ESTEBAN ECHEVERRIA, Mayo 15, (PUNTO CERO-Inforegión) La incursión de Alberto Groppi en los fastos peronistas resultó una respuesta anticipada a la adhesión del PJ y la mesa de unidad del kirchnerismo a la candidatura de Fernando Gray. Una iniciativa que reconoce la inspiración de los jóvenes G y siembra dudas sobre la corriente Encuentro Groppista que alienta Ana María Resia. Si la información es poder, Alberto Groppi tuvo en apariencias el caudal suficiente de ella para convertir el recordatorio del 88º natalicio de Eva Duarte de Perón en un acto del vecinalismo y al que terminó adhiriendo las 62 organizaciones peronistas que, en verdad, debieron ser los anfitriones del mitin que tuvo lugar el pasado 7 de mayo en el primer piso del Sindicato de Municipales.
Pocas horas después, el concejal justicialista Ángel Camilleri asumía que la mesa de unidad de dirigentes del kirchnerismo en la que se sienta también el PJ podría respaldar la candidatura a Intendente del vocero del ministerio de Desarrollo Social, Fernando Gray.
La irrupción de Groppi en los fastos peronistas estaba prevista de antemano pero no del modo que ocurrió. Ya el mismo martes al mediodía y en un acto oficial de la Municipalidad en tributo a la mítica esposa del General Perón, el Intendente había resuelto que Martín Rodríguez, subsecretario de Tierras, se convirtiese en el funcionario que lo encabece.
El golpe de mano del vecinalismo sobre el deshilachamiento del justicialismo tiene sin embargo escaso significado fuera del microclima que se empecinan en prefabricar quienes se encuentran embarcados de forma definitiva en el proceso electoral. Aún cuando formalmente el inicio de la campaña esté previsto para el próximo 30 de julio.
La repercusión del acto obtuvo impacto hacia dentro del oficialismo, enfrascado en un soterrado debate sobre los pasos a seguir, ahora que la amenaza de una disputa abierta en las urnas se ha hecho carne en sus principales dirigentes. Allí y luego de la peronización del discurso de Groppi alentada por los jóvenes G, parece haber quedado rezagada la corriente interna prohijada por Ana María Resia y tutelada por el secretario Legal y Técnico, Marcos Sánchez Closs.
Al calor de una victoria que no parece de momento definitiva, desde ese sector dejaron trascender recién ahora un episodio que atesoraron durante un mes y como una forma de canalizar su disgusto por no haber sido parte del acto de lanzamiento a la arena política de uno de los funcionarios preferidos de la esposa del Intendente. “Se pasaron de vueltas y llevaron a un imitador de Kirchner como gran atracción”, soltó la fuente.
Contrastaron ese dato con la adhesión lograda para el acto de las “62” de parte del diputado nacional Carlos Kunkel. También con el modesto desempeño que tuvo esa misma noche la presentación en el Luna Park de la Corriente Peronista Bonaerense (COPEBO), que vio desgranarse durante las horas previas la lista de invitados que había pergeñado. Entre ellos, el titular del Anses, Sergio Massa, y Fernando Suárez del Partido Participación Popular.
La preocupación del edil kirchnerista Daniel Saavedra por la misiva de Kunkel, sumó otro motivo de júbilo entre los jóvenes G, quienes confiaron que lograron un acercamiento con el legislador durante el lanzamiento de la Junta Grande de la Mesa Sindical K de Almirante Brown el pasado 27 de abril.
Saavedra, alineado con Gray, suma tanto desconcierto como su mentor quien insiste en peregrinar por despachos oficiales con una versión subrayada y señalizada del libro “Nunca Más” mediante el que intentaría vincular a Groppi con la represión ilegal en los años de plomo. Dos allegados al intendente de San Isidro, Gustavo Posse, confirmaron que el jefe comunal fue uno de quienes recomendó a Gray desistir de esa vía e incluso le habría sugerido que, de no mediar sorpresas, el vecinalista se haría de una lista oficial para los comicios de octubre.
Desde el entorno de Kunkel tampoco desmintieron esa versión y precisaron que “los mismos especialistas en el tema de los derechos humanos que tenemos, no nos dieron por ahora indicios sobre la vinculación de Groppi con ese tema. Pero si surgiese, lo bajaríamos de inmediato”, aseguraron.
En ese mar de incertidumbres navega, como tantos otros actores, el vecinalismo. Acaso con la única verdad que los alienta y que acuño en sus textos uno de los más lúcidos pensadores contemporáneos. “El único programa de los políticos es permanecer en sus cargos” apostrofó en sus últimos escritos Cornelius Castoriadis, en una de las más crudas descripciones de la que estimó como la única razón de vida de esa estirpe.
Pocas horas después, el concejal justicialista Ángel Camilleri asumía que la mesa de unidad de dirigentes del kirchnerismo en la que se sienta también el PJ podría respaldar la candidatura a Intendente del vocero del ministerio de Desarrollo Social, Fernando Gray.
La irrupción de Groppi en los fastos peronistas estaba prevista de antemano pero no del modo que ocurrió. Ya el mismo martes al mediodía y en un acto oficial de la Municipalidad en tributo a la mítica esposa del General Perón, el Intendente había resuelto que Martín Rodríguez, subsecretario de Tierras, se convirtiese en el funcionario que lo encabece.
El golpe de mano del vecinalismo sobre el deshilachamiento del justicialismo tiene sin embargo escaso significado fuera del microclima que se empecinan en prefabricar quienes se encuentran embarcados de forma definitiva en el proceso electoral. Aún cuando formalmente el inicio de la campaña esté previsto para el próximo 30 de julio.
La repercusión del acto obtuvo impacto hacia dentro del oficialismo, enfrascado en un soterrado debate sobre los pasos a seguir, ahora que la amenaza de una disputa abierta en las urnas se ha hecho carne en sus principales dirigentes. Allí y luego de la peronización del discurso de Groppi alentada por los jóvenes G, parece haber quedado rezagada la corriente interna prohijada por Ana María Resia y tutelada por el secretario Legal y Técnico, Marcos Sánchez Closs.
Al calor de una victoria que no parece de momento definitiva, desde ese sector dejaron trascender recién ahora un episodio que atesoraron durante un mes y como una forma de canalizar su disgusto por no haber sido parte del acto de lanzamiento a la arena política de uno de los funcionarios preferidos de la esposa del Intendente. “Se pasaron de vueltas y llevaron a un imitador de Kirchner como gran atracción”, soltó la fuente.
Contrastaron ese dato con la adhesión lograda para el acto de las “62” de parte del diputado nacional Carlos Kunkel. También con el modesto desempeño que tuvo esa misma noche la presentación en el Luna Park de la Corriente Peronista Bonaerense (COPEBO), que vio desgranarse durante las horas previas la lista de invitados que había pergeñado. Entre ellos, el titular del Anses, Sergio Massa, y Fernando Suárez del Partido Participación Popular.
La preocupación del edil kirchnerista Daniel Saavedra por la misiva de Kunkel, sumó otro motivo de júbilo entre los jóvenes G, quienes confiaron que lograron un acercamiento con el legislador durante el lanzamiento de la Junta Grande de la Mesa Sindical K de Almirante Brown el pasado 27 de abril.
Saavedra, alineado con Gray, suma tanto desconcierto como su mentor quien insiste en peregrinar por despachos oficiales con una versión subrayada y señalizada del libro “Nunca Más” mediante el que intentaría vincular a Groppi con la represión ilegal en los años de plomo. Dos allegados al intendente de San Isidro, Gustavo Posse, confirmaron que el jefe comunal fue uno de quienes recomendó a Gray desistir de esa vía e incluso le habría sugerido que, de no mediar sorpresas, el vecinalista se haría de una lista oficial para los comicios de octubre.
Desde el entorno de Kunkel tampoco desmintieron esa versión y precisaron que “los mismos especialistas en el tema de los derechos humanos que tenemos, no nos dieron por ahora indicios sobre la vinculación de Groppi con ese tema. Pero si surgiese, lo bajaríamos de inmediato”, aseguraron.
En ese mar de incertidumbres navega, como tantos otros actores, el vecinalismo. Acaso con la única verdad que los alienta y que acuño en sus textos uno de los más lúcidos pensadores contemporáneos. “El único programa de los políticos es permanecer en sus cargos” apostrofó en sus últimos escritos Cornelius Castoriadis, en una de las más crudas descripciones de la que estimó como la única razón de vida de esa estirpe.
Daniel Bilotta (PUNTO CERO-Inforegión).
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