JOSE C. PAZ, Agosto 03, (PUNTO CERO) Recientement se divulgó una noticia según la cual bajó el 26% la matricula de la carrera docente. Según explica el mismo artículo la violencia escolar, las agresiones, los conflictos en las instituciones educativas son la causa de este decrecimiento. La experiencia nos demuestra, sin embargo, que en aquellas instituciones educativas en donde se aplican métodos de resolución de conflictos entre los miembros de la misma, comienzan a decrecer los índices de violencia con el compromiso de difundir e implementar los distintos métodos.
En su libro Neurobiología de la Agresividad, David Huertas aventura algunas causas de la violencia. 'El individualismo, la falta de solidaridad, la masificación urbana, la contaminación acústica o atmosférica o el aprendizaje de la violencia por imitación pueden explicar en parte esta situación'. Además, si añadimos a esta sociedad de frustraciones el consumo de drogas psicoactivas, se produce un resultado explosivo. También se ve favorecida por la impunidad y tolerancia con la que se asumen determinados actos violentos, 'como la violencia en el deporte o contra los animales', sostiene la psiquiatra Eudoxia Gay. Coordinadora del área de salud mental del Hospital Reina Sofía de España quien señala también:
“La crueldad es la violencia organizada y orquestada socialmente y que tiene mucho que ver con el sentido de la vida. Por ejemplo, todas las religiones se sienten perseguidas, pero también son perseguidoras', afirma Francisco Pereña. En este sentido, el sentimiento de culpa sería una conquista moral en la tendencia de hacer daño. “
En la escuela, la conducta agresiva parece estar relacionada con las variables afectivas y de relación familiar, como puedan ser el rechazo de los padres, el castigo agresivo y la carencia de identificación con los padres. Algunas víctimas crecen en la convicción de que el empleo de la agresividad es el mejor camino para conseguir lo que quieren.
En los procesos de interacción en el aula debemos tener en cuenta los factores motivacionales, el autoconcepto académico, el ánimo con que se afronta la tarea y los factores afectivos. Cuando un individuo se incorpora a un grupo social se dan dos tendencias: el deseo de dominio y el de afiliación.
El fenómeno de agresión entre iguales podría deberse a la desintegración que sufre el niño cuando ingresa por primera vez en el medio escolar. Su mundo, el familiar, queda relegado y aparece su deseo de ser y hacer acrecentado por la novedad y el ambiente. Pero su deseo y actividad se encuentran con los de otros y provocan un conflicto que se resolverá en función de su temperamento e historia personal.
Una forma de disminuir los daños que la violencia puede causar sería, sin ser un recetario, las siguientes:
· Mayor presencia del personal docente y un trabajo con los alumnos respecto de los objetivos que tienden a cuidar y respetar su propio ámbito escolar.
· Contener la institución educativa y el personal jerárquico en todos sus niveles.
· Estimular a colaborar, integrar y actuar cooperativamente mediante talleres de reflexión y de intercambio como así también la puesta en marcha de jornadas voluntarias de trabajo tendientes a mejorar y embellecer las instalaciones.
· Incluir a la comunidad educativa toda, y sobretodo a los padres, para que se sienta identificada con la tarea escolar.
· Proyectar películas y videos invitando a los distintos sectores de la sociedad, repartir folletos
· Organizar charlas y debates, foros y seminarios.
Una tarea puede consistir en no perder ese ejercicio de reflexión de volver la mirada atrás para proyectar nuevas formas de tratar al alumno/a, para eso hay que echar mano de nuestros monólogos interiores y la autobiografía, para reconocernos y poder construir una nueva moral dentro del aula.
Conviene actuar y reflexionar, hacer y rehacer el trato diario con los estudiantes con actitudes de moderación, aceptación y respeto buscando esa necesaria restauración de la convivencia en el aula y la escuela para desarrollar nuestra tarea especifica: ENSEÑAR.
Lic. Prof. CARLOS VICTOR ZALAZAR SUAREZ
Director
Centro de Formación Profesional Nº 402
Centro de Formación Profesional (DIPREGEP 7323)
En su libro Neurobiología de la Agresividad, David Huertas aventura algunas causas de la violencia. 'El individualismo, la falta de solidaridad, la masificación urbana, la contaminación acústica o atmosférica o el aprendizaje de la violencia por imitación pueden explicar en parte esta situación'. Además, si añadimos a esta sociedad de frustraciones el consumo de drogas psicoactivas, se produce un resultado explosivo. También se ve favorecida por la impunidad y tolerancia con la que se asumen determinados actos violentos, 'como la violencia en el deporte o contra los animales', sostiene la psiquiatra Eudoxia Gay. Coordinadora del área de salud mental del Hospital Reina Sofía de España quien señala también:
“La crueldad es la violencia organizada y orquestada socialmente y que tiene mucho que ver con el sentido de la vida. Por ejemplo, todas las religiones se sienten perseguidas, pero también son perseguidoras', afirma Francisco Pereña. En este sentido, el sentimiento de culpa sería una conquista moral en la tendencia de hacer daño. “
En la escuela, la conducta agresiva parece estar relacionada con las variables afectivas y de relación familiar, como puedan ser el rechazo de los padres, el castigo agresivo y la carencia de identificación con los padres. Algunas víctimas crecen en la convicción de que el empleo de la agresividad es el mejor camino para conseguir lo que quieren.
En los procesos de interacción en el aula debemos tener en cuenta los factores motivacionales, el autoconcepto académico, el ánimo con que se afronta la tarea y los factores afectivos. Cuando un individuo se incorpora a un grupo social se dan dos tendencias: el deseo de dominio y el de afiliación.
El fenómeno de agresión entre iguales podría deberse a la desintegración que sufre el niño cuando ingresa por primera vez en el medio escolar. Su mundo, el familiar, queda relegado y aparece su deseo de ser y hacer acrecentado por la novedad y el ambiente. Pero su deseo y actividad se encuentran con los de otros y provocan un conflicto que se resolverá en función de su temperamento e historia personal.
Una forma de disminuir los daños que la violencia puede causar sería, sin ser un recetario, las siguientes:
· Mayor presencia del personal docente y un trabajo con los alumnos respecto de los objetivos que tienden a cuidar y respetar su propio ámbito escolar.
· Contener la institución educativa y el personal jerárquico en todos sus niveles.
· Estimular a colaborar, integrar y actuar cooperativamente mediante talleres de reflexión y de intercambio como así también la puesta en marcha de jornadas voluntarias de trabajo tendientes a mejorar y embellecer las instalaciones.
· Incluir a la comunidad educativa toda, y sobretodo a los padres, para que se sienta identificada con la tarea escolar.
· Proyectar películas y videos invitando a los distintos sectores de la sociedad, repartir folletos
· Organizar charlas y debates, foros y seminarios.
Una tarea puede consistir en no perder ese ejercicio de reflexión de volver la mirada atrás para proyectar nuevas formas de tratar al alumno/a, para eso hay que echar mano de nuestros monólogos interiores y la autobiografía, para reconocernos y poder construir una nueva moral dentro del aula.
Conviene actuar y reflexionar, hacer y rehacer el trato diario con los estudiantes con actitudes de moderación, aceptación y respeto buscando esa necesaria restauración de la convivencia en el aula y la escuela para desarrollar nuestra tarea especifica: ENSEÑAR.
Lic. Prof. CARLOS VICTOR ZALAZAR SUAREZ
Director
Centro de Formación Profesional Nº 402
Centro de Formación Profesional (DIPREGEP 7323)
www.emfp402.com.ar (PUNTO CERO).
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