que todavía puede y donde no?
Básicamente donde va a lograr cierto respaldo en algún sector del peronismo tradicional, donde producto de la gestión necesitan de él todavía. Ahí va a buscar el apoyo que está necesitando porque tiró por la borda todos sus proyectos transversales y toda esa movida con la que nos vino empujando a los peronistas a un rinconcito y hoy fijate que ha tomado dentro del partido un protagonismo que no tenía.
De hecho, el PJ se transformó en una especie de centro de operaciones.
Exactamente. Pero la verdad que ha logrado eso con el apoyo de algunos gobernadores e intendentes que lo necesitan. En este sistema en el que nos ha metido también Kirchner en el que utiliza la caja y el resto tiene que acudir indefectiblemente a él. Te pongo por caso la provincia de Buenos Aires, que tiene un déficit gigante y que si no fuese por el dinero que la Nación le gira no tendría ni para pagar sueldos. Por eso todo el mundo le rinde pleitesía.
Conoce el ámbito legislativo. ¿La discusión de las retenciones puede dejar en evidencia estas fracturas?
Es una coyuntura, no quiere decir que en todos los casos actúen igual. Acá va a primar en los legisladores el espíritu de buscar una salida y no buscar quien tuvo la culpa. Por lo cual, me parece que tampoco se va a hacer de esto un pase abierto a otros bloques. Lo cierto es que se produjo un quiebre. A muchos legisladores, incluso algunos kirchneristas de los llamados de “paladar negro”, sus representados les piden que hagan lo que tienen que hacer y eso los pone en un brete.
¿Lo que señala es que la situación agraria, más allá de cuestiones partidarias o políticas, derivó en abrir otras dos veredas: a favor o en contra de las retenciones?
A nosotros nos parece que esto no tiene que ser así y en la Cámara hay diputados buscando una salida consensuada, un proyecto que contenga y contemple todas las partes comprendidas en este documento. No hacer hincapié entre los que se van o los que se quedan, que evidentemente está pasando. La sangría se va a dar producto de los errores que ha cometido el gobierno en este tema.
La crisis agraria, aunque aún no terminó, ya dejó algunos vencedores y vencidos. Entre los primeros podrían estar Schiaretti o Reutemann, quienes jugaron fuerte a favor del campo. ¿Puede salir de ahí algún líder para un frente opositor de corte peronista?
Si. No esos solamente sino en otros compañeros que no son tan conocidos y que hace mucho vienen trabajando, incluso, desde antes del tema de las retenciones que, más allá de la gravedad, es un tema coyuntural. Acá lo que hay es un montón de gente que no tiene nada que ver con Kirchner en cuanto a lo ideológico, en el cual me incluyo, y que desde hace tiempo hemos abandonado ese espacio que lo único que hace es manejar a partir de la prebenda. Políticamente, Kirchner no ha contenido nunca a nadie y es la política del garrote o la chequera. La verdad no ha generado afecto en los compañeros, sólo temor o conveniencia.
Hoy lo que se ve es que el kirchnerismo sigue haciendo pie ancho en el PJ bonaerense. Llevado a un plano netamente estratégico, ¿la opción es empezar a armar desde el interior?
Más que una estrategia, vuelvo a repetir, tiene que ver mucho con la coyuntura. Este es un problema que explota en el interior y viene a tomar fuerza después de mucho tiempo acá en Buenos Aires. La verdad es que la propia coyuntura hizo que esta situación que usted describe se fuera dando. Los intendentes del conurbano que creían que estaban exentos de este problema, te cito el caso de Lomas de Zamora, se encontraron el domingo pasado con un cacerolazo en la plaza de gente que no tiene una hectárea ni conoce el monto de las retenciones. Lo que hay es un descontento con la forma que se ha encarado esta crisis y con la falta de diálogo que dejó de manifiesto las fisuras que tiene este modelo.
Por ser yerno de Eduardo Duhalde la pregunta es inevitable. ¿Habló con él en las últimas horas? ¿Cómo está llevando todo este tema?
Como siempre, muy cauto y trabajando con mucha gente para lograr una salida. Ayer estuvimos en Mar del Plata con un montón de gente tratando de encontrarle soluciones y reunidos con entidades rurales de la provincia, había siete legisladores nacionales, algunos provinciales.
Recién hablaba de un enorme grupo de peronistas que hoy está fuera del armado kirchnerista. ¿Lo ve a Duhalde encabezando o liderando ese frente?
No sé si la palabra es líder. Seguramente va a darnos una mano como hizo siempre. Con el conocimiento que él tiene y la relación con un montón de compañeros en la provincia y en el país, es una persona importante en cualquier tipo de armado.
¿No pesa sobre él la mochila de ser un “piloto de tormentas”?
Afirmado como ladero de Francisco De Narváez, el ex diputado Gustavo Ferri trabaja hoy por fuera de la estructura que el kirchnerismo instaló sobre el PJ, situación que comparte con esa gran masa peronista a la que hoy se podría catalogar como “disidente”.
Yerno de Eduardo Duhalde, es una palabra más que autorizada para hablar de la intimidad y la actualidad política del ex presidente, a quien espera poder adjuntar al menos como colaborador en el armado de ese frente con el que, según sus propias, espera “ganarle la elección a Kirchner”.
Viendo el marco político del PJ, ¿Cómo se diferencia hoy entre peronismo y kirchnerismo?
Finalmente parece que los acontecimientos se han dado tan rápido que comenzó a darse la sangría que sabíamos que iba a darse. En este caso, Kirchner lo único que trata de lograr es buscar apoyo donde puede y tendría que haber hecho esto hace mucho tiempo. Haber alineado y conducido al peronismo orgánicamente, todo el mundo se lo pidió. Él en algún punto hasta denostó la figura de muchos compañeros a los que hoy les va a pedir apoyo.
Usted convivió como diputado con el kirchnerismo. ¿Cómo fue esa experiencia?
A mi me tocó vivir como diputado nacional dos del bloque oficial del que después me fui y nunca, en ningún caso, atendió a ningún diputado y muchísimo menos reuniones con diputados nacionales o senadores. En estas últimas semanas hemos visto que se junta hasta con los legisladores provinciales, que si uno le pregunta un poquito en profundidad no sabe ni sus nombres.
Usted acá señala que Kirchner busca apoyo donde puede. ¿Dónde cree usted que todavía puede y donde no?
Básicamente donde va a lograr cierto respaldo en algún sector del peronismo tradicional, donde producto de la gestión necesitan de él todavía. Ahí va a buscar el apoyo que está necesitando porque tiró por la borda todos sus proyectos transversales y toda esa movida con la que nos vino empujando a los peronistas a un rinconcito y hoy fijate que ha tomado dentro del partido un protagonismo que no tenía.
De hecho, el PJ se transformó en una especie de centro de operaciones.
Exactamente. Pero la verdad que ha logrado eso con el apoyo de algunos gobernadores e intendentes que lo necesitan. En este sistema en el que nos ha metido también Kirchner en el que utiliza la caja y el resto tiene que acudir indefectiblemente a él. Te pongo por caso la provincia de Buenos Aires, que tiene un déficit gigante y que si no fuese por el dinero que la Nación le gira no tendría ni para pagar sueldos. Por eso todo el mundo le rinde pleitesía.
Conoce el ámbito legislativo. ¿La discusión de las retenciones puede dejar en evidencia estas fracturas?
Es una coyuntura, no quiere decir que en todos los casos actúen igual. Acá va a primar en los legisladores el espíritu de buscar una salida y no buscar quien tuvo la culpa. Por lo cual, me parece que tampoco se va a hacer de esto un pase abierto a otros bloques. Lo cierto es que se produjo un quiebre. A muchos legisladores, incluso algunos kirchneristas de los llamados de “paladar negro”, sus representados les piden que hagan lo que tienen que hacer y eso los pone en un brete.
¿Lo que señala es que la situación agraria, más allá de cuestiones partidarias o políticas, derivó en abrir otras dos veredas: a favor o en contra de las retenciones?
A nosotros nos parece que esto no tiene que ser así y en la Cámara hay diputados buscando una salida consensuada, un proyecto que contenga y contemple todas las partes comprendidas en este documento. No hacer hincapié entre los que se van o los que se quedan, que evidentemente está pasando. La sangría se va a dar producto de los errores que ha cometido el gobierno en este tema.
La crisis agraria, aunque aún no terminó, ya dejó algunos vencedores y vencidos. Entre los primeros podrían estar Schiaretti o Reutemann, quienes jugaron fuerte a favor del campo. ¿Puede salir de ahí algún líder para un frente opositor de corte peronista?
Si. No esos solamente sino en otros compañeros que no son tan conocidos y que hace mucho vienen trabajando, incluso, desde antes del tema de las retenciones que, más allá de la gravedad, es un tema coyuntural. Acá lo que hay es un montón de gente que no tiene nada que ver con Kirchner en cuanto a lo ideológico, en el cual me incluyo, y que desde hace tiempo hemos abandonado ese espacio que lo único que hace es manejar a partir de la prebenda. Políticamente, Kirchner no ha contenido nunca a nadie y es la política del garrote o la chequera. La verdad no ha generado afecto en los compañeros, sólo temor o conveniencia.
Hoy lo que se ve es que el kirchnerismo sigue haciendo pie ancho en el PJ bonaerense. Llevado a un plano netamente estratégico, ¿la opción es empezar a armar desde el interior?
Más que una estrategia, vuelvo a repetir, tiene que ver mucho con la coyuntura. Este es un problema que explota en el interior y viene a tomar fuerza después de mucho tiempo acá en Buenos Aires. La verdad es que la propia coyuntura hizo que esta situación que usted describe se fuera dando. Los intendentes del conurbano que creían que estaban exentos de este problema, te cito el caso de Lomas de Zamora, se encontraron el domingo pasado con un cacerolazo en la plaza de gente que no tiene una hectárea ni conoce el monto de las retenciones. Lo que hay es un descontento con la forma que se ha encarado esta crisis y con la falta de diálogo que dejó de manifiesto las fisuras que tiene este modelo.
Por ser yerno de Eduardo Duhalde la pregunta es inevitable. ¿Habló con él en las últimas horas? ¿Cómo está llevando todo este tema?
Como siempre, muy cauto y trabajando con mucha gente para lograr una salida. Ayer estuvimos en Mar del Plata con un montón de gente tratando de encontrarle soluciones y reunidos con entidades rurales de la provincia, había siete legisladores nacionales, algunos provinciales.
Recién hablaba de un enorme grupo de peronistas que hoy está fuera del armado kirchnerista. ¿Lo ve a Duhalde encabezando o liderando ese frente?
No sé si la palabra es líder. Seguramente va a darnos una mano como hizo siempre. Con el conocimiento que él tiene y la relación con un montón de compañeros en la provincia y en el país, es una persona importante en cualquier tipo de armado.
¿No pesa sobre él la mochila de ser un “piloto de tormentas”?
El dramatismo al que se ha llegado es producto de algunas declaraciones pero acá no hay ningún peligro de nada. Hay peligro económico si no se soluciona el problema pero estamos a tiempo. Las instituciones siguen funcionando por más que el kirchnerismo haga todo lo posible para deteriorarlas. Así que no hay necesidad de ningún piloto de tormentas. Nosotros estamos trabajando para ganarle la elección a Kirchner. (PUNTO CERO-La Política On Line).
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