BUENOS AIRES, Agosto 09, (PUNTO CERO-La Política OnLine) El Presidente y economista de Agropuerto S.A. , Juan Manuel Rebolini, dialogó con la Política OnLine y dio su punto de vista sobre los choques que se vienen dando entre el Gobierno y el sector del campo en los últimos días.
"Esto no es de ahora. Tanto la Confederación Rural Argentina como la Carbap lo vienen enfrentando desde hace más de dos años. Lo que pasa es que la Rural siempre tuvo un perfil más bajo. Creo que hubo más presión de los socios, de las bases y de los productores de la ganadería que, además, están ahogados por el tema climático. Esto fue la gota que rebalzó el vaso", aseguró.
La Política Online ¿Usted creé que va a tener éxito la estrategia que tomó el presidente, Néstor Kirchner, de querer reducir el conflicto a una lucha con la Rural?
No sé si tendrá éxito. Creo el tema es de ambos lados. Por un lado está el Gobierno y creo que el secretario de Agricultura, que en lugar de enojarse hubiera sido más conveniente agradecerle el esfuerzo por el país y por los fondos y a partir de ahí hubiera manifestado las necesidades del sector.
Me parece que hubiera sido mucho más exitoso que ése portazo y esa actitud que no están a la altura de un presidente de la Nación y de su secretario. Da la pauta de alguien reaccionario.
LP: ¿En cuanto a la Sociedad Rural Argentina?
Si bien es verdad lo que plantean, creo que uno debe ser coherente con las actitudes que se vinieron manifestando. Ellos nunca se plegaron a un paro de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap) y utilizaron una tribuna para decir lo que se venían callando. Si esa era la postura la tendrían que haber mantenido. Me parece que ambas partes están equivocadas.
LP: Es claro que los problemas que afectan al sector son las retenciones, la falta de gas oil, de fertilizantes, entre otras cosas. ¿Cómo podría solucionarse esto?
El Gobierno tiene un gran problema porque por un tema eleccionario está barriendo bajo la alfombra. No se fijan en temas puntuales como tratar de mantener el precio de la energía nacional por debajo de la internacional.
Hay que tener en cuenta también que la cosecha aumentó un 50 por ciento y el gasto público se multiplicó por cinco.
LP: ¿Se puede mantener este nivel de gasto?
No. Hay que discutir las presiones tributarias y también hay que saber mantener una estructura de regulación de exportaciones basadas hoy por hoy en el trigo, la carne y los lácteos.
Con el cambio de ciclo los mercados sufren una perdida peor. Si se continúa con la política actual y a pesar de tener una gran liquidación no nos va a alcanzar para exportar. Vamos a tener que importar carne para nosotros.
LP: ¿Habría que liberar la exportación entonces?
Exactamente. La ganadería necesita tener liberada las exportaciones para poder aumentar la oferta y así competir con la agricultura.
LP: ¿Creé que kirchner busca quedar enfrentado, desde el punto de vista político, a la vieja oligarquía vacuna?
El presidente siempre busca enemigos cuando hay una dificultad y no sabe como resolverla. Busca un culpable porque no tiene soluciones al futuro. Esta ha sido su estrategia desde que asumió. Es un estadista.
En mi opinión creo que los problemas hay que afrontarlos con soluciones y no revolviendo el pasado. Además, hay que tener en cuenta que la mayoría de los grandes ganaderos son empresarios del exterior.
Las direcciones han cambiado de mando. Los primeros cabañeros no tienen nada que ver con la derecha agropecuaria argentina. No son los de los años veinte o treinta. La mayoría de los capitales que se han vendido en los noventa provienen del extranjero.
LP: ¿No le suena un tanto paradójico que un presidente se pelee con un sector que le da retenciones y que además protagonizó la recuperación del país?
Hasta ahora no encontró otro sector para financiar la política. Si realmente conversara con el sector sabe que tiene que ceder con la presión tributaria. Por eso hace esto frente a la opinión pública es como buscar un chivo expiatorio. Ataca a los efectos y no a las causas.
LP: ¿Por qué creé que recién ahora el campo se animó a enfrentar al presidente si hace cuatro años que vienen manteniendo la misma política agropecuaria?
Esto no es de ahora. Tanto la Confederación Rural Argentina como la Carbap lo vienen enfrentando desde hace más de dos años. Lo que pasa es que la Rural siempre tuvo un perfil más bajo. Creo que hubo más presión de los socios, de las bases y de los productores de la ganadería que, además, están ahogados por el tema climático. Esto fue la gota que rebalzó el vaso.
LP: ¿El campo lo ve débil al Presidente?
No. Para mi no lo ven débil. Si lo vieran de esa forma lo hubieran enfrentado mucho más. Creo que lo respetan, pero que han empezado a preocuparse por la gran concentración de poder. Si lo vieran frágil le hubiera hecho más paros.
LP: ¿Y a Cristina Kirchner? ¿Cómo la ven?
El sector no espera cambios. Sobre todo porque cuando ella habla de concertación entre el gobierno, los sindicatos y las empresas el sector agropecuario se sigue viendo en la misma situación.
Actualmente, menos del 4 por ciento de la política beneficia al sector agropecuario.
LP: ¿Cómo creé que evolucionará esta situación entre el campo y el Gobierno?
Creo que seguirá el mismo camino del paro de Carbap. La dirigencia no tiene mucha fuerza por eso el gobierno lo enfrenta. ¿Por qué a Moyano no lo enfrenta?.
El gobierno sabe que el agropecuario no tiene el poder de cambiarles la situación antes de octubre porque no tienen fuerza.
LP: ¿Qué opina sobre las declaraciones de Alberto Fernández que definió al campo como "unos locos"?
Fue una actitud muy desacertada. Ambos Fernández se mueven dentro de la verborragia de contestación y cuando no tiene motivos buscar justificar con estas respuestas cosas injustificables.
LP: ¿Coincide con la teoría que indica como la única forma de abastecer al mercado interno y externo es a través de un aumento de la producción?
Si hay que aumentar la producción para abastecer a los mercados del trigo, los lácteos y la carne vacuna. Hay que dejar que se creen políticas que no desalienten la producción y por lo tanto eliminar las restricciones a las exportaciones, la regulación de precios y de los mercados.
LP: ¿Qué cambios necesitaría el modelo actual?
Creo que esto es un tema que tiene que ver con la política económica nacional. Antes que nada hay que adecuar los niveles de gasto público a la realidad del país y apoyar a los sectores más necesitados.
"Esto no es de ahora. Tanto la Confederación Rural Argentina como la Carbap lo vienen enfrentando desde hace más de dos años. Lo que pasa es que la Rural siempre tuvo un perfil más bajo. Creo que hubo más presión de los socios, de las bases y de los productores de la ganadería que, además, están ahogados por el tema climático. Esto fue la gota que rebalzó el vaso", aseguró.
La Política Online ¿Usted creé que va a tener éxito la estrategia que tomó el presidente, Néstor Kirchner, de querer reducir el conflicto a una lucha con la Rural?
No sé si tendrá éxito. Creo el tema es de ambos lados. Por un lado está el Gobierno y creo que el secretario de Agricultura, que en lugar de enojarse hubiera sido más conveniente agradecerle el esfuerzo por el país y por los fondos y a partir de ahí hubiera manifestado las necesidades del sector.
Me parece que hubiera sido mucho más exitoso que ése portazo y esa actitud que no están a la altura de un presidente de la Nación y de su secretario. Da la pauta de alguien reaccionario.
LP: ¿En cuanto a la Sociedad Rural Argentina?
Si bien es verdad lo que plantean, creo que uno debe ser coherente con las actitudes que se vinieron manifestando. Ellos nunca se plegaron a un paro de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap) y utilizaron una tribuna para decir lo que se venían callando. Si esa era la postura la tendrían que haber mantenido. Me parece que ambas partes están equivocadas.
LP: Es claro que los problemas que afectan al sector son las retenciones, la falta de gas oil, de fertilizantes, entre otras cosas. ¿Cómo podría solucionarse esto?
El Gobierno tiene un gran problema porque por un tema eleccionario está barriendo bajo la alfombra. No se fijan en temas puntuales como tratar de mantener el precio de la energía nacional por debajo de la internacional.
Hay que tener en cuenta también que la cosecha aumentó un 50 por ciento y el gasto público se multiplicó por cinco.
LP: ¿Se puede mantener este nivel de gasto?
No. Hay que discutir las presiones tributarias y también hay que saber mantener una estructura de regulación de exportaciones basadas hoy por hoy en el trigo, la carne y los lácteos.
Con el cambio de ciclo los mercados sufren una perdida peor. Si se continúa con la política actual y a pesar de tener una gran liquidación no nos va a alcanzar para exportar. Vamos a tener que importar carne para nosotros.
LP: ¿Habría que liberar la exportación entonces?
Exactamente. La ganadería necesita tener liberada las exportaciones para poder aumentar la oferta y así competir con la agricultura.
LP: ¿Creé que kirchner busca quedar enfrentado, desde el punto de vista político, a la vieja oligarquía vacuna?
El presidente siempre busca enemigos cuando hay una dificultad y no sabe como resolverla. Busca un culpable porque no tiene soluciones al futuro. Esta ha sido su estrategia desde que asumió. Es un estadista.
En mi opinión creo que los problemas hay que afrontarlos con soluciones y no revolviendo el pasado. Además, hay que tener en cuenta que la mayoría de los grandes ganaderos son empresarios del exterior.
Las direcciones han cambiado de mando. Los primeros cabañeros no tienen nada que ver con la derecha agropecuaria argentina. No son los de los años veinte o treinta. La mayoría de los capitales que se han vendido en los noventa provienen del extranjero.
LP: ¿No le suena un tanto paradójico que un presidente se pelee con un sector que le da retenciones y que además protagonizó la recuperación del país?
Hasta ahora no encontró otro sector para financiar la política. Si realmente conversara con el sector sabe que tiene que ceder con la presión tributaria. Por eso hace esto frente a la opinión pública es como buscar un chivo expiatorio. Ataca a los efectos y no a las causas.
LP: ¿Por qué creé que recién ahora el campo se animó a enfrentar al presidente si hace cuatro años que vienen manteniendo la misma política agropecuaria?
Esto no es de ahora. Tanto la Confederación Rural Argentina como la Carbap lo vienen enfrentando desde hace más de dos años. Lo que pasa es que la Rural siempre tuvo un perfil más bajo. Creo que hubo más presión de los socios, de las bases y de los productores de la ganadería que, además, están ahogados por el tema climático. Esto fue la gota que rebalzó el vaso.
LP: ¿El campo lo ve débil al Presidente?
No. Para mi no lo ven débil. Si lo vieran de esa forma lo hubieran enfrentado mucho más. Creo que lo respetan, pero que han empezado a preocuparse por la gran concentración de poder. Si lo vieran frágil le hubiera hecho más paros.
LP: ¿Y a Cristina Kirchner? ¿Cómo la ven?
El sector no espera cambios. Sobre todo porque cuando ella habla de concertación entre el gobierno, los sindicatos y las empresas el sector agropecuario se sigue viendo en la misma situación.
Actualmente, menos del 4 por ciento de la política beneficia al sector agropecuario.
LP: ¿Cómo creé que evolucionará esta situación entre el campo y el Gobierno?
Creo que seguirá el mismo camino del paro de Carbap. La dirigencia no tiene mucha fuerza por eso el gobierno lo enfrenta. ¿Por qué a Moyano no lo enfrenta?.
El gobierno sabe que el agropecuario no tiene el poder de cambiarles la situación antes de octubre porque no tienen fuerza.
LP: ¿Qué opina sobre las declaraciones de Alberto Fernández que definió al campo como "unos locos"?
Fue una actitud muy desacertada. Ambos Fernández se mueven dentro de la verborragia de contestación y cuando no tiene motivos buscar justificar con estas respuestas cosas injustificables.
LP: ¿Coincide con la teoría que indica como la única forma de abastecer al mercado interno y externo es a través de un aumento de la producción?
Si hay que aumentar la producción para abastecer a los mercados del trigo, los lácteos y la carne vacuna. Hay que dejar que se creen políticas que no desalienten la producción y por lo tanto eliminar las restricciones a las exportaciones, la regulación de precios y de los mercados.
LP: ¿Qué cambios necesitaría el modelo actual?
Creo que esto es un tema que tiene que ver con la política económica nacional. Antes que nada hay que adecuar los niveles de gasto público a la realidad del país y apoyar a los sectores más necesitados.
Hay que arreglar la política energética, la de tarifas y fomentar un crecimiento equilibrado entre el interior y en los centros urbanos. Creo que la base está en una política de distribución tributaria más equilibrada. (PUNTO CERO-La Política OnLine).
No hay comentarios.:
Publicar un comentario