El jefe de Gobierno se molestó por su participación en un acto con De la Sota y De Narváez en Córdoba luego de rechazar firmar un acuerdo por escrito. Pero no pasó de un enojo y el acuerdo sigue encaminado. El ex ministro minimizó la discusión pero aclara que con Macri sólo lo une “un acuerdo distrital”.
Mauricio Macri y Roberto Lavagna no cerraron la puerta a un acuerdo para compartir lista en Capital Federal, luego de la bronca del jefe de Gobierno por su participación en el acto del 1 de mayo en Córdoba, que lideró José Manuel De la Sota y asistieron Francisco De Narváez y Hugo Moyano.
Ese día los referentes del peronismo no kirchnerista firmaron un documento de coincidencias básicas. Lavagna lo subscribió y el lunes, dos días antes, se había negado a firmar uno parecido con Macri.
El jefe de Gobierno no soportó el desplante y lo hizo saber con declaraciones en los diarios, pero no en el encuentro que ayer al mediodía tuvo cara a cara con Lavagna.
“El acto de Córdoba no fue el tema central. Se entiende que la construcción de una alianza entre dos fuerzas políticas de cultura y experiencia distintas tiene estas cosas”, señalaron cerca de Lavagna.
“A él le hubiese gustado una foto entre ellos dos antes que la de Córdoba, son sólo chisporroteos. Para nosotros está todo superado”, agregaron.
El ex ministro no ocultó su asombro esta mañana cuando leyó los diarios, porque aseguraba que el jefe de Gobierno no le había mostrado tanto malestar cuando lo tuvo frente a frente.
En el macrismo no minimizan la bronca pero también descartan pegar el portazo. “Son idas y vueltas que habrá en estos 40 días, pero todo avanza bien”, aclararon.
En el PRO juran tener encuestas que le dan ganadora a Gabriela Michetti con Lavagna en la cancha pero insisten en la necesidad de hacer “una apertura” a otros espacios, aún en el territorio que dominan. “Lo que tiene que entender Lavagna es que si acordamos con él no es con nadie más”, insisten.
Para los operadores del economista el acuerdo con Macri es “distrital” entre “un frente de centro”, donde el jefe de Gobierno haría su aporte para Capital Federal. No más que eso.
Así quedó traslucido el fin de semana cuando el ex ministro habló de un frente con el PRO adentro pero liderando el espacio. Fue justo después de la represión de Macri en el Hospital Borda, una "foto" que Lavagna dijo no haberle gustado.
“El árbol no tiene que tapar el bosque. Ambos no tenían relación y ahora hacen una radiografía similar de lo que ocurre en la Argentina en el corto plazo”, concluyen los lavagnistas. (La Política OnLine).
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