Una tendencia en crecimiento en la ciudad de Buenos Aires en las construcciones de edificios de departamentos nuevos es evitar las instalaciones de gas que son reemplazadas por las eléctricas, por razones casi estrictamente económicas: bajar costos, practicidad y acortar la pérdida de rentabilidad en el sector en los últimos años.
Suponer que estas decisiones se basan en el cuidado del medio ambiente, contaminación ambiental, la ecología, la sustentabilidad y los peligros de accidentes con monóxido de carbono, no son los argumentos fundamentales, salvo honrosas excepciones, como siempre, Debería, pero en realidad, no lo es.
“Es un hecho en la ciudad de Buenos Aires, el uso de instalaciones eléctricas en reemplazo de las de gas”, explicó el arquitecto Mario Goldman, del Consejo Profesional de Arquitectura y Urbanismo -CPAU.
Recalcó que “en vez de instalar caños, todo se limita a poner un enchufe”.
La realidad es que “el comprador de un inmueble deberá seguramente pagar más, pero esta variante es más económica para los constructores, que evitan tener que planear las ventilaciones y los correspondientes medidores de gas”, aseguró.
Goldman sostuvo “existe cierto riesgo de contaminación en un departamento de un ambiente en el que se hace una cocina a gas integrada al living, pero siendo eléctrica se la evita”.
Actualmente, este reemplazo es muy utilizado en la construcción de inmuebles chicos de uno o dos ambientes y en oficinas.
Mientras persistan las tarifas subsidiadas no se generarán problemas mayores. La cuestión es qué hacer ante cortes de luz, sobre todo cuando el consumo es elevado, en verano, sobre todo. (Asteriscos Tv).
Suponer que estas decisiones se basan en el cuidado del medio ambiente, contaminación ambiental, la ecología, la sustentabilidad y los peligros de accidentes con monóxido de carbono, no son los argumentos fundamentales, salvo honrosas excepciones, como siempre, Debería, pero en realidad, no lo es.
“Es un hecho en la ciudad de Buenos Aires, el uso de instalaciones eléctricas en reemplazo de las de gas”, explicó el arquitecto Mario Goldman, del Consejo Profesional de Arquitectura y Urbanismo -CPAU.
Recalcó que “en vez de instalar caños, todo se limita a poner un enchufe”.
La realidad es que “el comprador de un inmueble deberá seguramente pagar más, pero esta variante es más económica para los constructores, que evitan tener que planear las ventilaciones y los correspondientes medidores de gas”, aseguró.
Goldman sostuvo “existe cierto riesgo de contaminación en un departamento de un ambiente en el que se hace una cocina a gas integrada al living, pero siendo eléctrica se la evita”.
Actualmente, este reemplazo es muy utilizado en la construcción de inmuebles chicos de uno o dos ambientes y en oficinas.
Mientras persistan las tarifas subsidiadas no se generarán problemas mayores. La cuestión es qué hacer ante cortes de luz, sobre todo cuando el consumo es elevado, en verano, sobre todo. (Asteriscos Tv).
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