lunes, agosto 21, 2006

MERCEDES: Controversias en el Concejo Deliberante. Acusaciones de una concejal derivan en incidentes y sesión interrumpida.

MERCEDES, Agosto 21, (PUNTO CERO-El Nuevo Cronista) Algunos observadores aseguran que la edil Marisa Defelippe estaba intentando pedir la palabra, pero que su par Mariano Castelucci le tenía la mano. Otros dicen que no. Lo cierto es que el lunes en un momento de la sesión, Defelippe solicitó la palabra y denunció que la esposa del concejal David Valerga había sustraído documentación de la Secretaría de Desarrollo Social y la había llevado al Ministerio de Desarrollo Social de la Nación. Así porque sí. Sin que se estuviese hablando de nada vinculado con ese tema.David Valerga, el presidente del Cuerpo, dudó. No entendía bien el porqué de la acusación, ni tampoco el fundamento o motivación de realizar una denuncia de esas características en el recinto.
Lo cierto es que le terminó solicitando al vicepresidente del cuerpo, doctor Juan Pablo López, que lo reemplace en la presidencia. Muchos esperaban que en su bancada fustigue a la edil Defelippe, pero sólo anunció que se retiraba de la sesión.
"Uno se cansa, como trata de preservar las formas sobre todo lo que es el Concejo Deliberante, uno está muy preocupado; el Concejo Deliberante se ha visto como una institución seria en la cual se está tratando de trabajar seriamente, donde se puedan debatir las ideas seriamente, los proyectos, lo que piensan los mercedinos, lo que piensan los concejales, que para eso fuimos electos. Cuando del otro lado hay una actitud agresiva, de tratar de bastardear todo lo que se debate, de llevarlo todo a la agresión personal; uno se termina cansando", explicaría al día siguiente.
Tras la decisión de Valerga de abandonar el recinto se generó una breve discusión entre la concejal y la esposa sindicada como responsable de haber sustraído documentación. Ante esta suerte de caos generalizado de la sesión, el concejal Martín Zubeldía mocionó suspenderla, cosa que fue aceptada por mayoría.
En teoría la sesión se reanudaría el martes a las 20, pero ese día sólo se hicieron presentes algunos concejales oficialistas, ningún opositor. Entonces no hubo quórum para sesionar.Ya antes se había realizado un encuentro entre los presidentes de bloque en el cual desde la oposición cuestionaron duramente la actitud de Marisa Defelippe.

Desde Mercedes
Mejor se recordó que antes del incidente también había tenido palabras fuertes para con el concejal Miguel Angel "Toto" Etchegaray. Juan Montoya recibió los cuestionamientos del comportamiento de Defelippe estoicamente y aceptó las críticas vertidas. El acuerdo fue sesionar el miércoles a partir de las 19.30 horas.

Freno de entrada.
Una vez iniciada la sesión y tras aclararse el desencuentro del martes, el presidente del Cuerpo dio inicio a la sesión y, casi instantáneamente, Defelippe pidió la palabra y explicó que quería leer una nota a raíz de los sucesos del lunes en los cuales había recibido agresiones verbales.
El presidente del Cuerpo le recordó entonces que el motivo de la sesión era discutir sobre los expedientes presentados y dispuestos para ese día. "¿Usted quiere presentar un proyecto?", le preguntó Valerga. Marisa insistió con que solamente quería leer una nota y tuvo como respuesta una invitación a que la nota sea presentada por secretaría y los dichos de Valerga fueron aceptados por los bloques.
A partir de ahí todo fue tranquilo, administrativo y previsible. Una sesión sin disputas, ni reality show. Al final de la sesión, "Pancho" Torres, quien se había mostrado preocupado por los sucesos, comentó: "Esperemos que esto siga así". Lo mismo sostuvieron otros concejales. Ahora habrá que ver qué sucede.

Habla de un acuerdo de palabra con los demás presidentes de bloque.
Juan Montoya pide más respeto por la investidura del intendente.
El concejal del FPV oficialista ve necesaria una nueva etapa en la relación entre los integrantes del Cuerpo Legislativo. El martes, tras la sesión interrumpida, hubo una reunión para acordar la "no agresión".
La sesión del lunes debió ser interrumpida y culminó el miércoles, pero en el día sándwich que fue el martes -y en el que se dijo que seguiría la sesión pero no se daría quórum de común acuerdo entre los bloques opositores- se hizo una reunión de presidentes de cada una de las bancadas para reflexionar sobre los incidentes sucedidos que motivaron la suspensión de la ordinaria. Juan Montoya, concejal del bloque del Frente Para la Victoria, fue uno de los presentes en ese intento de acuerdo, y reconoció que esto que ha sucedido no le hace bien a nadie por lo que se arribó a un acuerdo de no agresión.
"Lamentablemente las sesiones del Concejo se estaban tornando a mi modo de ver un poco desprolijas. Es lamentable porque caemos en boca de toda la población, ya que somos elegidos por la gente para legislar. Esto lo hemos charlado el día martes con los presidentes de los otros bloques y hemos llegado a un acuerdo, por más que cada uno defienda su postura, de no agredir a las otras personas, como se ha dado en varias sesiones. Además hay falta de respeto hacia la investidura del intendente, y un montón de cosas que no le hacen bien ni al Concejo ni a ninguno de los bloques", contó Juan Montoya sobre lo sucedido y aseguró que entiende personalmente que este acuerdo se ha cumplido tras el paso de la reanudación de la sesión el último miércoles.

Una mala imagen.
Montoya asegura que estos conflictos llegan al ciudadano común y le dejan una imagen que no es adecuada sobre las instituciones como la que integra ni en definitiva de la democracia misma. "Yo ingresé elegido por el pueblo, y pienso que la sociedad espera otra cosa de la dirigencia política y creo tras la reunión con los presidentes de los bloques que esto todos lo tienen claro. Cada uno va a discutir su posición pero con la altura que se merece.
Es buena la discusión política, pero sin agravios y sin que se ponga en boca de la gente como que en el Concejo Deliberante estamos haciendo barbaridades y no legislar como debemos", comentó Montoya.
Para el edil, se perfila una nueva etapa en las relaciones entre los ediles: "Esa es la idea y así nos hemos comprometido. No hemos firmado nada pero hemos dado nuestra palabra. Y esto de hecho se vio en la sesión cuando se reanudó. Ojalá que se siga así", auguró Juan Montoya.Para el concejal oficialista es válido además el planteo de la falta de respeto hacia la investidura del intendente en las sesiones: "Se ha dicho de todo. Se viene dando y a veces lo que pasó el otro día, que se tuvo que suspender la sesión, es lo que colma el vaso como se dice. Pero a esto se le pone un fin, cada uno tendrá las responsabilidades que asumió en este compromiso de palabra. Esperamos que las cosas sigan mejorando con el compromiso de cada uno. Y el disenso que siga existiendo porque es bueno, pero en buenos términos", concluyó Montoya.

Concejales opinan sobre los incidentes de la sesión suspendida.
Una "triste" agresión "injustificada".
Comentan sus sensaciones varios ediles: Luis Colao, de la UCR; Eduardo Cerulli, del PJ Mercedes Mejor; y Claudia Lucero, del ARI. Por su parte, David Valerga habla de "efectos colaterales". "La ligó mi esposa", asegura.
El lunes hubo elementos que hicieron que la sesión sea olvidable, aunque se trataron temas de mucha importancia, como fue la aprobación de la Ordenanza de Residuos Sólidos, aunque cerca de la medianoche, la sesión debió suspenderse por incidentes y se reanudaría dos días más tarde.

Varios ediles dieron su opinión sobre lo que pasó.
"Se deja entrever que acá el problema es el Concejo, pero no todos los concejales actuamos de la misma manera ni todos los bloques hacemos las cosas igual. Estas son sólo cuestiones personales entre algunos concejales y no tenemos que permitir que la institución se vea resentida por eso. Hay quienes deben ponerse a la altura de la circunstancia y no puede ser que se sufran agresiones, porque venimos a trabajar en pos de una ciudad distinta, jamás podemos avalar la agresión injustificada", dijo el concejal de la Unión Cívica Radical, Luis Colao.
Por su parte, Eduardo Cerulli, del PJ Mercedes Mejor, comentó: "Se pueden debatir y rebatir ideas, pero no agraviar. Cuando entra el agravio no se puede seguir. Así nos sentamos como enemigos para pelarnos y eso no conduce a nada. Los agravios personales no se pueden quitar. El hombre es esclavo de sus palabras y fue muy triste lo que presenciamos el día lunes".
"Esto tiene que permitirnos hacer un examen de conciencia a cada uno y ver de qué manera actuamos. Cada uno puede hacer y decir lo que se le ocurra pero hay una cuestión de responsabilidad en el medio, de ver hasta dónde llegamos. Hablar de sanciones no viene al caso porque hay que ver qué tan maduro es cada uno. Lo que pasó es bajo y despreciable y con cosas así se pierde el punto central, que es la discusión de los problemas de la gente", dijo por su parte la concejal del ARI, Claudia Lucero.Por último, David Valerga, presidente del Concejo, comentó: "Desde el 10 de diciembre del año pasado, la gente del selvismo ha entrado en un espiral de agresión, de difamación hacia todo el equipo de gente que está trabajando en este lugar, como son los concejales Diego Aguilar Mazzuca, Stella Dicatarina y Nancy Parodi", y resaltó que esta lucha en la sesión del lunes tuvo "efectos colaterales".
"También la ligó mi esposa, en dichos y expresiones de la concejal Marisa Defelippe, y que son totalmente erróneos. Estábamos constatando la denuncia que ella supuestamente desarrolló. Hay que tratar de preservar las formas sobre todo lo que es el Concejo Deliberante. Uno está muy preocupado y el Concejo Deliberante se ha visto como una institución seria en la cual se está tratando de trabajar seriamente, donde se puedan debatir las ideas seriamente, los proyectos, lo que piensan los mercedinos, lo que piensan los concejales, que para esto fuimos electos. Pero del otro lado hay una actitud agresiva, de tratar de bastardear todo lo que se debate, de llevarlo todo a la agresión personal", aseguró el presidente del Concejo.

Crónica de lo que pasó antes de la interrupción.
Quedó ratificada la ordenanza para tratamiento de los residuos.
Se ratificaron dos ordenanzas para trabajar en Tomás Jofré que habían sido vetadas por el intendente Carlos Selva. También la del tratamiento integral de residuos sólidos. Hubo un importante pedido a IOMA.
Este lunes se intentó concluir la primera sesión ordinaria del mes de agosto y la misma, luego del debate y la definición de importantes temas como el tratamiento de los residuos de la ciudad, debió ser suspendida tras una acalorada discusión entre una edil oficialista y una integrante de la familia del presidente del Concejo, David Valerga, que estaba entre el público.La sesión fue extensa y tres proyectos de ordenanza vetados por el Ejecutivo dieron el puntapié inicial a la discusión: uno por el tema de la planta de tratamiento de residuos y otros dos por la población de Tomás Jofré con una ordenanza sobre habilitaciones comerciales y un estudio para mejoras en la zona con el trabajo de profesionales y la elaboración de un plan estratégico para el polo gastronómico. Todos estos proyectos fueron ratificados por la mayoría de los ediles de los bloques opositores, que no avalaron los vetos de Carlos Selva.
La ordenanza que se llevó la mayor parte del tiempo de los debates, con más de una hora de discusión en el recinto, fue la del tratamiento de los residuos sólidos, que finalmente fue ratificada al igual que las demás. "Ahora con el aval provincial, porque el gobernador Felipe Solá ingresó un proyecto donde le da un plazo de 6 meses a las comunas bonaerenses, y también habla de la construcción de plantas de tratamiento integral, en la misma línea del acción que el proyecto nuestro está orientado", destacó David Valerga, tras la sesión en la que terminó aprobándose este importante proyecto con su ratificación.

"Cuestiones mezquinas".
Consultado este edil, presidente del Concejo y uno de los autores de la ordenanza, sobre si esta ha sido una suerte de victoria personal en este tema, recordó: "Yo hice una carta pública en su momento, haciendo un llamado porque entendía que podía llegar un veto. La idea es que la sociedad en su conjunto se comprometa para tener la separación de origen en el mismo domicilio, para luego pasar a la recolección y tratamiento. Pero luego esto se terminó desvirtuando, y ahora no lo entiendo como un triunfo personal porque creo que no se entendió el mensaje: si el problema pasaba por una cuestión de plazos nos podíamos haber sentado a conversar para alargarlos, pero no estuvo esa actitud y hubo otras cuestiones mezquinas, e incluso se plantean otras alternativas para el tratamiento en el veto.
Esperemos que el paso de los días haga que se termine este debate, ya que no se ve una decisión política del intendente de llevar adelante este tema, que ha sido logrado gracias al trabajo de mucha gente durante tantos años".

Pedido al IOMA.
Por otra parte, en la misma sesión del lunes y con respecto a la petición particular de la vecina Mónica Quiroga, a quien IOMA local no atendió con premura su caso, se aprobó una resolución dirigida al presidente de IOMA en La Plata con el pedido de capacitación para el personal y una mejor atención, con una solicitud para que se adhieran los distintos Concejos Deliberantes de la provincia.
También el lunes hubo respuestas a varios pedidos de informes. Entre otras cuestiones el proyecto de la UCR que pedía informes sobre el pozo que se produjo en las obras de avenida 29 entre 40 y 42 fue parte de la discusión. Justamente cuando se estaba discutiendo la respuesta a un pedido de informes sobre el trabajo de asistencia se debió suspender la sesión, cerca de la medianoche, cuando Juan Pablo López reemplazó en la presidencia a Valerga tras su retiro del recinto y luego el concejal Martín Zubeldía propuso suspender la sesión porque el clima no era de lo mejor y esto fue avalado. (PUNTO CERO-El Nuevo Cronista).

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