sábado, noviembre 12, 2011

Fallas en Yacyretá: denuncian que la represa “tiembla” si funciona a pleno

Los directores de Argentina y Paraguay denunciaron en notas internas que las turbinas Siemens de la represa binacional no funcionan correctamente y obligan a trabajar al 80 por ciento de su capacidad. Pero luego lo relativizaron públicamente. Se cruzan culpas por supuestos errores en la coordinación de las turbinas con la elevación de la cota, promocionada por ambos gobiernos.
El escándalo terminó de estallar ayer cuando el director interino paraguayo de Yacyretá, Miguel Fulgencio Rodríguez, admitió que las veinte turbinas de la represa tienen fallas. Pero luego comenzaron las contradicciones. Rodríguez afirmó que las fallas fueron ocasionadas por operar las turbinas fuera de la cota de diseño. Una posición totalmente contraria a la que asumió la cúpula de la Yacyretá tiempo atrás cuando en una furiosa nota de protesta a la fabricante, la Voith Siemens, denunció que los inconvenientes fueron ocasionados por problemas de diseño de las máquinas.
“Es cierta la información”, se limitó a responder Rodríguez ayer cuando fue consultado por la prensa de Paraguay los inconvenientes que se vienen presentando con los generadores de Yacyretá. El funcionario recordó que la primera máquina de Yacyretá comenzó a operar en 1994 y la última en 1998, pero “a cota reducida”.
“¿Qué quiere decir eso? No se alcanzó nunca la cota de diseño final, que era la cota 83, que se llegó ahora, en febrero de 2011. Entonces, ese funcionamiento inadecuado, inapropiado, produjo lo que se conoce como tubo de aspiración y de descarga, daños en los materiales por fatiga”, agregó el funcionario paraguayo poniendo el acento en la demora de décadas para concretar la cota de la represa prevista en el diseño original y que finalmente se alcanzó este año.
Sin embargo, contradiciéndose, Rodríguez reconoció que “se rompieron materiales” o componentes de las turbinas por el “dimensionamiento inapropiado” de los mismos para el tipo de esfuerzo al que estaban siendo sometidos. “Hay error de diseño, que después de 36 años nos damos cuenta. Esa es la realidad”, apuntó.
Lo cierto es que el 2 de abril de este año el director argentino del Ente Binacional Yaciretá (EBY), Oscar Thomas, a través de la nota 46611, alertó a Voith Siemens sobre la presunción de “un grave defecto de diseño”, en los generadores de la central. “Nos encontramos operando en un 80 por ciento de la potencia esperaba”, afirmó entonces Thomas, responsabilizando luego a la firma “por los eventuales daños y perjuicios de tal situación”.
Sin embargo ayer, luego que trascendieran las declaraciones del funcionario paraguayo publicadas por el diario ABC, Thomas apeló a la agencia oficial Télam para desmentirse a si mismo. En el despacho de Télam, el director argentino afirmó que “Yacyretá está produciendo la cantidad de energía esperada en su diseño original” y explicó que había decidido “corregir imprecisiones publicadas en algunos medios en las que se hace referencia a “problemas en las turbinas”.
Es probable que el propio ministro Julio de Vido haya exigido a Thomas que lance el desmentido, ya que de confirmarse que Yacyretá no puede operar más que al 80% de su capacidad por falla sen las turbina el gobierno quedaría en una posición embarazosa, ya que hizo de la obra de la elevación de la cota un símbolo de la recuperación de obras estratégicas a nivel energético. Con el agravante que la noticia llega justo cuando el gobierno empieza una política de reducción de subsidios a la energía y más que nunca necesita demostrar que tiene capacidad de generación para abastecer la demanda.

Vibraciones
Fuentes vinculadas al sector energético afirmaron al diario ABC que en estos momentos, en que el embalse ya llegó a la cota 83, en la que las máquinas deberían estar funcionando a potencia máxima de entre 155 a 160 MW, solo están alcanzando entre 125 a 130 MW “pues no soportan más el caudal del agua y potencia por las vibraciones, inestabilidad y temor a mayores daños o colapso de los componentes críticos”.
El propio Rodríguez señaló que cuando las turbinas funcionan a máxima potencia “la represa vibra” y explicó que la reparación de las 20 turbinas que registran fallas se realizará en un período de entre tres y cinco años. O sea que el anuncio de una Yacyretá operando a máxima capacidad deberá demorarse nuevamente, pese a que se concluyó la obra de la elevación de la cota.
Rodríguez reconoció además que Siemens “no cobrará por la ingeniería de diseño y reparación pero sí por materiales y maquinarias empleados”. Y en lo que acaso es la explicación que se esconde detrás de los argumentos de Thomas, su par paraguayo explicó que el río Paraná tiene actualmente un causal extraordinario, lo que significa que la energía que entrega Yacyretá es de 20.000 gigawatts por año, a pesar de trabajar al 80% de su capacidad.

La reparación de las turbinas
El director paraguayo explicó el plan de acción para reparar las turbinas: “La reparación provisoria, para lograr los 155 MW, que es la potencia de diseño, y luego vendrá la solución definitiva”.
Señaló que además de las fallas citadas se detectaron también problemas en el aislamiento de los generadores. “Estos aisladores fueron fabricados por la Ansaldo, que hoy está trabajando en solucionar el inconveniente, Es decir, actualmente están en la hidroeléctrica la gente de la Voith, Ansaldo y los rusos que tienen a su cargo el mantenimiento de los generadores. Tenemos a mucha gente aquí, como correspondía y como se debió hacer hace tiempo”, apuntó.
Thomas matizó esas afirmaciones, en un intento por bajarle el tono a la situación. “En realidad, sólo se registraron algunas contingencias técnicas que ya están controladas porque la EBY requirió a Voith que garantice el funcionamiento correcto y eficiente de las turbinas a cota de diseño en 83 metros sobre el nivel del mar, en virtud de que las mismas estuvieron operando durante 15 años a nivel de cota 76”.
“Estas contingencias técnicas se refieren a un sector del revestimiento metálico de la cámara que contiene a las turbinas. Son sólo esos revestimientos los que han registrado un envejecimiento acelerado por operación del embalse a 7 metros menos de la cota de proyecto durante ese período de 15 años”, matizó el funcionario sin hacer referencia a los otros problemas más de fondo que hacen “temblar” a la represa y que según su par paraguayo reclamarán trabajos de hasta 5 años para solucionarse.
Luego Thomas se embarcó en las habituales auto elogios de los funcionarios: destacando la decisión de “la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, y al presidente Fernando Lugo, que permitió dar por concluido el proceso de llenado del embalse en cota 83 el pasado 25 de febrero de 2011” y subrayó que “a fines de 2011, Yacyretá habrá superado por primera vez los 20.000 GWh de generación anual, lo que significará un incremento de 7,2% por encima de los registros de 2010”. Claro que no aclaró que esta mejora se debió al crecimiento del caudal del río Paraná y no a que la represa esté trabajando al 80 por ciento de su capacidad, al menos según la opinión de su colega paraguayo. (La Política OnLine).

No hay comentarios.: