ESTEBAN ECHEVERRIA, Febrero 02, (PUNTO CERO-Inforegión) Antes de ayer el funcionario del Ministerio de Desarrollo Humano envió una nota agraviante a Info Región, que constituyó un paso más en sus intentos recurrentes por condicionar a este medio. Le molestó que aún no lo consideren un candidato con posibilidades de ganar la intendencia de Echeverría, y eso desató una nueva operación contra el diario.
“Con relación al distrito de Esteban Echeverría y en particular a mi persona, lamento profundamente la falta de seriedad periodística en el tratamiento de la información del medio periodístico de esa Universidad”, reza con bastante indignación y una buena cuota de desprecio por la tarea de informar, el texto encendido que el funcionario, desde su cómodo despacho -a pocos metros de la Casa Rosada- envió a Info Región, con copia al Subsecretario de Medios de la Presidencia de la Nación.
El hombre, en su misiva, reclama seriedad, pero en el fondo, él y nosotros sabemos, presiona una vez más, insiste, vuelve a buscar caminos desde donde incidir y condicionar el trabajo periodístico de un medio independiente. En el fondo, él y nosotros sabemos, pretende que Info Región se sume a su campaña para quedarse con la intendencia de Esteban Echeverría. Un sueño ridículo que tal vez haya alumbrado a la luz de las fuertes y permanentes críticas que este medio formula a la gestión de Alberto Groppi y que a un improvisado en política lo puede llevar a pensar equivocadamente: “Si critican al que yo critico, entonces me apoyan a mí”.
Tal vez esa idea distorsionada del rol que tienen los medios independientes, o quizás los nervios de la campaña que se inicia y que no lo encuentra bien parado, o sus ansias desmedidas de llegar más allá de donde recomienda su piné, o simplemente su enano fascista, su pequeño Goebbels, lo lleven a sobredimensionar el lugar de poder que ostenta como Secretario de Medios de Comunicación del Ministerio de Desarrollo Humano de la Nación para intentar digitar el contenido de un medio de comunicación regional.
Lo cierto es que Fernando Gray –de él se trata- en la tarde de ayer buscó, una vez más, recorrer un camino que le permita ejercer el control del contenido periodístico de Info Región.
Ya había probado con sugerencias verbales, advertencias un poco más enérgicas, movidas pseudo seductoras y hasta la invocación de apellidos resonantes para condicionar a este diario, que siempre resultaron intentos fallidos.
Obstinado, ayer recayó en su obsesión, y tal vez haya cometido su peor error: firmó de puño y letra una nota en la que despotrica contra el medio y su contenido, a la que adjuntó una fotocopia de una nota publicada el lunes con un texto subrayado y una fotocopia de un gráfico que él atribuye a una consultora de primer nivel y que supuestamente pertenece a un informe “confidencial y reservado”, que sin embargo se encargó de repartir.
Pero ¿qué es lo que ofende tanto a Gray? ¿Qué es lo que lo empuja a tales niveles de encono con este medio? ¿Qué lo hace cometer el error de aumentar su presión sobre el diario y poner su firma a una nota agraviante y provocativa, que además se preocupó de reforzar con sendas comunicaciones telefónicas?
La frase que despierta su furia es la siguiente: “Groppi, como figura pública, ya tiene el liderazgo en los sondeos de opinión donde, al menos por el momento, no aparece otro competidor serio”.
Sin dudas, leer y releer la frase y luego compararla con la preocupación que despertó en el Secretario de Comunicación de un ministerio nacional que se encarga de la asistencia social y humanitaria de los argentinos más necesitados, justo cuando las secuelas de Tucumán aún duelen y cuando Santiago del Estero atraviesa una crisis humanitaria que requiere el auxilio gubernamental, no puede menos que invitar a formular dos reflexiones.
Primero, es inevitable razonar que hay un funcionario nacional que exige seriedad, pero que no es serio. ¿O acaso es serio el apriete a un medio como consecuencia de que no lo considera a él un candidato con posibilidades a nueve meses de los comicios? Del mismo modo que no es serio que ese mismo funcionario utilice su cargo para direccionar ayuda y planes sociales al distrito que sueña con gobernar, a contramano de la prescindencia con la que Alicia Kirchner viene manejando las políticas sociales desde que asumió por primera vez el Ministerio. Ni fue seria su grácil voltereta para cruzar en horas, en medio de una guerra sin cuartel, el territorio que separaba al entorno íntimo de Chiche Duhalde –del que formaba parte- del redil kirchnerista que hoy integra, no bien advirtió cuál podía ser el resultado de la batalla.
Segunda reflexión: de qué sería capaz este pequeño hombre si en lugar de estar encargado de las relaciones con los medios fuera quien controlara la función ejecutiva de cualquiera de los niveles del Estado. Para ser más claros: si así reacciona ante esa frase con el poder que tiene, ¿cuánto más grave podría ser su accionar sobre un medio si tuviese más poder y recibiera una crítica directa a su eventual gestión?
¿Hasta dónde sería capaz de llegar un Gray intendente si un medio denuncia o critica su desempeño?Claudio Decastelli (PUNTO CERO-Inforegión).
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